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Para dirigirse a su apartamento Seokjin uso su camioneta, ya que la empresa que le había prestado el servicio del viaje en globo le facilito el traslado de su auto a aquella zona.

–¿Cómo llego tu auto aquí?

–todo lo he calculado muy bien para que esta cita sea perfecta para un hombre perfecto como tú.

–nadie es perfecto Seokjin.

–tú lo eres a mis ojos.

Tae sonrió sonrojándose e inflándose sus pómulos. Ambos se subieron al auto. Tae creía que ese era el final de la cita y seria llevado a casa. Miraba con alegría y calidez en su pecho el dije en forma de corazón con una esmeralda en su centro.

–me alegra que te gustara.

–es hermosa.

Ambos se miran con devoción entrecerrando sus ojos totalmente embelesados. Seokjin volvió su vista a la carretera para evitar un accidente.

–Tae.

–dime.

–nuestra cita aún no ha terminado.

Seokjin miro al menor quien lucía sorprendido.

–quiero preguntarte si querías ir a mi casa. Allí yo.... –Seokjin trago saliva algo nervioso de recibir una negativa. –yo he preparado una cena especial para los dos.

Tae se sonrojo de inmediato imaginando lo que pudiera pasar después de la cena. En otro tiempo y con otra persona no hubiera dudado en decir que no sintiéndose indignado. Pero se avergonzó porque él también lo deseaba y si se diera la ocasión sabía que no se negaría. Su corazón comenzó a latir rápidamente de solo pensar que pudiera perder la virginidad en pocas horas llevándole a guardar silencio. Uno que empezaba a ser incómodo para el mayor.

–si no estás de acuerdo lo entenderé. Pero créeme que mis intenciones no son aprovechar la ocasión para algo más. De verdad quiero solo estar contigo en un momento especial e íntimo sin necesidad de tener sexo.

Tae jugaba con sus manos y asentía. Pero como veía que Seokjin seguía mirándole buscando una respuesta sonrió y le respondió que si quería ir. Eso tranquilizo al mayor.

–te aseguro que no te vas a arrepentir.

–lo sé. Hasta ahora ha sido genial y no dudo que siga siendo así.

Finalmente llegaron al lujoso condominio dejando al menor anonadado. Cuando bajaron del auto, Seokjin se acercó a Tae para tomar su mano y entrelazar sus dedos con los de él.

–esto es increíble.

–espera que veas lo que tengo preparado para ti.

Tae sonrió emocionado sintiendo la calidez crecer en su pecho. Una vez adentro del lujoso lugar. La luz era lúgubre porque solo era iluminando por algunos velones. Los cuales fueron encendidos por el empleado de Seokjin y quien apenas realizo lo encomendado por su jefe dejo el lugar. Seguían tomados de la mano caminando por el lugar. Tae observaba con detalle lo precioso y moderno que era todo.

Cuando llegaron a la mesa Tae se impresiono de ver todo tan finamente decorado con globos rojos y dorados en forma de corazón. Ahora entendía porque no habían tenido una cena en un lugar público. También había pétalos regados alrededor del lugar.

–ven siéntate. Ya te traigo lo que prepare.

–¿en serio lo preparaste tú?

–por supuesto. Créeme soy un excelente cocinero.

EFECTO BOOMERANG - JINTAEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora