Para el amor si hay edad.

Michael Y Dana

El verano llegó Michael y Dana se despedían en el aeropuerto.
-Te extrañare increíblemente.
-Yo también mi amor, vente conmigo.
-Mi amor allá veras chicas guapas y hermosas así que no quiero ponerme celosa confiaré en ti y portate bien.
-pueda que las haya pero siente mi corazón todo es por ti. Mi razón de ser eres tú. Sé que al irme tendré más oportunidades las cuales quiero compartir contigo.

Se despidieron con un tierno beso.
A las pocas semanas Carter logró comprar la casa, puso su apartamento en alquiler. Era tal cual había deseado, extrañaria a Dex y él a ella. Así que pasaron la última noche junto a Mariela celebrando con unas cervezas.

-Mala amiga, me abandonas, pero me alegro que tengas lo que deseas. ¿Y el proyecto?
-Va muy bien.

La universidad estatal llamó a Dana era un hecho su contrato, Carter estaba feliz y Mariela triste.
-Me dejaras a mi también.
-Simpre nos veremos y mi casa es tu casa.

Dana estuvo unas semanas en casa de sus padres otras se fue de viaje con Mariela y pasó tiempo con su madrina.
El verano terminó, todo volvería a la normalidad.

Llegaba el momento para entregar su renuncia, un día antes de que las clases comenzarán.

Dana despertó con mucha nostalgia recordarba que hace un año conoció a Michael, el amor de su vida.
Se vistió de la misma forma que esa vez.
Oberbava a sus gatos jugar felices en el jardín.
Llegó a la universidad estaba vacía, luego entró a la oficina del jefe.

-Bueno Sr. Flannagan le hago oficial mi renuncia. Traté de hacerlo muchas veces pero no puede, usted es el elegido.
La bella maestra limpiaba sus lágrimas.
-No es de mi agrado recibirla, perder a alguien así será difícil, hay pocos como usted.
-Gracias. Daré un pequeño recorrido antes de irme.
-¡Hágalo! pero maestra Carter no aceptaré su renuncia tampoco
Dana estaba confundida.
-Consultaré si puedo darle un año de ausencia sin goce de sueldo, creo que es lo que le falta a Michael para graduarse. Me rehusó a perderla, entiendo todo lo difícil que fue pasar por amenazas, pero debido a su honestidad y valentía haré lo que este en mis manos, quiero colaborar con su felicidad.

Dana lloro estaba agradecida con el maestro.
Miró a su amiga en pasillo.

-Mi amiga del alma. se abrazaron por unos minutos.
-Entonces no te veré por un año aquí.
-Pero vendré a visitarte, aunque seguramente me convierta en la comidilla de la profesora Alondra.

Dana hizo el recorrido se quedó en el salón de clases donde vio a Michael por primera vez, cerró sus ojos y recordó todo. Minutos después su novio entró vestido de la misma forma.
Dana estaba sorprendida ya que él llegaría por la tarde.

-Buenos días maestra disculpe llegué tarde.
El chico actuaba tal cual la primera vez.
-Traje un sobre que justifica mi tardanza puede leerlo.

-Amor sabes que pensé ese momento cuando te vi por primera vez.

"Que hermosa es"
"Con lo lindo que es tiene un trabajo ideal"
El papel tenía escrito los pensamiento de ambos el día que se conocieron.
Además le entregó un porta llaves similar al que ella tenía con su nombre, pero esta vez tenía tallada una pregunta.

¿Quieres casarte conmigo? Y un hermoso anillo en lugar de las llaves.
Dana no pudo evitar llorar y se lanzó a los brazos de su novio amado.

-Sí, ¡aceptó!
Por fin seremos felices.
Mariela, Dex, el sr. Flannagan los padres de Michael y Dana y claro Estefania. Entraron con con champán y copas Dana estaba totalmente asombrada no podía creer que ellos estuvieran allí, poco después se integró Louis y se unió al festejo. Todos reían y compartían fue el mejor regalo para los futuros esposos.

Los enamorados no quisieron esperar más, decidieron unir sus vidas seis meses después.

Su boda fue sencilla pero rodeados de la gente que amaban, familiares amigos y jefes. Los estudiantes de Dana aceptaron que su admirada maestra pertenecía a su compañero y estos estaban felices que fuese así. Era un momento lleno de mucho amor.
Marck se acercó a su compañero.
-Mira quién iba a decir que el modelo de la clase se quedaría con nuestra maestra favorita.
-Pues ya ves que si, me enamoré de ella.
Ambos bromeaban y reían juntos.
-Eres un cretino Reese.
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Vivieron por tres años en la ciudad Dana se embarazó, justo al año de casados, parió gemelos una niña y un niño, tuvo depresión post parto debido a que nacieron prematuros fue difícil para ambos pero lo superaron.

debido a sus proyectos se mudaron al extranjero sus hijos ellos y claros sus felinos.
Tenían las típicas peleas de los esposos.
- No tires la ropa en ese lugar, levanta - la tapa de baño.
-Haz la comida..
-Te tocan los platos amor..
-Tendremos que reducir gastos.
-Tengo celos.

Se quedaron sentados en una colina mientras sus hijos jugaban.
-Sabes amor, me encanta hasta discutir contigo, te pones enojona.
- y tu me pones de mal humor.
-¿Simpre me querrás Michael a pesar de la edad?
-¿y tú seguirás pensando que para el amor si hay edad?
Permaneció pensativa unos segundos.
-Si la hay, ¿sabes por qué?
Porqué si hay amor todo se puede, no es cuestión de que tengas algunos años de diferencia o no, es la madurez de la otra persona, las similitudes y diferencias que puedas tolerar lo que te acercan. Saber que puedes cargar con ese peso.

-Dana te amo, más que nunca.
-Y yo a ti.
Sé perdieron en el atardecer bajo un romántico beso. En la noche tuvieron su momento especial y romántico hicieron un picnic en la noche como lo habían hecho años atrás, pero en otro lugar.
Se amaron intensamente como adolescentes queriendo descubrir sus cuerpos.

-Fueron momentos difíciles pero tú lo hiciste fácil te amaré siempre.
Michael y Dana sostenían sus manos caminaban cerca de su hogar recordando los momentos que vivieron juntos, reían a carcajadas. La admiración que sentían entre ambos jamás desapareció simpre pudieron entenderse aún a pesar su célebre frase "Pará el amor si hay edad"