IMPERFECT LOVE • [YIZHAN | MPreg]

CAPÍTULO VII

Durante el camino hacia la residencia Wang; YiBo le explicó a Xiao Zhan sobre su familia, pero él no le prestó mucha atención, se pasó es todo el trayecto pensando sobre la rara situación en la que se había metido.

Es cierto que quería proteger a su hijo y no estaba listo para enfrentar a su padre todavía, pero tal vez, esto era demasiado.

Estaba a punto de decirle a YiBo que todo había sido un error e irse. Ya vería después la manera para enfrentarse a su padre y no exponer a su hijo, pero cuando volvió a la realidad, gracias a que el pequeño había despertado, ya era muy tarde.

Estaban frente a un gran portón de hierro, éste se abrió y el auto entró, después de unos metros por un camino con jardines a ambos lados, el auto estacionó.

YiBo bajo, Zhan también lo hizo mientras YiBo sostenía la puerta para que pudiera bajar con el bebé. Y le ordenaba al chófer que bajara el equipaje.

Xiao Zhan estaba con el bebé en brazos junto a YiBo, de pie justo frente a la gran puerta de la casa. Estaba con la boca abierta mientras alzaba la mirada para observarla en todo su esplendor.

No era una casa común, era una mansión. La fachada era simple pero impresionante, las paredes blancas, con grandes ventanales y columnas enormes al frente. Era imponente.

Cuando YiBo le dijo que era el hijo de una familia adinerada, Zhan nunca se imaginó la magnitud de tal fortuna.

Ahora más que nunca, él pensaba que esto era una mala idea, ¿cómo podría fingir ante la familia de YiBo?. Estaba seguro que en cuanto lo vieran se darían cuenta que todo era una gran mentira. Pensaba que lo echarían de inmediato, tal vez incluso llamarían a la policía o algo así, pero antes de que pudiera decir o hacer algo, YiBo habló, interrumpiendo sus pensamientos.

—Bien —suspiró profundamente—, estamos aquí —dijo YiBo, más que nada para sí mismo—, creo que es... hora de entrar. Sí, eso es, entremos —dijo, mirando a Zhan y extendiendo su brazo hacia la puerta de la casa—. Lleva el equipaje adentro, por favor —le dijo al chófer, mientras él junto con su pequeña familia falsa caminaban hacia la casa.

YiBo abrió la puerta, dándole el paso a Zhan y luego él entró. Una vez adentro de la casa, Zhan observó aún más impresionado el interior.

La casa se sentía incluso más amplia por dentro que por fuera. La decoración era elegante y sobria, el blanco reinaba, pero el piso de mármol gris oscuro perfectamente pulido y los barandales de roble brillante de las escaleras a ambos lados de la puerta de entrada, ademas de una gran mesa circular de madera oscura, bajo el balcón al que daban las escaleras, adornada por un gran florero con flores de hermosos colores, complementaban perfectamente todo el ambiente.

Zhan se sintió un poco intimidado y muy nervioso.

Al fondo se podía observar la entrada a una gran sala de estar.

—Creo que lo mejor será que entre y prepare el terreno, después ustedes podrán entrar —le dijo YiBo a Zhan, y enseguida estaba caminando hacia la sala.

El mayor simplemente asintió, todavía un poco aturdido ante todo el contexto, se quedó parado con el bebé, no tan lejos de la puerta de entrada, aun tratando de asimilar todo en esa casa.

YiBo llegó a la sala, donde suponía debían estar sus padres esperándolo. Él también estaba nervioso y con miedo por lo que planeaba hacer, no sabía cómo iba a decirle a su familia que no había regresado sólo, que ahora estaba casado y que además había un bebé, así que decidió sólo dejarse llevar y que pasara lo que tenga pasar.
Pero cuando entró a la sala, se llevó una gran sorpresa al ver a una pequeña multitud de gente ahí reunida.