19. 𝑯𝒆𝒍𝒂𝒅𝒂

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Narra Hugo

-buenos dias- saluda Eva entrando en el salón con una sonrisa.

-buenos dias- le contesto cuando se sienta a mi lado- ¿ni un beso ni nada?- pregunto alzando una ceja, ella sonríe y se acerca a mis labios- ahora sí- le digo al separarnos.

-idiota- se ríe agarrando mi zumo para darle un sorbo.

-¿como estás?- le pregunto mientras se bebe mi zumo sin piedad.

-bien, sorprendentemente no me duele nada- sonrío de oreja a oreja. Si ella está bien, todo está bien- tengo ganas de meterme en la piscina- pone un puchero señalando la piscina que hay en el jardín.

-¿a sí?- pregunto pícaro, ella asiente temiéndose lo peor- ¿puedes traerme eso que tienes detrás?- le pido con una sonrisa.

-no, ya sé lo que vas a hacer- me dice negando con la cabeza y riéndose, me encojo de hombros y miro hacia otra parte.

-como quieras...- me levanto haciéndome el enfadado y dejándola allí en la mesa, ella también se pone de pie pero no me giro a mirarla.

-dame un abrazo- me pide con voz de bebé, me giro mirándola serio.

-¿un que?- me quedo quieto mientras ella se balancea con los pies.

-un abrazo- saca una sonrisilla juguetona.

-no, ¿como?- le insisto acercándome un poco más, ella juega con sus manos y baja la cabeza un poco.

-un ay- contesta mirándome de lado, sonrío y corro hacia ella rodeándola con mis brazos.

-ay mi niña como se lo sabe madre- medio grito abrazándola, ella se ríe y se retuerce bajo mis brazos- ahora me la vas a pagar- le digo rápido en el oído y la agarro en brazos para correr con ella hasta la piscina.

-¡no Hugo que voy vestida!- grita riendo, la dejo justo en el borde de la piscina y me quedo mirándola.

-tienes cinco segundos antes de que te tire- ella empieza a desnudarse entre risas y yo la miro divertido. Cuando se queda en ropa interior la agarro de la cintura y saltamos al agua.

-está helada- dice echándose el pelo hacia atrás, luego enreda las piernas en mi cadera y me pasa los brazos por la nuca mientras sonríe- te echo una carrera- susurra en mi oído, muerdo su hombro y ella se separa un poco de mi, para cuando me doy cuenta ella ya está nadando hacia el otro lado de la piscina.

-¡eso no vale!- grito y nado junto a ella, pero como era de esperar me gana- has empezado antes- le digo al salir del agua.

-has empezado antes- se burla ella riendo, le muerdo la mejilla provocando su risa.

-¡hey tortolitos!- nos grita Sam desde fuera, está asomada a la reja que separa la calle del jardín, está tan graciosa metida ahí entre los setos que soltamos una carcajada- ¡tenemos que irnos Eva!- ella se gira para mirarme con una sornisa.

-¡Sam tienes algo en el pelo!- dice Eva, la rubia salta de inmediato gritando.

-¡aaaaa quítamelo quítamelo!- ambos reímos- sois unos capullos- dice saliendo de los setos y caminando hacia la puerta.
Eva se gira hacia mi con una sonrisa y yo pongo un puchero.

-me tengo que ir- dice riendo, la aprieto a mi rodeandola con mis brazos.

-¿a que hora vuelves?- le pregunto escondiendo la cara en su cuello.

-supongo que en un par de horas habremos terminado- dice dándome un beso en la mejilla, luego empieza a nadar hacia el borde para salir de la piscina.

-¿entonces te espero para comer?- le pregunto mientras sale por la escalera.

-vale, como quieras- la miro mientras se envuelve el cuerpo en una toalla, me fijo en sus movimientos, me estoy quedando embobado hasta que ella vuelve a hablar- te veo luego, dame un beso- se inclina en el borde y yo me acerco a ella con la tentación de empujarla de nuevo, pero me contengo y le doy un beso en los labios para luego ver como se marcha.

-te quiero- le digo flotando en el agua, se gira sin pararse y sonríe.

-y yo, adiós- la veo desaparecer por la puerta con una sonrisa.

𝑵𝒂𝒗𝒆𝒈𝒂𝒏𝒕𝒆𝒔 🌷|𝑬𝒗𝒖𝒈𝒐 𝑶𝑻Donde viven las historias. Descúbrelo ahora