𝑵𝒂𝒗𝒆𝒈𝒂𝒏𝒕𝒆𝒔 🌷|𝑬𝒗𝒖𝒈𝒐 𝑶𝑻

29. 𝑨𝒏𝒆𝒔𝒕𝒆𝒔𝒊𝒂

🌷

Narra Hugo

-¿como está?- pregunto impaciente, los chicos esperan a mi lado nerviosos.

-ha ido bien, ella está bien- nos dice el doctor, suspiro con una sonrisa y siento que un peso se me quita de encima.

-¿podemos verla?- pregunta Sam.

-si, de hecho tienen que llevársela, le hemos dado el alta- Sam sonríe de oreja a oreja y me abraza por detrás- pasen, les advierto que está bajo los efectos de la anestesia, es normal que diga algunas tonterías- el doctor se aleja por el pasillo y nos deja solos frente a la puerta de metal. Yo soy el primero en pasar a la sala, Eva está tumbada sobre la cama con los ojos cerrados, sus brazos descansan a cada lado de su cuerpo y el pelo le cae por lo hombros.
Me siento a su lado y acaricio levemente su mejilla, ella abre un ojo y me mira desconcertada.

-hola- le saludo, sus labios se tornan en una preciosa sonrisa.

-hola- me devuelve el saludo, me quedo mirándola en silencio, repasando cada detalle de su rostro- tengo hambre.

-¿tienes hambre? ¿Eso es lo que vas a decir?- Eva se ríe y entrecierra los ojos suavente.

-¿sabes? Me está costando mucho situarte...- me dice llevándose un dedo a los labios y uniendolos como si fuera a soplar. Sonrío y rezo para que los efectos de la anestesia no le duren demasiado.

-soy tu novio- ella abre los ojos de par en par.

-¿novio? Si claro, ya te gustaría- suelto una carcajada y ella se ríe también, no sé si conmigo o de mi, pero no me importa- ay, me duele cuando me río- se queja llevando una mano a su cicatriz.

-entonces no te rías- le digo a centímetros de su cara, ella se muerde el labio y se retuerce un poco en las sábanas.

-es imposible no reírme con tu cara tan cerca- me dice riendo, sonrío y ruedo los ojos- me caes bien, Hubo.

-Hugo.

-eso, Hugo- aparta las sábanas a un lado- llévame a casa- pide con un puchero, asiento y la levanto ayudándola a caminar.

...

-por fin en casa- suspiro en cuanto pongo un pie en el frío parqué. Eva se palpa la cicatriz con un puchero y pone caras raras.

-me duele, arráncala, prometo no decir nada- le pide a Sam, ella tan solo se ríe y niega con la cabeza. Parece que está borracha.

-siéntate aquí arriba- le indica Sam y Eva se sube a la encimera entre quejidos.

-me duele- se queja con un puchero, me acerco despacio para abrazarla pero ella me empuja- aléjate idiota- abro los ojos sorprendido y ella se ríe acercándome de nuevo- estaba bromeando cariño, ven dame un beso...

-tengo miedo- digo y lo demás estallan en carcajadas, Eva se lanza a mi boca pegándose más a mi y sus manos viajan a mi pelo, jugando con él.

-¡pero vamos a ver!- Sam grita riendo y Eva se separa de mí- parejita, por lo menos esperad a que nos vayamos.

-tengo unas ganas de bajarte esos pantalones...- me susurra Eva en el oído, mi piel se eriza al instante, sé que está así por la anestesia, pero no puedo evitar sonreír al escucharlo.

-bueno, nosotros nos vamos yendo, ¿te quedas tú con ella Hugo?- dicen los chicos, yo asiento y voy a despedirlos a la puerta, les agradezco todo lo que han hecho hoy y los despido con un abrazo.
Cuando llego de nuevo a la cocina Eva está haciendo morritos y de brazos cruzados.

-¿que te pasa?- me acerco a ella que me mira con un puchero.

-no me quieres- dice triste.

-si te quiero- sonrío, nunca había visto una anestesia que dure tanto, me acerco a su cuello y empiezo a dejarle besos mientras mis manos se cuelan por debajo de su vestido.

-mentira, no... no me... Hugo- se queja sin poder terminar la frase, sonrío y me agacho hasta llegar a la altura de sus piernas, la agarro en brazos, ella enreda las piernas en mi y la llevo a la cama, una vez allí la dejo caer sobre esta y le doy un beso en la frente.

-descansa, te quiero- le susurro, ella tira de mi hasta que caigo encima.

-¿y ya está? Pensaba que íbamos a hacer otra cosa...- susurra tentadora, me muerdo el labio negando con la cabeza.

-mañana, cuando al menos estés estable- le digo riendo antes de salir, ella me sonríe con los ojos cerrados y suspira- te quiero.

-te quiero...- susurra también, una sonrisa se dibuja en mi rostro mientras salgo de la habitación.

Narra Eva

Me levanto con una camiseta que no es mía, estoy en casa, por fin.
Me incorporo con cuidado y avanzo por el pasillo hasta la cocina, Hugo bebe su café mientras mira el móvil.

-anda mira quien se ha levantado- canturrea él, sonrío y me acerco para darle un beso- ¿como estás?

-bien, ya no me duele- digo riéndome- ¿dije muchas cosas durante la anestesia?

-dijiste algunas, si- se ríe.

-¿qué dije?- me pongo a hacerme un café.

-¿de verdad quieres saberlo?

-no, la verdad es que no- me siento a su lado y suspiro mirándolo- te dije que todo saldría bien- Hugo se me queda mirando con una sonrisa, para luego darme una mano y apretarla- está lloviendo, mira- señalo la ventana donde las gotas de lluvia empiezan a salpicar- ¿salimos a bailar bajo la lluvia?

-¿solo se te ocurren ideas de este tipo?- sonrío y asiento, él se levanta y alza los hombros- vale, si es lo que quieres...- sonrío emocionada y me tiro a sus brazos.

-¿te he dicho que te quiero?- él se ríe y juntos salimos a bailar (o mejor dicho a fingir que bailamos mientras nos comemos a besos) bajo la lluvia.