Drama Kings (DQ #2) [COMPLETA]

Capítulo 15: Pensar positivamente

Capítulo 15: Pensar positivamente

Lo primero que pensé, mientras esperaba a que la prueba esté lista, fue en la imagen de familia que había formado en mi cabeza desde que era niña.

Toda mi vida me había imaginado teniendo hijos, una de esas familias grandes que viven en casas lo suficientemente espaciosas para que cada uno tenga su propia habitación. Aunque no estaba segura de que Chris Newman fuese el hombre al que me imaginé como su padre.

Pero la vida pocas veces resulta como a nosotros nos gustaría, o como habíamos imaginado. Y hay cierta belleza en lo inesperado.

En la soledad del baño de mi departamento, con mi mejor amiga del otro lado de la puerta, me armé de coraje para hacerme el test de embarazo y, como es de mi naturaleza, mientras esperaba al resultado me preparaba mentalmente para el escenario en el cual daba positivo.

Traer una vida al mundo cuando no tenía un sustento económico fijo ni una relación estable no era lo ideal, ni cerca. Y tendría sólo un par de meses para tratar de hacer que las cosas funcionen.

Y también debía pensar, inevitablemente, en mi rol dentro de la obra de Broadway. Asumiendo que tardaríamos un mes y medio en presentarla, estaría alrededor de tres meses de embarazo o más para el momento del estreno, y el tiempo de permanencia de la obra en cartelera dependía en gran medida del público. Podrían ser semanas, meses o inclusive un año.

Y si teníamos éxito, significaría que deberían buscar un reemplazo para mí.

—¿Todo en orden allí, cariño?

—Todavía no —dije, y me senté en el borde de la bañera. Era como si el tiempo estuviese pasando cada vez más lento mientras yo me perdía en mis pensamientos.

Porque era un hecho que podría dar positivo.

Siempre usaba protección, pero ningún método es completamente seguro, y era cierto que últimamente me encontraba teniendo más nauseas de lo normal y que aún no me llegaba el periodo. Con el ajetreo de las últimas semanas, apenas si me había puesto a pensar al respecto.

"¡El alcohol!" pensé, y no pude evitar llevar mis manos a mi boca para ahogar un grito.

Habíamos bebido alcohol toda la noche, y no hay que ser ningún genio para saber que una embarazada no debe ingerir bebidas alcohólicas por el bienestar de la salud del bebé. Y es que jamás me había planteado la idea de que realmente podría estar embarazada, aunque al parecer el estar ebria me había vuelto más lucida, puesto que había unido dos mas dos sin ningún problema.

Y, por qué negarlo, tendría sentido si lo estuviese.

—¿Qué hay de Chris? —Murmuré.

—¿Qué dijiste? —Me gritó Summer desde el otro lado de la puerta. Dios santo, ¿es que tenía la oreja pegada a la puerta?

—¡Nada!

Chris. Llevábamos viéndonos con frecuencia apenas poco más de un mes, y ni él ni yo estábamos listos para un compromiso tan grande. Y tampoco era como si nos conociésemos tan bien, para ser honestos, por lo que no era lo más ideal.

¿Y qué me diría? ¿Se mantendría a mi lado, sin importar nada, o se marcharía con la excusa de que no estaba seguro de que el bebé era suyo? Porque en el mundo real, esas cosas pasan.

—¿Puedo pasar?

—Si —murmuré, y en respuesta observé que la puerta se abría.

—Ya debe estar listo, han pasado varios minutos.