RIVALES // DIXISON

Capítulo 22

Septiembre. Inicio de clases.

Un largo verano, sesenta y dos días en la cuales se había divertido con sus amigos, y como no, Addison Rae había irrumpido en sus pensamientos cada vez que podía.

Dixie había planeado olvidarla, pero, ¿cómo hacerlo? Solo podía pensar en su beso, la atormentaba todos los días y en las noches soñaba con el sabor de sus labios.

Sus labios, su sabor, su tacto, todo seguía en su memoria y lo añoraba aún más, pero sus amigos siempre le recordaban que Addison tenía novio y que, en todo caso, estaba jugando con ella.

Dixie sabía que tenían razón, pero, la forma en que Addison la había besado, era diferente.

Igual le alegraba que ahora su amigo Anthony no pudiese reñirla, ya que él también estaba colado por la capitana del grupo de las plásticas, Avani.

Cuando alguna de los dos caía en depresión siempre se consolaban entre ellos. Anthony durante el verano se deprimió varias veces y pasó la noche en casa de Dixie, los dos juntos mirando películas románticas y comiendo helado mientras se abrazaban.

Dixie amaba a Anthony y Anthony a ella, sufrir de amor por unas idiotas había fortalecido aún más su amistad. Charli lamentaba el momento en que sus tres amigos cayeron rendidas por unos idiotas, Madi no podía parar de hablar de Robert tampoco.

Estaban en el carro de Tayler, hablando tranquilamente, y listos para su primer día de clases.
Anthony estaba nervioso, pero tenía en claro que iba a ignorar rotundamente a Gregg.

—Te apuesto que al final del día, está hablando con ella. —le dijo Madi a Charli y las dos apostaron.

—Pues perderán, no le voy a hablar. Está decidido, la superaré a como dé lugar. —dijo muy decidido desde el asiento trasero, junto a Dixie, Madi estaba de copiloto con su hermano.

—Descuida, chico. Cuando tú superes a Gregg, será el mismo día que Dixie deje de babear por Rae. —dijo alegremente Tayler, causando las risas de su hermana y Charli, los otros dos no estaban muy felices.

Dixie bufó, frustrada. Ella también tenía su lucha interna, ya que después de dos meses del beso compartido con Addison, la iba a volver a ver.

No estaba segura de sí la castaña actuaría como si nunca hubiese ocurrido o se vengaría de ella, haciéndole la vida imposible.

Llegaron hasta el estacionamiento y se bajaron del coche. Anthony dio un portazo, aún furioso, mientras sus amigas se reían de su reacción.

—Vamos, Anthony-ah. No te enojes. —le decía Charli colgándose de su cuello y Anthony la ignoró.

—Dix, ¿vamos entrando? —preguntó Anthony a su amiga con una cálida sonrisa, ignorando por completo a Charli, quien chillaba.

—Claro. —respondió Dixie y los cinco comenzaron a caminar hasta la puerta.

Ahora, Dixie tenía dieciséis años y estaba lista para superar este año escolar, pero para lo que aún no estaba preparada, era para Addison.

Y allí estaban.

—Mierda. —murmuró antes de detenerse a unos pasos de la entrada, Madi siguió sus ojos y también la vio.

—Tendrás que pasar a su lado todos modos. —le dijo en un susurro mientras los cinco veían a la castaña.

Junto a los mesones de piedra estaba el grupo de Addison, allí estaba ella, hablando con el chico de nombre Chase y se veía increíble.