Capítulo 14

534 20 0
                                    

-¿Qué habrá pasado? -Hugo deja el cuerpo de Dani en el suelo y se incorpora. -¿Dónde está Eva?
La busca con la mirada por el salón, pero no la encuentra.
-No tengo ni idea, Hugo, pero hay un charco de sangre...
Hugo observa un segundo a Ángel. Sabe de sobra lo que ha insinuado y aunque el por una parte, al principio, haya pensado lo mismo, se niega a creerlo.
-Voy a buscarla.
-Pero... Bueno, vale.
Hugo va por toda la casa sin poder dar con el paradero de Eva hasta que escucha sollozos provenientes de uno de los dormitorios.
En seguida se dirige hacia allí.
-¿Eva?
Abre la puerta y se encuentra con la chica en una esquina de la habitación.
-Eva, soy Hugo.
-Déjame.
-Prometí venir a visitarte ¿recuerdas?
Eva eleva la mirada y sus ojos se encuentran con los de Hugo. Él se sienta junto a ella.
-Si, lo recuerdo.
-Bueno es saberlo.
Hugo sonríe y se acerca todavía más hacia ella hasta que al observarla puede apreciar algo de sangre en las manos de Eva.
Se levanta repentinamente.
-Eva. Tengo que ir abajo con Ángel y ayudarle con... Ya sabes.
Eva se gira hacia él, su semblante es completamente neutro, hasta a Hugo le da un escalofrío.
-¿Vais a salvarle?
-Sí.
La castaña solo asiente.
-Deberías darte una ducha. -Señala sus manos. -Llámame cuando acabes y volveré aquí. Tengo que hablar contigo.
Ella vuelve a mirarle y se pone de pie.
-Vale.
Hugo se acerca dubitativo y acaba por plantar un beso en sus labios.
-Volveré.
-Lo sé.

-Fue demasiado extraño.
Hugo se sitúa junto a Ángel en la sala de espera.
-¿El qué?
-Con Eva. Fue muy raro. Ella... Lo que insinuabas, Ángel... Es cierto. Tenía las manos llenas de sangre y no sé, de repente me entró algo de pánico. -Admite.
-¿Pánico por qué?
-Ángel... Hablamos de Eva... Es tan, no sé, frágil... Nunca lo imaginaría de Eva ni en defensa de sí misma. Que casi mata a alguien, joder. -Susurra.
-En momentos en los que estamos aterrizados, tendemos a hacer cosas que quizá nunca haríamos. Y si es en defensa y Dani no... No va a ocurrir nada, puedes estar tranquilo.
-Ya, tienes razón. Me preocupo por tonterías.
-No son tonterías, Hugo. Es normal, aunque te lo digo de verdad, va a salir todo bien.
Pero a pesar de sus palabras Hugo sigue pensando en ello.
Estaba demasiado extraña como para no hacerlo. Parecía no ser Eva... Suspira
Está demasiado confundido.
Y justo cuando un médico se acerca a comentarles la situación de Dani, su móvil comienza a sonar.
-Ángel, tengo que irme. Ya me contarás sobre Dani. Me voy a ver a Eva.
Llega lo más rápido que puede hasta allí y llama al timbre, esperando que le abra.
-Hola.
-Hola.
Eva le mira esperando a que pase al interior del piso pero Hugo no se mueve, solo puede quedarse mirándola absorto, pensando.
-¿Vas a pasar?
La chica tiene un aspecto distinto, no es nada físico, pero Hugo puede notarlo. Eva está muy cambiada en cuanto a su forma de ser. Es más seca, con una voz más rasposa que antes. Simplemente diferente.
-Si, claro.
El rubio camina y directamente se sienta sobre el sofá.
Al principio es todo muy incómodo pero finalmente se vuelve para mirarla.
-Ángel ha conseguido que vuelvas conmigo a mi casa. -Empieza apartando sus ojos de los de ella. 
Aunque quiere estar con ella, la noticia ya no le produce las mismas sensaciones que antes. Solo puede ver las manos ensangrentadas de Eva y su mirada, no puede evitarlo.
-Pero está todo en tu decisión, no es necesa...
-Voy a coger mis cosas.
-Oh... Em, vale. Pero puedes esperar un rato y ya lo haces cuando nos vayamos.
Asiente.
-Oye, Eva, ¿estás bien? Te noto... Distinta. -Prueba, intentando hacerla hablar, queriendo saber que la pasa.
-No, todo bien.
-Vale. Sabes que tengo que preguntarlo ¿no? No puedo dejarlo pasar...
-Ya. Lo suponía.
-¿Tú has sido quien ha...?
-Sí, Hugo. Dani vino a por mí, quería llevarme con él pero tuve la buena suerte de coger a tiempo un objeto y golpearle en la cabeza.
El rubio la observa estupefacto.
Tenía claro que Eva había sido la responsable de encontrar a Dani tirado en el suelo pero escuchárselo decir así a ella... Hizo que un escalofrío le recorriera.
-Está en el hospital, bastante grave. -No quiere que suene a reproche, verdaderamente, en realidad, por una parte se alegra. Es decir, Eva estaba en peligro y consiguió mantenerse a salvo. La forma fue muy distinta a lo que hubiese esperado pero... Por lo menos estaba bien. Pero sin querer si que suena así.
-Si esperas que me disculpe o que dé señales de arrepentimiento, te adelanto que no va ha ocurrir. Y antes de que sigas mirándome de esa forma voy a decirte que si no llego a hacerlo ese tío me habría llevado con él y después de hacer lo que quisiese conmigo me habría... Ya sabes lo que me habría hecho. No pido que me comprendas, pero no puedes seguir juzgándome así.
-Perdón, tienes razón. Estoy preocupado por ti y lo que pueda pasarte respecto a esto y por eso estoy así.
-Bueno, lo entiendo, pero yo estoy bien.
Hugo asiente mirándola y se echa sobre ella para envolverla con sus brazos.
-Ve a recoger tus cosas, yo te espero aquí.
Eva le dedica una pequeña sonrisa antes de caminar rápido hasta la habitación que compartía con Dani.

Eva y Hugo - Carpe diemDonde viven las historias. Descúbrelo ahora