Te Esperé

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¿Que haces aquí? -pregunte hacia la pelinegra que me espera a un lado de Nicky-

No respondiste mi mensaje ni ayer ni hoy... Me preocupe -afirmo mirándome con amor absoluto y eso me hizo temblar-

Quería enfocarme en mi trabajo, Lucy -la pelinegra se me acercó y beso mi mejilla- pase mucho tiempo lejos y necesito poner en orden este lugar...

Pero ya terminaste por hoy, ¿No es cierto? -asenti- vamos a cenar, ¿Quieres?

No lo sé... Me gustaría ir temprano a casa, la verdad estoy agotada -afirme-

Te llevo yo -dijo con una sonrisa- puedo prepararte de cenar mientras tomas una ducha para que te relajes...

Ya dile que si, no te la vas a quitar de encima, Angy -dijo Nicky con diversión-

Esta bien... Vamos a mi departamento -accedi finalmente- ¿Trajiste auto?

Si, tú ve en el tuyo y yo te sigo -afirmo-

Salimos juntas del edificio, pero nos separamos para ir cada una por su caminó, subí a mi auto y me puse en marcha mientras la pelinegra me sigue. La verdad es que no quería verla por qué mi mente aún está hecha un desastre y no sé exactamente que debo hacer, pero Nicky tenía razón al decir que Lucy no se iría sin mi y de alguna forma debo reconocer que es persistente, está más que decidida a conquistarme de nuevo y eso sin duda es un punto a su favor, tal vez no es el momento adecuado, pero sin duda no me molesta del todo poder compartir un momento con ella... Tal vez es justo lo que necesito para darme cuenta de lo que quiero.

Tardamos poco tiempo en llegar a mi edificio que está más cerca que el que compartía con Carolina, baje de mi auto y ella lo hizo también, me miró con un una sonrisa.

Por un momento pensé que seguías viviendo en el departamento de antes... -admitio mientras ambas caminamos hacia el interior del bonito edificio-

No, demasiados recuerdos que solo hacían más difícil mi tarea de encontrarme a mi misma -afirme mientras entrabamos al edificio-

¿Lo vendiste? -asenti y por un momento pensé que ella me lo reprocharia- me alegra que lo hayas hecho... Admito que ese departamento tiene muchos recuerdos para mí también, pero si te hacía daño lo mejor fue que lo hayas dejado atrás

Si -sonrei-

¿Que quieres que prepare para la cena? -pregunto mientras tomaba mi mano-

No tienes que preparar nada, podemos pedir una pizza u otra cosa si quieres -ella asintió pensativa-

¿Como que otra cosa? -se plantó frente a mi y miro descaradamente mis labios-

No lo sé... -susurre abrumada por tenerla tan cerca de mi otra vez-

No tienes idea de lo mucho que deseo besarte... -admitio- pero no lo haré por qué sé que estás confundida... Aunque no me guste, sé que Cameron también está buscando ganarse tu corazón y yo voy a jugar limpio...

No sé si Cameron te lo agradecería -sonrei ligeramente-

Extrañe esa sonrisita... -las puertas del ascensor se abrieron-

Sali de el cubículo rápidamente con la pelinegra detrás de mi, entramos a mi departamento y ella quedó más que encantada por el lugar, la verdad es que es un sitió muy bonito... Es un departamento más pequeño que el que tenía antes, pero sin duda es más lindo y acogedor, además que esté no tiene malos recuerdos como el otro.

Ponte cómoda, iré a ducharme y regresaré pronto, mientras puedes pensar en que quieres comer -le sonreí-

De acuerdo -se sento en el sofá y sin más tomo el control de el televisor-

No lo pude evitar, me quedé ahí a un lado de ella observando sus movimientos... Ella es hermosa, una mujer atrapante que no encuentras en muchos lugares, incluso me atrevería a decir que no hay ninguna mujer como ella en todo el mundo, ella es única y perfecta con sus labios rojos, su cabello liso y su perfecto cuerpo.

¿Pasa algo? -me miró con diversión-

No... -logre decir-

¿Y por qué me ves asi? -se levanto de el sofá y se acercó mucho a mi-

Eres hermosa, es imposible no observarte -me sincere-

¿No conociste mujeres más bonitas en tu viaje? -negue con la cabeza- yo tampoco... Trate de olvidarte, pero no podía por qué cada vez que me encontraba con una hermosa mujer dispuesta a estar conmigo yo lo único que hacía era preguntarme cómo estarías... Si te sentías triste, perdida, si estabas llorando y extrañando a Carolina... Me preguntaba si estarías con alguien más o si me estarías pensando como yo te pensaba a ti -una sonrisa melancólica brotó de sus labios- es curioso por qué me prometí a mi misma que si no ibas a ese viaje conmigo me olvidaría de ti, pero lo cierto es que no puedo culparte por querer enderezar tu camino... Estabas en tu derecho de querer encontrar la vida que necesitabas y llegué a la conclusión de que si mi amor por ti era tan fuerte como yo decía, sin duda te esperaría...

Y lo hiciste... Me esperaste -la pelinegra asintió-

Solo el tiempo dirá si mi corazón tomo una buena decisión o si solo se sentenció a una muerte lenta -puse mi mano en una de sus mejillas-

Bese su frente con cariño esperando que en ese gesto se diera cuenta de que aún siento muchas cosas por ella y que pase lo que pase, ella siempre será uno de mis más grandes amores.





¡Personitas bellas!

Vamos empezando así que no esperen besos u otras cosas entre Luciana y Angy o entre Angy y Cameron por el momento, eso vendrá después. 🤭 Espero que les este gustando la historia, la verdad me está costando acomodar la trama a como la tengo en mi mente, pero haré lo mejor que pueda. ❤️

Sin más que decir, me despido.
Besos. 😘😘😘😘

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