Claridad

26 2 0
                                    

Michael entró al cuarto de hospital. Su jefe de agencia estaba furioso por faltar, tenía muchos mensajes y llamadas no tuvo más opción que irse pero antes quiso despedirse de su amada.

-Amor gracias al cielo estás bien me asuste tanto que.. (Dana lo interrumpió)

-Michael lo último que quiero es pelear, además siento dolor por lo que hiciste, sus ojos se llenaban de lágrimas y giro su cabeza hacia el otro lado.

-se que es primordial tu salud pero te aseguro que diré toda la verdad, no podría hacerte daño.
Él chico sostenía las mejillas de su novia, se veían fijamente a los ojos pese a sus molestias; en su interior no podían negar los frágiles que eran estando cerca del otro.

Mariela entró en ese momento.

-Vaya susto nos diste desde ahora te haremos una limpia y lanzaremos por el excusado las pastillas.

-Jamás pensé que esto pasaría.

Mariela miró a Reese.

-Recuerda lo que hablamos puedes irte yo me ocuparé de tu amor.

-Esta bien.
El chico estaba apenado quería despedirse con un beso de su novia pero sabía que no aceptaría.

-Cariño te llamaré, confía en mí ¿sí?

Dana lo miro sin decir una palabra.

-Amiga confía en él, no te engañó con esa jovencita.

-¿Cómo lo sabes?

-hazme caso, pero prometeme que lo escucharás.

-No lo se.. Aay ya dime Mariela

-Él es quien hablara, pero si te diré que es inocente. Dana él te ama y se muere por ti, escuchalo.
-Esta bien solo porque tu lo dices.

-Mijita ya convencí a tus padres, no vendrán y les dije que hoy mismo te darán el alta. Por cierto mi vida ya conocí al muchacho. Ay mi amor ahora entiendo porque lo aceptaste aunque sea menor que tú, está guapísimo todo un modelo alto y sus ojos.
Mariela y Dana reían con sus ocurrencias.
Carter y su madrina se dirigían a casa para poder descansar.
                            ~~~~
-Michael espero tengas una buena excusa, me hiciste perder demasiado.

-Mi novia esta en el hospital estuve con ella.

Paul (su jefe) se sorprendió puso su mano en el pecho con la otra acomodo sus lentes.

-¡Oh My God! ¿tienes novia?
-sí, pero no lo había comentado.

Paul vestía ropa extravagante era Apasionado por la moda, estudió en París y le había tomado tiempo estabilizar su agencia. Media 1.75 metros de altura, trigueño ojos cafés y cabello largo a los hombros.

-Cuéntame mi ciela ¿qué paso con tu novia?
Él chico explicaba lo ocurrido a su jefe.
Durante ese momento apareció Keyna una hermosa mujer morena cabello largo, contextura fina con altura de 1.75 m.
Era una de las mejores amigas de Reese en toda la agencia. Escuchó la conversación y le llevó un bote con agua a su amigo. Paul se puso de pie a contestar la llamada telefónica de su novio que se encontraba en Milán.

-Oye chiquillo le mentí a Paul le dije que tu novia estaba mal desde ayer y te desvelaste cuidándola.

-Gracias Keyna no tenías porque hacerlo
-¿cómo va todo con ella?
No muy bien, y no por ella si no por mi ex, me esta chantajeando.

-oye ¿por qué? Pon a esa tipa en su lugar, no lo permitas.

Michael quería contarle sobre el problema pero se acercó Lola una joven sumamente extrovertida, siempre buscaba molestar a Reese.

Ojitos llegaste... Pero lo siento perdiste la oportunidad y Paul esta furioso.
-ya hable con él, cuidaba de mi novia.
-¿Quééé? ¿Tienes novia?
-Así es.

-Mira nada más que callado lo tenias.
-La vida es propia, dijo Keyna con seriedad.
-si el chiquillo no quería hablar tendrá sus razones.

Lola la miró molesta, se puso de pie diciéndole: eres tan fastidiosa.
Lola era bastante delgada cuerpo proporcional algunos la molestaban por tener poco busto y trasero pero no le importaba, su cabello era corto, además solía ser una de las favoritas de Paul.

Michael salió de la agencia, había una gran tormenta, pero eso no fue impedimento para que fuese a ver su novia.

-Mama llegaré tarde no me esperes a cenar.
-ya se te ha hecho costumbre esto, ven ya.
-No puedo madre tengo algo que hacer. Tendré que colgar mi pila esta agotada.
La Sra Grace estaba a un poco molesta.
-Aay hijo estás perdiendo la cabeza por esa mujer y no me gusta.

Para el amor si hay edad. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora