Miró los papeles que envió el secretario de Sombravela para una reunión. Después de la última conversación donde Arath intentó convencerlos, no tuvimos noticias, solo se quedaron callados escuchando. Eso me desespera, no entiendo que los retienes. Les dejamos en claro que el Consejo no participará. Hay personas tercas y ciegas que no ven que a veces no todo es sencillo en esta vida.
—No estoy seguro que sea favorable ir.
Mi papa lee atentamente la carta que pide nuestra visita. Su rostro está serio y desconfiado.
—Yo tampoco, pero qué opción tenemos — nos dice Jake.
—No nos hablaron dentro de varios días y ahora si, quieren otra cosa a cambio.
—Lo sé. No sé qué estupidez van a pedir.
—No me agrado su sobrino —confieso. No soy de llevarme por la apariencia o ciertas actitudes de una persona, pero algo en él no me gusto. Mike me dijo que no confiara y se mantuvo callado.
—Tendremos que llevar más gente, le diré a mi Luna que prepare unas piedras por las dudas que se quieran pasar de listos.
—Siento que nos están tomando el pelo.
Asiento con la cabeza a lo que dice mi padre.
—Es lo más seguro y me está molestando, solo iremos porque debemos poner a salvo a las manadas y parar de una maldita vez las muertes.
Jake está dejando a un lado su orgullo para ir, a pesar que lo vean como si de una soja tiraran de él. A la primera que actúen de una manera inadecuada se que explotara y no habrá nadie que lo pare, si no tuviera a Arath en su vida sin duda sus enemigos estarían bajo tierra. Jake después de la muerte de su padre, le costó llevar adelante la manada y ser respetado por otras.
Llegamos más rápido que la anterior vez, vamos más recargados y con mi padre. El es más justo a la hora de hablar, además es un conocido del jefe. Le envió un mensaje a Tahira antes de entrar asegurándome que coma algo rico y esté abrigada, el clima no está tan cálido para su cuerpo. Nosotros no sentimos el frío, pero ella al ser humana si. No quiero que se enferme.
—Deja de pensar en tu mate —se queja Jake.
—No estoy pensando en ella.
—Ajam, tienes esa sonrisa tonta — me empuja con su hombro.
—Es la misma que tenías cuando conociste a Arath —le dice mi padre divertido. No puedo evitar reírme.
<<Tiene razón>>
<<¿Creí que estabas dormido?>>
<<Estaba pensando. Quiero ver a mi Sol>>
<<Acabamos de llegar Mike, resuelvo esto y vamos a verla>>
<<Quiero verla>> Gruñe.
<<Mike. ¿Qué sucede?>>
—Edel, hijo. ¿Qué sucede?
—Mike está inquieto. Quiere que lo lleve con Tahira.
—Es que has estado con ella varias veces, quizás el vínculo se hizo más fuerte y él no quiere separarse, acuérdate que si no tiene la marca tu lobo no puedo durar mucho tiempo sin desesperarse por verla o tocarla — salta Jake. Asiento con la cabeza un poco desacuerdo. No creo que sea eso. Por las dudas, haré que termine lo más rápido esta reunión.
Entramos a la oficina dejando a nuestros guerreros afuera custodiando todo y una alerta nuestra entrarán. Tanner nos observa con una sonrisa, maldita sea quisiera golpearlo, pero lo necesitamos. No se quien es peor él o los del consejo. Vian está a su lado con unos papeles mirándonos indiferente. Repito, no me agrada.
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Mi Dulce Casualidad
FantasyEn el encantador pueblo de Blue Field, dos almas destinadas a encontrarse se cruzan en un momento inesperado. Ella es una joven dulce y soñadora que trabaja en una librería, tratando de superar las heridas de un pasado amoroso. Él es un espíritu val...