¿El Enano del que me enamore es un Rey?

Una cena con 13 Enanos

Advertencias:

Los personajes que aparecen en esta historia no me pertenecen, todos y cada uno de ellos son propiedad de J.R.R. Tolkien, con algunas excepciones ya que he metido algunos personajes de mi propia invención, sin embargo la historia que a continuación se presenta es total y completamente mía.

Ahora sí, sin más por el momento, disfruten de la historia.

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Al día Siguiente Bilba se rehusó a salir de su Smial, y comenzó a hacer los preparativos para la cena se esa noche, puso a marinar las carnes y preparo las distintas masas para el pan y los pasteles que iba a hornear, le tomo varias horas pero una vez que termino sus asuntos en la cocina se dedicó a limpiar "Bolsón Cerrado" de principio a fin, por lo que no quedo ningún solo Rincón de su Smial sin haber sido limpiado por sus habilidosas manos.

Bilba recordó las historias de su madre sobre los Enanos, y el comportamiento que estos acostumbraban a tener, pero además ella había trabajado en la taberna del "Pony Pisador" durante varios años durante su interpolación, por lo que tenía una idea más real del comportamiento de estos en una fiesta, así que sabía más o menos que esperar y cómo comportarse ante ellos, pensando en eso tomo algunas de las cosas que pensó que podrían ser lanzadas de aquí para allá por los Enanos y oculto los objetos ricos en valor emocional, mas valía prevenir que lamentar.

Acomodo el comedor disponiendo sillas para todos, Bilba Bolsón no dejaría a ningún invitado de pie, ¡oh no, señor!, ella jamás seria recordada por eso, ¡jamás!, 17 sillas para 13 Enanos y 4 Hobbits y una silla alta para Gandalf fueron acomodadas en el comedor, aunque Bilba estaba tentada a dejar al mago en una silla pequeña como venganza por hacerla pasar por esto, pero algo en la mirada de su madre evito que lo hiciera y eso la molesto un poco, quizás podría vengarse del mago de otra forma...

Cuando dieron la hora de la comida Bilba se encerró en la cocina y no dejo que nadie entrara en ella, si alguien quería algo debía pedirlo desde fuera de la cocina y esperar hasta que Bilba terminara de hacer lo que estuviera haciendo en ese momento para dárselo, pues no quería que nadie metiera mano a lo que estaba preparando, especialmente Prímula que con su embarazo tendía a comer incluso más que un pequeño Faunt, lo que significaría que tendría que hacer aún más comida ya que esta se concentraría más en comer que en ayudarla y lo más seguro es que no estaría todo listo a tiempo para la cena, Por otro lado su madre echaría la comida a perder si trataba de ayudarla.

Una vez que termino de cocinar llevo todo al comedor y lo acomodo de modo que todo cupiera perfectamente, es más, no había ningún lugar sobre esa mesa que no fuera ocupado por la deliciosa comida de Bilba.

- 30 minutos antes de la Cena – dijo orgullosa admirando su trabajo.

- ¡Bien hecho! – felicito Belladona a su hija dándole ligeros golpecitos en el hombro – sabía que podías hacerlo.

- La próxima vez avisa con más tiempo – le regaño – ahora – se giró hacia su familia – a arreglarse – señalo a Belladona y a Drogo quienes obedecieron a regañadientes.

- Me asegurare de que se ponga algo lindo - dijo Prímula antes de llevar a su esposo a tomar un baño.

Bilba no estaba muy segura de dejar a Prímula sola, una Hobbit embarazada era peligrosa, gracias a Yavanna que había pensado en eso y había preparado un poco más de comida en caso de..., pero aun así no dejaba de sentirse inquieta, por lo que se apresuró a bañarse y a cambiarse, rápidamente se puso un vestido azul sencillo pero elegante, el corpiño tenia bordado algunas flores y estaba anudado en la parte de atrás con un listón azul de un tono más fuerte, terminando en un lazo, las mangas del corpiño le llegaban a la mitad del brazo y tenían volantes blancos al igual que la falda, ato su largo cabello castaño claro en un moño de lado y se puso el collar que le había regalado su padre en su mayoría de edad, un camafeo de plata con la imagen de su familia en el interior y su nombre gravado al reverso, en la cubierta en relieve había una Bellota, el símbolo que su abuelo el antiguo Thain le había otorgado a ella cuando llego a su etapa de interpolación.