Capítulo 17.

1.3K 63 15
                                    

Summer.

Ya en el cielo de Indiana comenzaba a oscurecer. Luego de una mañana llena de risas, bromas, vines, groserías y muchas cosas más, algunos decidieron irse a descansar, y por algunos me refiero a Lya, Aaron, Johnson, Gilinsky, Shawn, Carter y Nash. Cameron y Kylie estaban en Dios sabe donde, quizás follando en cualquier parte de esta gigantesca casa, y Matthew y Camila discutían en la habitación de Taylor, el cual no sé donde se encuentra, por las camas. Yo estaba en el living de la planta alta, ya que Nash dormía en el de abajo, jugando a la fifa. Lo bueno de Taylor es que tiene buen gusto en los video juegos, por lo que vi.

Escucho un pequeño ruido, pero lo ignoro. Estoy demasiado concentrada en partirle el culo al Barça que no noto que fue ese ruido.

- Pensé que estabas en la piscina o algo. - Habla una ronca voz a mi lado.

Miro de reojo y veo a un Taylor todo despeinado y adormilado en la puerta.

- Pareces que recién follas a alguien. - Río y sigo con la partida.

- No, me había quedado dormido viendo televisión con Nash. - Se sienta a mi lado.

Río sin despegar mis dedos del control y mi vista de la gran pantalla plana que se encuentra delante de mi.

- Oye, Summer. - Comienza a hablar y ya sé a donde quiere llegar, por lo que pauso la partida y me dirijo a su mirada. - Lo de esta mañana, yo, sigo sin entender. -

- Taylor - Comienzo a decir, pero la verdad es que no encuentro las palabras correctas para expresarme en este preciso momento. - Un beso no inicia una relación. Si fuera así, el mundo estaría lleno de parejas. -

- No me refiero a iniciar una relación, Sum. - Dice inmediatamente. - Me refiero a que no entiendo porque actúas así. -

- ¿Actuar como? - Le interrumpo.

- Tú no eres una puta. - Dice. - Si me besaste y me contaste algo que nadie sabe es por una razón. -

- Te seré sincera. - Giro mi cuerpo un poco para estar completamente frente a él. - La razón por la que no quiero intentar algo contigo no es porque no me gustes. Taylor, tú me gustas. - Río tímidamente. - Pero tengo miedo a que si ando de la mano contigo en público, si nos besamos, si nos abrazamos o cosas así, las fans me tengan odio y comiencen a decirme cosas que no quisiera escuchar. - Sinceré. - No somos adolescentes normales, Taylor, somos famosos. -

Él me sonríe tiernamente y retira un mechón que se encuentra en mi rostro, dejando su mano en mi mejilla.

- Somos normales. - Comienza a decir. - En la vida siempre habrá alguien que querrá impedir que cumplas tus sueños. Siempre tendrás un enemigo, habrá alguien que quiera arruinar cada relación o logro que tengas en tu vida. Pero, ¿sabes algo? Eso es producto de la envidia. - Relame sus labios y me muestra su sonrisa con piezas metálicas color rojo. - Y no me importa que me critiquen, me odien y me digan el abecedario entero de groserías. Lo que me importa es que estoy siendo feliz. A ti igual debería de importarte eso. Porque no hay persona de la que más dependas que tu misma. Tú decides si quedarte viviendo en el pasado, como vivir el presente y creas tu futuro, no nadie más. - Se detiene por unos segundos. - Y yo quiero vivir mi presente a . -

Muerdo mi labio y miro los suyos. El pega su frente con la mía, aguantando la parte trasera de mi cabeza para que yo no me alejara.

- Estoy llorando, ¿no? - Le pregunto.

Él asiente y ambos reímos.

- No es un sí seguro, pero creo que vale la pena intentarlo. - Le susurro.

Two more | Caniff and Espinosa.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora