Betty comenzó a abrir sus ojos a las 7 de la mañana gracias a los primeros rayos del sol y se maldijo por no haber cerrado las cortinas de su ventana por la noche.
Se estiró para despertarse, sabía que no iba a lograr volver a dormirse por lo que comenzó arreglarse desde temprano.
Se puso unos jeans ajustados con muchos cortes y una camiseta ajustada que dejaba a la vista sus curvas, ya que la única forma de convencer a Malachai sobre el plan que tenía en mente iba a ser seduciéndolo.
Betty si lo quería pero jamás a estado segura si es amor lo que siente por él. Se siente segura a su lado pero no es para nada un cuento de hadas ni mariposas en el estómago.
Además nunca ha tenido un buen modelo sobre amor, su madre que pudo haber sido la única persona que de verdad ha amado murió cuando aún era pequeña.
A las 9 de la mañana, salió y marcó el -1 en el ascensor, ahí se encontraba el estacionamiento. Al llegar comenzó a caminar a través de él haciendo que sus pasos hicieran un estruendoso eco.
A los segundos un auto paró junto enfrente de ella. Betty sonrió puesto que ya sospechaba que su novio pondría a sus mejores y más confiados aliados a cuidarla 24/7 y lo afirmó al ver llegar el vehículo con Chuck en su interior —¿Tan temprano te tienen aquí?.
—Jamás me fui— Respondió poniendo en marcha el auto.
Betty se acomodó en el asiento —¿Así de paranoico está Malachai?.
—Solo quiere asegurarse de que estés bien.
La rubia notó que Chuck tomó un camino distinto ese día probablemente para no correr el mismo riesgo de encontrarse con Jughead.
Se dirigían a unas oficinas bajo tierra que poseían los Ghoulies, es sorprendente la cantidad de dinero que se puede ganar en este negocio. Estas se encontraban unas calles más alejadas de Riverdale pero casi en la misma dirección que el departamento de Malachai.
『 』
Betty sonrió al localizar a su novio entre las personas que se movían de un lado a otro dentro de esas oficinas o incluso centros de tortura que se encontraban ahí mismo.
Se bajó un poco más el escote y caminó a paso firme. Malachai al verla acercarse la miró de arriba a abajo orgulloso, con un gesto le indicó que lo esperara en su oficina.
Era normal que no se saludaran en lugares así donde había más gente aunque fueran todos Ghoulies, uno nunca sabe a quién puede tener a su lado.
Betty fue hasta allá y segundos después entró Malachai cerrando la puerta a su espalda. Observó como el hombre se sentaba en su gran silla de cuero, por lo que caminó hasta él para sentarse en su regazo y desde ahí lo besó.
Malachai la apegó más a él —Dormiste bien parece.
—La verdad no. Hay algo que no me puedo sacar de la cabeza.
El hombre rodó los ojos y liberó un poco su agarre —¿Las Serpientes verdad?.
—Exacto— Dijo con una sonrisa coqueta —Tengo un plan.
—No me suelen gustar tus planes— Respondió burlesco.
Betty se incorporó de su regazo y se alejó un poco —Igual siempre consigo lo que quiero— Le guiñó un ojo seductoramente.
Malachai suspiró sabiendo que la mujer decía la verdad —Dime.
—Siempre dices que soy tu debilidad ¿Cierto?— Él asintió —Y a Jughead no se le ha visto con novias ¿Cierto?.
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Sin Sentimientos [Bughead]
RomanceElizabeth, una inteligente asesina parte de la mafia "Ghoulies" descubre el plan perfecto para derrotar a su competencia ¿Saldrá todo como lo había planeado?