SHE IS MINE ✅

C A P Í T U L O 35

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Empiezo a moverme contra él. Al parecer le gusta ya que jadea contra mis labios. Realmente no sé que tengo que hacer. Siento como el bulto que siento entre mis piernas se hace más grande y sigo moviéndome contra él.

—Katherine. —Dice entre jadeos. —Para, no me podre controlar si sigues haciendo eso.

—No quiero que te controles. —Le digo segura.

—¿Estas segura? —Pregunta esperando mi respuesta.

—Me siento segura contigo. —Digo. Y Aritz no espera más y enrolla mis piernas en su cintura y empieza a salir del lago mientras nos besamos sin parar.

Al salir del lago me lleva hasta donde habíamos estado picando comida. Me suelta para poder apartar todo, bueno realmente lo que hace es coger la manta y tirar todo lo que estaba ahí, luego pone la manta en otro lado, alejado de todo los platos de comida que estaban. Vuelve a poner la manta en la hierva. Mis nervios no para de aumentar.

Aritz vuelve hacía mi y me agarra de las caderas para hacerme a él y volver a juntar nuestros labios. Aritz empiezo a caminar dando la espalda a la manta, cuando llegamos a ella Aritz empieza a tumbarse en la manta, y abajo y yo arriba.

Mis besos empiezan a bajar desde sus labios hasta su cuello. Y quiero bajar más pero su camiseta me lo impide.

—¿Pu-puedo quitártela? —Pregunto nerviosa.

—No lo tienes que preguntar. Tu quítame todo lo que quieras. —Responde con una sonrisa.

Empiezo a subir su camiseta poco a poco hasta quitársela. Ya le había visto el torso más de una vez pero no de tan cerca, paso mis manos por su abdomen. Aritz hace que cambiemos de pistura, ahora yo me encuentro tumbada contra la manta y él encima mio. Aritz bruscamente empieza a besarme, y yo intento seguir el mismo ritmo que él.

—Voy a empezar a quitarte la ropa. ¿Vale? —Avisa.

Aritz quita mi camiseta de tirantes negro y lo tira lejos de nosotros. Sus besos empieza a bajar hasta mi cuello, los mismo que hice yo, pero no para en esa zona si no que sigue bajando, baja hasta el entre medio de mis tetas y tampoco para ahí sino que baja hasta mi abdomen. Yo con todos sus besos no paran de salir pequeños jadeos y gemidos. Aritz deja su mirada en la abertura de mis pantalones, abre mis pantalones y los empieza a bajar, pero no me baja las bragas, no todavía. Tira los pantalones lejos, igual que con la camiseta.

Sus besos empieza otra vez y hace el mismo camino hasta mis labios. Dejo que mis manos hagan los que quieran con el pelo de Aritz, mientras que él posas sus manos en mis pechos y empieza a manosearlos por encima de la tela.

—Esto de sobra. —Dice rompiendo nuestro beso. —¿Puedo? —Pide permiso para quitarme el sujetador. De mi boca no sale nada, no soy capaz de hablar solo puedo asentir con la cabeza.

Aritz empieza a quitar el cierre del sujetador, siento todos sus movimientos en mi espalda —ya que tengo el cierre atrás. —y eso me pone más nerviosa que antes. cuando consigue hace lo mismo que con las anteriores prendas.

Se queda un rato mirando mis pecho. Nunca antes un hombre me había visto los pechos y la verdad, aunque sea Aritz, me siento un poco incomoda es por eso que con mis brazos intento taparlos, pero se queda en un intento ya que Aritz me lo impide.