Jughead salió del baño pero no fue a buscarla, simplemente se quedó mirando fijamente lo que hacía en la fiesta desde una de las esquinas.
Betty se sentía incómoda, no le importaba hacer de todo aún sabiendo que Jughead se iba a enterar, pero tenerlo ahí mismo observándola era completamente distinto. Verónica se había ido hace un rato entonces no podía buscar refugio en ella.
Tan distinto era tenerlo ahí que de lo nerviosa que estaba y quizás por el alcohol que no la dejaban pensar con claridad, no eligió al mejor chico para empezar a besar.
Este comenzó a tocarla de una manera en la que no le gustó, por lo que lo intentó separar pero él no la dejaba sino que la acercaba aún más.
Derrepente sintió que lo separaban de golpe de ella y en fracción de segundos el hombre ya estaba tirado en el piso con un Jughead furioso sobre él, golpeándolo.
Betty sonrió como pudo y agradeció que él haya estado ahí en ese momento.
Jughead dejó al chico en el piso y se levantó cruzando miradas con Betty —Ven conmigo por favor, no te resistas— Dijo casi suplicando. Ella solo asintió abrazándose a si misma.
Él la tomó de la cintura y la condujo así entre la multitud hasta llegar a su auto —Quiero ir a mi casa— Dijo Betty antes de subir.
Jughead rodeó el auto para subirse en el asiento del piloto —Entonces allá iremos— Luego de unos minutos manejando, llegaron al edificio de ella —¿Traes tus llaves verdad?.
Betty asintió, las sacó de su bolso y se las pasó —Acompáñame por favor.
Jughead asintió algo sorprendido, pero después recordó que estaba borracha, probablemente por la mañana lo iba a volver a odiar como lo había demostrado todos estos días.
La apegó a él y así la ayudó a caminar hasta el elevador y luego hasta la puerta del departamento. Cuando entraron, Betty lo condujo hasta su habitación.
Jughead sin mirar dejó que se pusiera el pijama y después la arropó en su cama.
Le dio un beso en la frente y se levantó dispuesto a irse pero una mano lo detuvo, Jughead se giró sorprendido —Quédate— Pidió Betty haciendo un puchero.
Suspiró —Por la mañana no querrás que esté aquí.
—Por favor— Jughead no puso evitarlo, se quitó los zapatos y se acostó a su lado abrazándola por detrás —Eres el único con el que me he sentido segura de mi misma en este tiempo, aunque te esconda partes de mi... En mucho tiempo haz sido el único que ha confiado en mi.
Jughead frunció el ceño al escucharla "¿Estaré soñando?" Se preguntó, de hecho hasta trató pellizcarse y eso le confirmó que estaba despierto —Shhh... No sigas hablando que me puedo enterar de más y luego me matas— Sonrió ampliamente de reflejo.
Betty rió y se acomodó mejor entre los brazos del hombre, a los pocos minutos sintió como su respiración se fue calmando y tornando más lenta.
Jughead se levantó con cuidado de no moverla mucho y se fue a acostar el sofá, no quería molestarla y también quería pensar en lo que la rubia le había dicho.
『 』
Betty despertó a las 10 de la mañana, se llevó una mano a la cabeza en parte por el dolor y también para tapar un poco la fuerte luz del sol que entraba por su ventana.
Ahí recién notó que estaba en su cama, en su habitación, en su departamento. Se incorporó rápidamente tratando de recordar algo del día anterior pero nada se venía a su mente.

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Sin Sentimientos [Bughead]
RomanceElizabeth, una inteligente asesina parte de la mafia "Ghoulies" descubre el plan perfecto para derrotar a su competencia ¿Saldrá todo como lo había planeado?