𝐈𝐍𝐒𝐎𝐋𝐈𝐓𝐄 | 𝐁𝐁𝐂 𝐃𝐑𝐀𝐂𝐔𝐋𝐀

𝐂𝐇𝐀𝐏𝐓𝐄𝐑 𝐍𝐈𝐍𝐄: 𝐏𝐔𝐑𝐆𝐀𝐓𝐎𝐑𝐈𝐎 (𝐄)

CW: Menciones de sangre, abuso físico (implícito), asesinato (implícito), consumo de sangre, mild smut.

Cuando regresó al comedor después de 'tomar aire' se sentía renovado, enérgico y ligero, como si hubiese despertado después de un profundo descanso. Estaba todavía más alerta e inspirado, fuerte y, definitivamente, poderoso—. ¿Se siente mejor? —Lady Valeria preguntó, bebiendo un trago de su vino que no era particularmente costoso o fino pero que parecía ser suficiente para ella y el resto de los comensales.

Se limpió las esquinas de la boca con una de las servilletas de tela blancas que estaban en la mesa, aunque se había asegurado de no volver al comedor con ningún indicio o rastro que lo que había hecho momentos atrás, todavía parecía sentir que la sangre de su más reciente víctima le bajaba por las comisuras de los labios y la barbilla—. Viel besser, danke* —respondió, acomodándose mejor en el asiento y aclarándose la garganta, sonriendo un poco.

La mujer parecía agradablemente sorprendida—. Ich wusste nicht, dass du Deutsch sprichst.*

Se encogió de hombros despreocupadamente y, a pesar de que sintió un seseo queriéndose apoderar de su lengua, hizo lo posible por impedirlo—. Es war ein neu erworbenes Wissen*

Aunque bien pudieron haber seguido la conversación en alemán, Valeria prefirió no hacerlo—. Su compañía me ha hecho definitivamente menos aburrida la noche —por la expresión en su rostro y el tono de su voz, parecía hablar genuinamente—. He vivido muchos años, como puede ver, y bueno, jamás había conocido a alguien como usted, alguien que supiese un poco de todo y que fuese capaz de amar tanto. Es increíble verlo por fin.

—El amor siempre había representado un total enigma para mí —tomó un trago del agua que le habían servido meramente para mantener las apariencias—, sin embargo, Renai parece darle sentido a una gran parte del mismo. Y, aunque no creo alcanzar a comprenderlo del todo, le doy gracias a ella por al menos haberme hecho entender una porción.

—Qué elocuente es con las palabras —comentó con un tanto de reserva y Drácula agradeció el cumplido asintiendo solo una vez—, si no es mucha molestia, cuénteme cuál es su recuerdo más alegre con su esposa.

El vampiro inclinó la cabeza, pensativo, recordando en la primera vez que vio a Renai, dormida en el sillón de su castillo o la vez en que tomó a su pequeña Tabitha en brazos creyendo imposible que una criatura como él haya sido capaz de crear semejante belleza. De nuevo, la gran mayoría de sus recuerdos felices tenían que ver con Ren. Los otros tenían trasfondos más devastadores y sombríos—. Permítame proponerle un trato —respondió, colocando ambas manos sobre la mesa y entrelazando sus dedos—, Le contaré mi memoria más feliz si, a cambio, usted me cuenta el suyo.

Las facciones de Lady Valeria denotaban interés—. Suena justo.

—Damas primero.

La anciana se quedó contemplando unos momentos, entrecerrando los ojos, reviviendo momentos del pasado como pinturas en un museo que retrataban diferentes aspectos de su vida, algunas tristes y melancólicas, otras dichosas y afortunadas—. La noche que cumplí dieciocho era una ingenua joven apenas, sin dolor en las articulaciones ni medicinas que tomar cada hora para mantener el cuerpo funcionando —comenzó a contar, sobando su muñeca izquierda para hacer alusión al dolor en los huesos que surgía con la edad avanzada—. Mi familia organizó una gran velada para celebrar con tantos invitados que no daba tiempo de saludar a cada uno. Hubo muchísimo despilfarro en preciosos vestidos, peinados exagerados y alcohol a borbotones. Lo que más recuerdo fue haber bailado tanto que parecía que mis pies se iban a caer, ya sabe, esa clase de dolor que recorre hasta las rodillas —tenía la mirada perdida en la llama de la vela al centro de la mesa—. Bailé de la mano de un apuesto caballero. Su cabello era negro y lacio y sus ojos... podía perderme en ellos, quizá lo hice. Cuando miro su rostro, Conde, me recuerda mucho a él, a mi juventud.