Capitulo 10: "Me Gustaría Ayudarte Pero Creo Que Es Demasiado Tarde"

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- ¡Cállate, causas dolor de cabeza! –

Trató de huir de ella, pero era imposible, Andrea continuaba siguiéndolo por la casa sin importar a donde fuera.

- ¡Por favor, Jeff! Solo dime que hay en la carpeta que robaste –

- No te interesa – se detuvo y la miró – Grábatelo en la cabeza – le puso un dedo en la frente y le dio un leve golpe con cada palabra enfáticamente separada – No. Te. Interesa – volvió a caminar buscando alejarse de ella, pero continuó detrás de él.

- ¡Jeff, deja de evadirme! –

- Y tú deja de seguirme – gruñó enfadado.

- No hasta que me respondas –

- Demonios – se pasó las manos por el cabello – Basta, por favor –

- Me importa una mierda lo desesperado que estés, no voy a... -

Sus palabras se ahogaron contra los labios de Jeff cuando la besó inesperadamente y un segundo después la tenía aprisionada contra la pared de madera sujetándola con fuerza de ambas manos, después la tomó de las piernas y se las puso alrededor de la cadera, lo que ella aprovecho para rodearle el cuello con los brazos y devolverle el beso.

- Mmm... Jeff –

- Cállate – gruñó él entre el beso.

- Sabes que aun así no me harás olvidar lo que quiero saber, ¿cierto? –

- Haré un intento – hizo el intento de meter la mano debajo de su blusa, pero ella lo detuvo sosteniéndolo de la muñeca.

- Basta – dijo tratando de sonar amenazante pero solo logró hacerlo reír.

- Hablas demasiado, ¿lo sabías? – esta vez llevó los dedos al botón de sus pantalones e intentó desabrocharlos, pero Andrea riendo lo empujó.

- Bien, bien, te dejaré en paz pero solo por ahora – dio media vuelta y comenzó a caminar lejos de él no sin antes recibir una nalgada de su parte haciéndola soltar un grito de sorpresa - ¡Te odio! –

- Y yo a ti – le guiñó un ojo y también dio media vuelta con una sonrisa petulante orgulloso de haber ganado.

Andrea decidió ir a ducharse, estar todo el día persiguiendo a Jeff la había dejado exhausta y somnolienta, además afuera ya estaba oscuro, debían ser alrededor de las siete de la noche. Se tiró boca abajo en la cama abrazando la almohada y esperó poder dormirse pronto porque sabía que de lo contrario los recuerdos del pasado la atormentarían hasta el día siguiente sin permitirle descansar.

Cuando estaba casi a un paso de caer en la inconciencia del sueño escuchó la puerta rechinar al mover la manija, se debatió entre si ir a abrir o no.

- Sé que sigues despierta, Andrea – replicó Jeff al otro lado de la puerta.

Gimió ante el tono de reproche y se levantó para ir a abrir arrastrando los pies.

- ¿Qué? – le dijo en tono de mal humor y tallándose los ojos que le ardieron por la luz del pasillo.

- Quítate y déjame pasar – empujó la puerta, pasó a lado de ella y entró como si se tratara de su habitación para después tirarse en su cama.

- Quiero dormir, Jeff – se quejó ella permaneciendo parada en el marco de la puerta con los brazos cruzados – No estoy de humor para sexo –

- Yo no dije nada de sexo – sonrió – Pero si insistes... -

- Ah, cállate – volvió a cerrar la puerta y volvió a la cama para tirarse como costal de papas a lado de él, dándole la espalda.

- ¿Estás molesta? –

Doomed 2 - El Bosque Congelado Y La Casa De MaderaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora