Resultaba mucho más incómodo de lo que pensaban, y más teniendo en cuenta que el padre de Alice no dejaba de observarlos y ella aún no había tenido la oportunidad de desconectar el sistema de seguridad. Él había insistido en que se sentaran en el salón mientras él hacía un poco de café acompañado de unas pastas, pero la cocina estaba unida al salón como en la mayoría de casas americanas modernas, por lo que él les seguía observando.
Ellos se encontraban sentados en uno de los sofás negros de la estancia, pero estaban demasiado separados para ser una pareja "joven y enamorada" que se quería tanto como para ir a visitar a uno de sus padres a pesar de los posibles problemas que eso podía acarrear.
- Deberíamos disimular un poco - dijo Alice susurrando y acercándose más a Spencer - si nos descubre estamos muertos.
- ¿ Y que sugieres? - dijo Spencer mirándole como si lo que acabara de decir fuera la mayor tontería que había escuchado.
Alice le besó, no sabía exactamente en que estaba pensando cuando lo hizo pero un impulso le había llegado hasta esta situación. Podría mentir y decir que había sido parte de su tapadera pero ya no estaba del todo segura. Spencer estuvo unos segundos completamente inmóvil pero no tardó mucho tiempo en responderle al beso de la misma forma que ella. El beso cada vez se hizo más intenso, ambos estaban disfrutando del beso cuando un carraspeo los interrumpió.
- Bueno, aquí están los cafes - dijo Mark que ahora parecía mirar a Spencer como si quisiera matarlo en ese mismo momento. Al principio a Spencer le pareció normal que un padre se preocupara por su hija pero después de observar sus movimientos cuando hablaba con Alice descubrió algo que le alarmó demasiado, su padre parecía tener una extraña obsesión con ella, como si él creyera que ella era de su propiedad.
Spencer disimuló su miedo y le hizo la señal a Alice indicándole que era el momento de que ella se excusara para ir al baño y desconectara el sistema de seguridad para que el FBI pudiera entrar mientras Spencer distraía al padre. Ahora debía confesar que le parecía mala idea. No pasaron ni veinte segundos cuando los dos se quedaron solos en el salón y un silencio un poco incómodo reinó hasta que Mark comenzó a hablar.
- Sabes, al principio pensaba que mi hija había traído a alguien para hacerse pasar por su novio, ni siquiera parecía que os llevarais bien - comenzó a hablar Mark - Pero luego te he visto morreándote con ella en mi salón, sabía que era una completa zorra pero no pensaba que lo haría delante de mis ojos.
- No creo que deba decir eso de su propia hija - la defendió Spencer.
- Eres tan ingenuo e imbécil, Alice solo te esta utilizando para que me aleje de ella pero lo que no sabe es que no te queda mucho de vida - le informó con una sonrisa ladina mientras se sacaba una pistola del bolsillo y le apuntaba en la cabeza.
A Spencer se le heló la sangre, intentó coger la pistola de su cintura pero Mark le pegó con la culata de la pistola en la cabeza antes de que pudiera alcanzarla. Sabía que Alice volvería de un momento a otro, pero no quería ponerla en peligro así que se concentró en buscar una manera de distraerlo para que él pudiera defenderse a él mismo y a Alice.
- ¿Que vas a hacer cuando me mates? Alice te va a odiar mucho más - dijo Spencer intentando sonar normal.
- Por favor, siempre he querido sentir lo mismo que mi hijo James, ya sabes, es una chica hermosa y seguro que podrá satisfacer mis necesidades hasta que me canse o ella se suicide - dijo con una sonrisa que hasta a Spencer le dio miedo. No podía comprender como Alice podía tener una familia tan horrible, en su lugar él ya se habría vuelto loco hace mucho.
- No te vas a acercar a ella aunque sea lo último que haga - dijo Spencer intentando atacarlo pero fue inmovilizado y tuvo que volver a su antigua posición a regañadientes.
- No me hagas reír, si vas a morir ahora mismo - dijo Mark quitándole el gatillo a la pistola - adiós idiota.
Se oyeron unos disparos y el FBI entró rápidamente ya que a Alice le había dado tiempo a desactivar el sistema de seguridad de la casa. Se encontraron una escena completamente desgarradora, Spencer sostenía el cuerpo casi sin vida de Alice en un suelo donde se encontraba Mark Hithway muerto bañado en su sangre y en la de su hija.
- ¿Porque lo has hecho? Alice, no tenías que salvarme la vida - dijo Spencer intentando taponar la herida mientras esperaban a la ambulancia. Sabía que solo había un 20% de probabilidad de que sobreviviera a ese disparo pero él no quería darla por muerta aún, tenía que intentarlo, se lo debía.
- No podía dejar que murieras, tu tienes a gente que te quiere, además, que necesitan tu cerebrito para resolver los casos. Nadie lamentaría mi muerte, no te preocupes por mi - dijo Alice sonriendo débilmente.
Spencer iba a responderle que eso no era del todo cierto pero Alice le apretó la mano suavemente y lo miró.
- Tengo mucho frío, Spencer por favor no te alejes, tengo miedo a la muerte - dijo ella casi en un susurro. Las lágrimas se le empezaron a acumular en los ojos, la impotencia de saber que esos eran sus últimos minutos de vida era demasiado frustrante para ella, ya no sabría nunca el final de How I Met Your Mother, pero por lo menos dejaba de sufrir para siempre.
- Por favor Alice, no cierres los ojos. Aguanta - le pidió Spencer justo antes de que ella se durmiera.
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Bueno, y hasta aquí el episodio tan emocionante que acabáis de leer, no me apuñaléis por la espalda que yo no tengo la culpa de que Mark haya disparado a Alice, él es mayorcito para saber lo que hacía xD Enserio, lo odio... no se como hice un personaje así >_<
Yo sigo subiendo porque aunque la mayoría de mis lectores son fantasmas, Ashley me sigue apoyando, y eso lo agradezco mucho.
Por cierto, ¿os gustaría que hubiera otras parejas en la historia? Es una idea, para darle más emociones a la historia y eso.
Bueno, nos vemos en el próximo capítulo.