23. 𝑵𝒂𝒕𝒂

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🌼

Narra Hugo

-no me lo puedo creer, simplemente no me lo creo- repetía una y otra vez, moviéndose inquieta en el asiento, tenía la vista fija en la carretera- no lo entiendo, no puedo...- se paró unos segundos y luego tomó aire- voy a morirme.

-¡Eva!- la llamé sacándola de sus pensamientos, ella me miró fijamente- he dicho que todo va a salir bien. No vas a morirte, no voy a permitirlo- dije arrancando el coche serio, no soportaba que dijera eso, no podía perderla, a ella no.

-pero Hugo...

-he dicho que no Eva, no vas a morirte, ¿vale? Deja de repetir esa tontería- contesté malhumorado, no quería pagarla con ella porque no tenía la culpa de nada, pero no soportaba ese tipo de comentarios.

No dijimos ni una palabra más durante todo el viaje, cuando llegamos corrió a ducharse y me dieron unas ganas tremendas de meterme con ella, pero me contuve, seguramente necesitaba su espacio para pensar bien las cosas.
Salió con el pelo recogido y tan solo una camiseta cubriendo su cuerpo, se sentó a mi lado y observó mis manos moverse de un lado a otro durante un buen rato.

-¿que pasa?- pregunté, su cara no me daba muy buena impresión.

-muchas cosas- contestó sin esfuerzo, me quedé mirándola callado, tenía que subirle el ánimo pero no sabía como hacerlo.

-mira- señalé detrás de ella, me miró sonriendo de lado y negó con la cabeza.

-no pienso caer en otro de tus trucos- me dijo sonriendo.

-está bien, tú lo has querido- me mojé el dedo en un poco de nata montada y ataqué su nariz, ella abrió los ojos como platos cuando vio la nata pegada a su nariz y yo me dediqué a reirme.

-serás idiota- dijo riendo, agarro más nata y la estampo en mi cara, con un poco de suerte conseguí agarrarla con la boca. Lo que empezó como un charla seria se había convertido en una pelea de comida, la nata salía disparada de un lado a otro, y solo paramos cuando ya no quedó mas nata y estábamos agotados de correr de un lado para otro- mira como hemos dejado el suelo- dijo ella señalando a su alrededor riendo, sonrío y me acerco a ella despacio agarrando su cara y atacando sus labios.

-sabes un poquito a nata- dije separándome de ella, Eva rodó los ojos.

-como humorista te mueres de hambre- me dice entre risas, sonrío y ella se pega más a mi- bueno, ahora tendré que darme otra ducha para quitarme todo esto del cuerpo- me dijo mirándome fijo, como invitándome con la mirada, me mordí el labio sonriente y tiré de ella hacia el baño entre risas.

Narra Eva

Estaba termiando de arreglarme, Hugo me dijo que saliera de fiesta con las chicas, supongo que para animarme un poco.
Aún no podía creer lo que había pasado en cuestión de horas, todo esto me sobrepasaba, era demasiado importante esa cirugía, y sería en tan solo un par de semanas.

-¿estás lista?- me preguntó la voz de Hugo desde la puerta la habitación, me giré para mirarlo y me quedé en silencio- ¿Eva?

-si, solo me quedan los zapatos- dije volviendo a la realidad, agarre los tacones y empecé a atarlos a mis pies, intentando evitar cualquier contacto visual con el rubio que seguía delante de mi de brazos cruzados.

-Eva- me llamó una vez más, lo miré esperando que no mencionase el tema, porque si lo hacía iba a ponerme a llorar- yo...

-no, no hace falta que digas nada- le detengo, él me mira apenado y se acerca lentamente hasta que queda a centímetros a de mi.

-va a salir todo bien, hay un 40% de probabilidades- me dijo intentando calmarme y acariciando mi hombro.

-si, pero el doctor dijo...- colocó una mano en mi mejilla y me interrumpió.

-me da igual lo que dijese el doctor- sus ojos se encuentran con los mios por una milésima de segundo, pero siento como si llevasen toda la vida en contacto- confía en mi, todo va a ir bien, no quiero volver a oir que te vas a morir ni nada por el estilo, porque eso no va a suceder- asiento despacio sin apartar la vista de sus ojos, luego se acerca a mi labios para besarlos como si nada hubiera pasado y cuando se aleja una sonrisa aparece en su rostro- venga, vete. Se te va a hacer tarde.

-¿seguro que no quieres venir?- pregunto divertida mientras agarro mi bolso y nos acercamos a la puerta.

-no pinto nada allí- me dice cuando subo al ascensor.

-Hugo...- le advierto con una sonrisa, él se encoge de hombros y sonríe- ¿de verdad no te da pena que vaya sola?

-a veces en la vida hay que dejarse llevar- me dice cerca del oído, sonrío y le doy un último beso antes de que se cierren las puertas del ascensor.

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Hulaa a todoooos
Se me ha ocurrido una cosita muy guay que podéis hacer para participar un poco más en esta novela.
Como ya sabréis en cada capítulo incluyo una canción al principio, hasta ahora han sido canciones que a mi me gustan y me han inspirado, pero ahora quiero que me digáis vosotros vuestras canciones favoritas y yo las pondré en los capítulos siguientes, junto con vuestro nombre (si queréis, también puede ser anónimo).

Pues esto es todo, espero que os haya gustado este capítulo, dejadme las canciones aquí abajo o un mensaje por privado :)

Adeuuuu

𝑵𝒂𝒗𝒆𝒈𝒂𝒏𝒕𝒆𝒔 🌷|𝑬𝒗𝒖𝒈𝒐 𝑶𝑻Donde viven las historias. Descúbrelo ahora