"En está vida no todo el mundo suele vivir como quiere o como siempre ha soñado vivir, pero eso no significa que no podamos convertirnos en las personas que queremos ser".
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Prohibido hacer copias y adaptaciónes, respeten el esfuerzo de cada escri...
El sonido chillón de mi alarma me despierta, creo que voy a tener que cambiar ese timbre y poner mi canción favorita.
Me levanto para hacer mi rutina de mañana de siempre.
30 minutos después salgo del baño envuelta en la toalla y me dirijo hacia el armario para elegir un look sencillo pero lindo para mí primer día de clases. Poco después encuentro el look ideal, unos shorts un poco cortos azul marino, una camisa blanca con mangas cortas que empiezan desde un poco debajo de mis hombros, unas converses del mismo color, acompañado con un brillo rosa que me eché en los labios, el cabello con algunas ondas y mi chaqueta de cuero del mismo color de mis shorts. Me dirijo hacia la sala con mi mochila cargada en mi hombro izquierdo.
—Hola princesa, buenos días, estás hermosa—. Me sonríe mi tía.
—Holaa, buenos días, tu también lo estás, ¿qué hay para desayunar?—me siento. —Tortilla de huevo con jugo de naranja— me sirve.
Desayunamos y ella me lleva en su coche. 20 minutos después llegamos al destino.
Me bajo del coche y me despido de tía. El año pasado me iba sola porque mis padres ni se tomaban la molestia de llevarme pero ahora será diferente, aunque le dije a mi tía que las veces que no pueda yo me podría ir sola.
Llego a la entrada, me dirijo al patio donde acostumbran a estar todos antes y después de entrar a nuestros respectivos salones y en el receso también.
Sigo caminando hasta que llego a una parte del patio donde están las mesas y ahí encuentro a las amigas más cercanas que tengo de mi salón incluso de toda la secundaría.
—Oh ¡Hola, Natalia! Te extrañé mucho amiga.— Me da un pequeño abrazo y me sonríe.
—Hola, Clara, si yo también—Le devuelvo la sonrisa y saludo a las demás.
Clara empezó a estudiar con nosotros desde 3er grado y es muy unida a mí, demasiado.
—Cuéntenme, ¿cómo les fue en el verano, qué hicieron?— Me siento en una de las sillas que rodea la mesa y las sillas de las demás.
—Yo fuí a la playa con mi familia.—Me responde Laura mientras mira su celular. —Yo fui a las montañas...— Me mira Raquel con emoción.
—Yo no fui a ninguna parte en especial pero la pasé bastante bien, con no tener que hacer deberes era suficiente—. Dice Claudia y nos reímos todas, ella siempre ha sido así.
—Yo tampoco salí, solo me quedaba en mi cuarto viendo Netflix y leyendo.— Responde Clara.
—Yo también salí a la playa pero me la pasé casi todo el tiempo metida en mi cuarto—. Nos mira Sofía con desinterés.
—Pues yo hice lo mismo que Claudia, saben que mis vacaciones no son divertidas—Hago una mueca.
Ah, se me había olvidado algo, no las había presentado, mi team está conformado por: 4 chicas, que conmigo somos 5, obvio.
Clara, una chica muy carismática, cabello rubio, chino, ojos verdes, cuerpo lindo, es muy amigable y como dije, la más cercana a mí. Laura, la chica que va con una sonrisa por la vida, siempre le ve lo positivo a todo y es medio loca, blanca, ojos negros oscuro, cabello largo súper liso y un cuerpo normal. Raquel, una chica muy hermosa, un poco carismática, tiene el cabello negro con ondas, y los ojos azules, es la más desarrollada de nosotras a pesar de que no nos a caído la pubertad ya como tal, su estilo es muy sencillo pero lindo. Sofía, bueno. Sofía, Sofía , Sofía. Ella no le importa lo que los demás piensen de ella y es un poco “emo” si, creo que sí, siempre se viste de negro, se maquilla de negro, tiene los ojos verdes y el cabello negro chino, cuerpo lindo, eso sí, es muy buena onda, solo con nosotras y algunas personas más. Claudia es más alta que nosotras pero solo por un poco, es muy linda, carismática pero a la vez es un poco odiosa, tiene los ojos marrones claro y el cabello del mismo color y liso, cuerpo lindo y su estilo es muy femenino.
Charlamos un poco más y entramos en el salón de clases, me dirigí hacia uno de los asientos y mire a los lados y vi caras nuevas, hay gracias Diosito.
La profesora entra al salón y se para frente a nosotros diciendo las siguientes palabras:
—Hola chicos, espero que hayan pasado unas lindas vacaciones, como ven hoy, hay cara nuevas.
Los chicos nuevos se levantaron y se ubicaron al lado de la profesor.
—Chicos estos son: Robert, Mario, y las gemelas Sol y Luna.— Los chicos saludaron un poco tímidos y se dirigieron a sus respectivos asientos.
—Bueno cómo hoy es el primer día de clases solo les voy a indicar algunas cosas que vamos hacer en el año escolar y algunas otras cosas más.— Se sentó en su escritorio.
Cuando terminó la clase mi team y yo nos fuimos al parque para charlar un poco y actualizarnos de todo.
Después me dirigí al departamento, comí sola por que mi tía no había llegado y se iba a tardar.
Me dirigí a mi cuartos, me duché, me puse algo sencillo y me senté en mi cama a escuchar música, y me puse a pensar de que no me había ido tan mal y espero que siga siendo así.
Paso la tarde y la noche como siempre y todo estaba muy tranquilo y antes de irme a dormir chateé un poco con Amanda y me dijo que va a empezar a estudiar en la secundaria donde voy yo.
La mañana siguiente me desperté por un ruido que venía desde la sala, miré el reloj y todavía era muy temprano y a mi alarma no le tocaba sonar todavía. Bueno, yo tenía dos alarmas, una en mi celu y una en el reloj que se encontraba encima de la mesita de noche que estaba al lado de mi cama, pero a ninguna le tocaba.
Me levanté y la escena que me encuentro es la de mi tía peleando con mi madre.
Todo iba en paz hasta que aparece ella… Me quedo estática en frente de ella dos y hay es cuando empieza todo…
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