C A P Í T U L O 34

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Nos encontrábamos todos en la casa de Sam. Todos quiero decir; Aritz, Jenn, Sam, Lucas, Daniel y yo.

Aritz y yo llevamos dos meses de relación, y estos dos meses han sido espectaculares. Han sido los mejores dos meses de mi vida. Me siento muy a gusto y feliz cuando estoy con él.

Hoy estamos en casa de Sam ya que estamos celebrando sus cumpleaños. Sam hoy cumple cuatro meses de embarazo, el siguiente mes ya sabrán cuál es el sexo del bebe, Lucas quiere una niña, en cambio, Sam quiere un niño. Si es niña Lucas a decidido llamarla Sofia, y Sam a decidido si es niño llamarlo Adam. Aritz estuvo insistiendo durante mucho tiempo de que lo llamara Aritz, pero no lo consiguió.

Están todos sentados en el sofá menos Daniel y Aritz, ellos están sentados en el suelo, pero mirándonos a nuestra dirección ya que Jenn nos estaba contando lo que pasó cuando llevo por primera vez a Daniel a la case de sus padres.

—Y de repente se escucha un crash, Daniel tiro un jarrón lleno de flores al suelo. Supliqué para que mis padres no hubieran escuchado el jarrón, pero todas mis súplicas se fueron a la mierda ya que mis padres vinieron corriendo, mi madre con un bate en su mano y mi padre con la escopeta cargada, pensaron que eran ladrones. Pero cuando se dieron cuenta de que era yo dejaron de apuntarme y mi padre con su escopeta empezó apuntar a Daniel. Dios yo me estaba cagando en todo mi ser.—Todos nos estábamos riendo, Dios, no pensé que Daniel fuera tan torpe. —Les tuve que explicar que Daniel era mi novio, cuando mi padre escuchó esa palabra se acerco más a Daniel apuntándolo todavía, cuando se dio cuenta de que Daniel estaba blanco, literalmente, del miedo que tenía agachó el arma. —Daniel tenía la cara roja de vergüenza y eso nos producía más risa. Ya estaba a punto de que me empezara a doler la tripa de la risa. —Nos llevaron a Daniel y a mi a la cocina, nos hicieron sentarnos mis padres también se sentaron, y mi padre se sentó en frente de Daniel y para seguir asustándolos dejó su escopeta el la mesa en direccion a él. Dios, parecía una película de narcos. Empezaron a explicarnos como coño se ponía un puto condon, y todas esas cosas. Pasamos una vergüenza. Yo tenía la cara escondida entre mis manos de lo bochornoso que era. Cuando terminaron la charla ¿sabéis que nos dijeron?—Pregunta Jenn y todos negamos, obviamente. —Bueno ya sabéis la teoría ahora a practicar. —Todos estallamos en carcajadas. Daniel y yo nos quedamos perplejos, ellos en cambios se levantaron y se fueron a su habitación, cuando cerraron la Piera escuchamos como se empezaron a reís de nosotros, no pudimos quedarnos ahí, al final decidimos irnos a casa de los padres de Daniel. En serio chicos fue el peor día de mi vida, y creo que la de Daniel también.

—Si, también fue mi por día. —Habla Daniel. —Fue uno de los días mas vergonzoso de mi vida. No he podido volver a ver a sus padres otra vez.

—Eso es cierto. Lo invité un día a cenar y él se negó rotundamente.

Todos seguimos hablando de tonterías hasta que se hizo tarde y nos tuvimos que ir cada un a sus casa, Lucas se quedo con Sam, Jenn se fue en su coche con Lucas y yo me fui en el coche de Aritz, ya que yo no traje el coche de mis padres.

Aritz empezó a conducir en dirección a mi casa, bueno eso es lo que pensaba ya que cuando tenía que girar a la derecha para que llegara a mi casa no lo hizo, siguió para delante.

—¿Que haces Aritz? —Pregunto. —Por aquí no se va a mi casa.

—Lo sé. No te voy a llevar a casa.

SHE IS MINE  ✅Donde viven las historias. Descúbrelo ahora