Briana Cullen [Terminada]

03

POV Briana

Cuando el abuelo llego note que se sintió incomodo por el olor a sangre pero estaba controlado.

— Aquí tienes cariño -me dijo entregandome un paquete de toallas sanitarias.

— Gracias Abu -le dije y tome el paquete.

— Estaremos en el cuarto -dijo la abuela y los dos salieron del cuarto de baño.

Me bañe y quite todo rastro de sangre de mi cuerpo.

Tarde casi una hora en lograrlo.

Salí del baño ya vestida.

Traía una blusa básica de tirantes que me quedaba arriba del ombligo, un short de mezclilla ajustado y pues ya traía la toalla sanitaria colocada y un suéter azul.

Mis abuelos me miraron con preocupación.

Sabia que en todo este tiempo que duraron solos no hablaron de nada.

— ¿Estas mejor? -pregunto el abuelo y le asentó no muy convencida.

— Ya no me duele y se siente algo raro tener esta experiencias de nuevo -dije tratando de poner mi mejor sonrisa.

— Si no les molesta me gustaría salir a dar una vuelta por el bosques, les prometo que me cuidare.

Carlisle y Esme me miraron no muy convencidos pero terminaron asintiendome.

— Regresare antes de que lleven mis papas y tíos -dije y me dispuse a salir de la habitación.

Al llegar a la planta baja tome mi mochila que estaba en el sillón individual y saque mis libros.

Me encamine a la cocina y llene un termo con agua.

Lo metí a la mochila junto a mi celular, auriculares y cámara fotográfica.

Salí de casa y me adentre al bosque.

Camine por unas horas y llegue al arroyó que dividía los territorio.

Saque mi cámara y comencé a fotografiar el paisaje.

Todo iba bien hasta que pude ver a un lobo negro.

Le tome una foto y sin pensarlo cruce con cuidado el arroyó.

Camine un poco hasta que llegue a donde había unas diminutas flores muy hermosas y en una de ellas estaba una mariposa.

Enfoque mejor la cámara y le tome la foto.

Por suerte la mariposa no se movió y salio perfecta.

Camine nuevamente, sabia que estaba siendo vigilada.

Seguí caminando y llegue a donde vivían los Quileutes.

Trague saliva y estaba dispuesta a huir pero una voz muy dulce me detuvo.

— No te había visto antes, ¿vives por aquí?

Lo mire detenidamente y era demasiado lindo y me gustaría tomar sus mejillas y apretarlas, ese chico era muy tierno.

Cuando nuestros ojos hicieron contacto algo extraño sentí en el pecho.

— He mm, si, del otro lado del bosque -dije señalando a donde la casa Cullen.

— ¿Vives con el Dr. Cullen?

Le asentó.

— Si, desde hace 10 años -le dije y en eso aparecieron otros chicos que no traían camisa.

— ¿Quien es tu amiga Seth? -pregunto el que se miraba mas grande.

— ¿Como te llamas? -me pregunto el chico.

— Briana Cullen, mucho gusto -les dije y les regale mi mejor sonrisa.

— ¿Que haces en esta parte de la reserva? -pregunto el chico al lado derecho del mayor.

— Estaba tomando fotos, ¿les molesta que este aquí?

Los mire a todos a los ojos y me detuve en los de Seth que a mi parecer me generaban tranquilidad.

— No, no nos molesta -dijo el mayor viendo a Seth algo sorprendido al igual que los otros dos.

— ¿Me permiten tomar algunas fotos? -pregunte y ellos asintieron.

— Gracias, es bueno ser libre por un día -eso ultimo lo dije en un susurro que claramente ellos escucharon y me dispuse a caminar.

Tome unas cuantas fotos de la playa, de la parte del bosque de ese lado y todo eso lo hice en compañía de Seth y los otros tres que me estaban sirviendo como modelos a petición mía.

También conocí a una chica llamada Leah y a otra llamada Emily, esta ultima tenia unas cicatrices en su rostro pero preferí no preguntar.

— Gracias por todo, pero ya me tengo que ir -les dije y tome mis cosas.

En el termo ya no tenia agua y en todo el día no recibió llamadas.

— Te llevamos -dijo Sam amablemente.

— No quiero molestar, además los abuelos deben de estar esperándome -dije y me golpe mentalmente.

— ¿Abuelos? -pregunto Jared entrecerrando los ojos.

— Si, Carlisle y Esme -dije y comencé a jugar con mis manos.

— ¿Sabes lo que son? -pregunto Sam.

— Si, también yo...

Estaba apunto de contarles que yo también lo soy pero Paul me interrumpió.

— Ellos no pueden convertir a personas de aquí, romperían el tratado.

Lo mire molesta por lo que acababa de decir.

— ¿De que hablas?, yo no soy de Forks.

Y sin mas tome mis cosas y corrí a velocidad humana hacia el bosque.

No me detuve en ningún momento y aunque era algo incomodo correr así no me importo.

Los lobos si que eran idiotas.

Aunque solo con uno haría una excepción.

Continuara...

Espero les guste...

24 de Oct, 2020