Dia a dia... II

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Llego la noche, era ya la primera semana del segundo mes en que estaban allí y la rutina se había creado, se levantaban temprano, poco antes de que los primeros rayos de sol llegaran a la montaña en la que estaban, comenzaron el proceso de extracción en las minas profundas.

Esa era la sección que se les había asignado, pues era el lugar sonde se encontraba una variante del mineral buscado, el proceso de este era más difícil porque el mineral original al exponerse a esa temperatura de la mina liberaba una sustancia de endurecimiento.

Claro que era más fácil de buscar por la diferencia de texturas, sin embargo, la extracción se volvía más difícil.

Era bastante obvio que eran enviados allí por los dichosos genes Uzumaki, después de todo nadie más soportaría esas condiciones por mucho tiempo, ellos por el contrario se terminaron acostumbrando.

En fin, era la hora asignada a dormir, que era poco después de que se ocultaban los rayos del sol, solo dándoles tiempo para bañarse y lavar su única muda de ropa.

Después de todo, era muy conocido que la falta de higiene traiga consigo una probabilidad de enfermarse muy grande, y con ello aumentaba el riesgo de perder trabajadores.

Debian de reconocerlo, estos criminales no eran nada tontos, los sellos de supresión de chacra, los horarios diseñados para que se aumentara la eficiencia de la mina, y disminuir casi a cero la perdida de personal era impresionante.

Aunque había una duda que seguía en la mente de los jóvenes, ¿Porqué es que los criminales seguían comprando esclavos? Después de todo, debería incluso de haber sobras entre ellos, sin muertes frecuentes, ¿A dónde se dirigían los otros prisioneros que comenzaban sobrar?

-HEY – se escuchó en la entrada a su celda, - uno de los dos venga pronto, decidan quien será el participante en la jornada- explico Guron, uno de los guardias de mayor rango y un ninja renegado de Taki.

Ambos se vieron por un momento y antes de molestar a Guron, Naruto se ofreció a ir.

-Yo voy.

-¿N-Naruto? ¿¡Que rayos dices?!- replico Karin molesta y sorprendida.

-Bien, sígueme- declaro mientras Naruto comenzaba a seguirlo.

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-Muy bien chico, según tu informe de captura…- hablo Guron de camino a… donde sea que se fuera  “La jornada”-…eres un ex-shinobbi de Konoha, nivel gennin aparentemente, por ello te será fácil, y lo explicare solo una vez así que pon atención…
Naruto asintió.

-Bien, “La Jornada” es un sistema, es un proceso de “reciclaje” y “recaudación”- eso sonaba raro… - como debes saber bien, todos aquí son tratados bien, comida suficiente y un descanso moderado- miro de reojo al joven que venía detrás suyo viendo que le prestaba atención.

-Este sistema genera que se acumulen tantos obreros- Naruto presto atención al termino –…que si seguimos sin tomar medidas corremos el riesgo de albergar a tantos que no será posible abastecerlos a todos, por ello, una vez a la semana se organizan las jornadas, ahora presta atención, “Las jornadas” son el nombre que reciben las medias para los problemas- a pesar de estar delante, Naruto sintió diversión en las palabras del hombre.

-estas son duelos a muerte, en los cuales participan obreros al azar- declaro.

-¿Qué?¿Como es posible eso?¿Acaso están locos?- Naruto replico.

El hombre en vez de azotarlo como era la costumbre en aquel lugar, soltó una risa, para la confusión y enojo de Naruto.

-Cálmate muchacho, estos duelos son solo para limpiar la escoria, mientras un obrero sea muy productivo en las minas, no morirá, sin embargo, la muerte no está penada…

Naruto: Empezar por algoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora