❝En La Piel Del Engaño❞

꧁CAPÍTULO 4꧂

Cuando llego a casa tomo un baño tratando aun de razonar con lo que dijo Sebastián, repetía cada una de sus palabras y aun así no podía terminar de creerlo.

Durante el año fuera de casa conoció a mucha gente incluyendo chicos que le gustaron pero no pasaba de allí, ella realmente sabía que su estadía en Nueva York era sólo pasajera.

Y se dijo que no podía establecer relaciones, porque si lo hacía y llegaba el momento de regresar se convertiría en el intento de "relación a distancia", y sabía que eso sería muy complicado y para él como ella no les haría bien, así que decidió no hacerlo.

Eleanor siempre le dijo que su relación con Franco había nacido de un accidente, él ya trabajaba y ella era pasante en su empresa; luego de que ella botó su café encima de él, fue como el inicio de todo, se veían a diario, comían juntos y así después de una relación de dos años, un día papá le pidió que se casarán.

Cada vez que mamá cuenta la historia sus ojos se llenan de luz .Camila aún no sabía lo que quería pero se repetía la misma pregunta que le hizo Sebastián

¿Era feliz?

Mucha veces se confundía costumbre con felicidad y Camila no quería que toda su vida llevara una rutina, deseaba que cada día fuera un reto, una diferencia, un nuevo comienzo con la sensación de saber que la persona que compartiría seria la destinada; la correcta.

Durante los siguientes días no vio a Sebastián y tampoco pudo prestarle mucha atención, por lo tanto agradecía su repentina desaparición sin embargo el nuevo cargo la está teniendo entretenida. Ayer luego de pensarlo mucho había tomado una decisión, una que creía que a Sebastián le encantaría.

Tomó el teléfono para marcarle, entraba la llamada pero no contestaba así que lo dejo pero luego de unos instantes volvió a probar para volver a ocurrir lo mismo hasta que se rinde con la tercera llamada que manda directo al buzón dando por entendido que apago el teléfono. Idiota.

Y ¿ahora qué le pasaba? Hace unos días atrás le decía que quería intentar algo con ella y hoy ni unos buenos días, si no tiene tiempo al menos podría enviarle un mensaje pero no Camila opto por enviar un mensaje diciéndole la urgencia por poder hablar con el luego de esperar un poco se dio por vencida volviendo a su trabajo.

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Ha pasado una semana desde que Camila no tiene noticias de Sebastián y es algo que realmente le disgusta y todo porque esa misma noche le había devuelto el mensaje diciéndole que estaba ocupado dando por entendido que no quería interrupción, molesta no agarro su celular ni de broma para enviar mensaje de nuevo, se la pasó toda la semana esperando a que el mismo diera señales de vida.

Era fin de semana su familia estaba invitada a un evento.

El vestido que lleva no es extravagante a simple vista, es un corte largo con las mangas caídas y flores que adornan el busto a su parecer era precioso además de que resalta las curvas de su cuerpo, y a pesar de que su mente debería pasar desapercibido el tema de Sebastián no lo hace simplemente aparece así sin más.

Al lugar que Llegaron es hermoso la sala principal está adornado con eso que a la gente de lujos le gusta irónico porque también su familia era considerada parte de ello, cuando ya están en sus lugares su padre empieza a hablar de algunas personas presentes que han sido parte de la empresa el cargo que tiene ahora no es tan complicado pero si lleva de mucha atención para que los papeles simplemente se lean una vez.

La primera copa de vino llega acompañado de un aperitivo, Camila disfruta mucho de la bebida alcohólica pero esta no va a ser, así que se la toma de un solo trago es fuerte sí pero al menos funciona para olvidar, cuando ve que nadie vuelve con nuevas copas de vino, se levanta en busca de más lo cual su madre la reprende con la mirada.

Su madre nunca la había visto así de alterada en busca de una bebida sin embargo Camila si estaba acostumbrada a estar acompañada con el vino que más daba si al final él no estaba y tampoco al parecer le interesaba, el aura de la fiesta la hace sentir que había tomado de mas pero solo es la sensación de ensoñación que le trasmite los colores y el estado del lugar.

Todos parecen pertenecer aquí, como si la pasarán genial. No hasta que la mirada de Camila cae en ese hombre de traje rojo que viene con una chica que cuelga de su brazo y toda preocupación de la semana por saber cómo se encontraba desaparece para darle paso a humillación y vergüenza y sin ninguna razón quiso llorar tan solo para sentir que volvía a estar de nuevo en su vida antes de que Sebastián llegara.

Eve.P.B