Eres un ángel,
un ángel que vuela y vuela,
y nunca mira a la tierra,
quizá por temor a bajar.
No ves el amor en los demás,
sólo ves la miseria que los rodea.
Que nos rodea, perdón.
También soy una criatura del dolor.
Lo siento, Amanda, por no hundirme en tu perdición.
Es que aún me queda pasión,
y un corazón,
que se la pasa pensando en ti y en tus alas rotas.
Aquellas que te hicieron caer a este infierno,
y te causaron heridas internas y externas.
Mariposa traicionera,
un ave carroñera,
te besaste con aquel chico,
y luego me pediste el cd que me habías dado.
Pensé que un secreto te había guardado,
pero las esperanzas me has cortado
y en el altar del amor me has dejado plantado.
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Huesos de plástico.
PoetryElla vivía para morir. Yo moría por vivirla. ••• La melancólica historia de un chico que amó demasiado y una chica que perdió la cabeza.