Omnisciente
Katsuki estaba impactado, nunca se espero ser recibido de manera tan violenta, tampoco esperaba que Izuku se lanzara a sus brazos como si nada, pero tampoco que ahora pareciera odiarlo.
El omega le soltó y Katsuki se alejó rápido de la puerta metálica, ni siquiera le importaba ser golpeado, le dolía más el desprecio del chico.
Izuku dió la vuelta y regreso a la esquina oscura del calabozo, esperaba su muerte, todos creían que había hurtado el caballo del príncipe, ya esperaba su ejecución.
Se sentía tonto por confiar en el alfa, la poca confianza que había ganado desapareció.
— Izuku... — su voz salió triste y baja.
El mencionado le ignoró por completo, el rubio ante tal rechazo, no dijo nada más y corrió de regreso al castilo, pensando en que hacer para recibir el perdón del chico o al menos que sea libre y salvarlo de un terrible final.
Jamás se perdonaría causarle algún daño.
Se sentía horrible y culpable, como si el hubiera causado esa gran desgracia, tal vez si no hubiera regalado su caballo en este momento Izuku estaría en total normalidad donde pertenece.
Tal vez si jamás lo hubiera conocido el omega estuviera mejor, se sentía como una basura.
Entró corriendo a dónde estaba su padre, no le importó interrumpir.
— Liberen a ese omega — su madre, padre y hermano lo vieron con confusión ante tan repentina llegada.
— Pero cometió un robo — nadie entendía porque Katsuki se veía tan desesperado, nunca se le vió así.
— No lo fué — le importaba poco iniciar una pelea familiar por ese omega.
Entonces, Gogo, su hermano mayor interrumpió.— ¿Cuál es ese gran interés por un sucio omega? — simples fueron las palabras que bastaron para colmar la paciencia de el príncipe menor.
— ¡Tú no te metas! — gruñó revelándose ante su familia — déjenlo libre ahora mismo — ni siquiera fue una petición, era una orden.
— ¿Perdonarás un robo solo porque sí? — les sorprendía la actitud de Katsuki, no solía ser tan explosivo o mostrar tanto interés en algo.
Siempre era distanciado de cualquier cosa, desinteresado.
Está vez no era así, hasta parecía desesperado.— Él me salvó — entonces recordó la primera vez que Izuku le rescató de esos tres rufianes — intentaron asesinarme en el bosque y el me salvó — suspiró — yo le di mi caballo como agradecimiento... Lo mínimo que puedo hacer ahora es dejarlo libre — Mitsuki pensó unos segundos y entonces su intuición le dijo algo, ese era el omega del que su hijo se había enamorado.
— Déjenlo libre... Salvó a Katsuki — miró a su esposo que asintió ante las palabras de su mujer.
Gogo solo rodó los ojos, desde su punto de vista, solo era un capricho de su hermano menor — Será invitado al banquete de la noche... Cómo agradecimiento — sin malas intenciones, Mitsuki quería conocer al enamorado de su hijo.
Entonces Katsuki no supo ni que pensar, ojalá fuese tan fácil, para empezar, Izuku jamás haría eso y aparte, ahora de seguro lo quiere matar.
— ¿Hablas en serio? — nunca se espero eso.
— Si — habló claro, el rey Masaru asintió de nuevo, siempre complacería lo que su mujer le pida.
— Bien — Katsuki confundido, asintió lentamente — Lo sacaré... — justo cuando iba a dar la vuelta su madre habló.
— Yo te acompaño — tal era su urgencia por conocer al chico.
— ¿Por qué no hacen que venga él? — vaya, es una reina, las personas deben de ir a ella, no ella a ellos.
— No, así está bien — necesitaba estar en privado con su hijo y el omega.
Este asintió y junto a su madre, fueron hasta la zona de los calabozos.
Ella no hizo ninguna pregunta más a Katsuki, confiaba en su hijo y lo único que quería es que esté fuera felíz, sin importar con quién sea.
Aún así, él iba más que nervioso, no sabía que esperar de todo eso, empezando por el hecho de que posiblemente Izuku jamás le dejé siquiera acercarse.
— Izuku — Katsuki se acercó a las barras metálicas.
El omega le ignoró de nuevo, estando en una esquina viendo hacia la pared.
Mitsuki hizo una seña a uno de los guardias para que abriera la celda.
Era bastante raro ver a la reina por ahí.
Entonces ahí, fue cuando tuvo la atención del salvaje omega, al ser abierta la puerta entonces este se puso de pie y con pasos lentos pero seguros, salió del oscuro calabozo sin siquiera dirigir la mirada a alguno de ellos.
La reina miró al chico analizando este, era un chico bello, normal que su hijo se haya sentido atraído, su cabello era tan lindo como el pasto y su rostro como el de un niño.
Aunque ahora se veía enojado, no dejaba de ser tierno.
— Un placer conocerlo... — habló la mujer, Katsuki miraba con tristeza al omega.
Sus ojos decían todo lo que no salía de sus labios, lastima que Izuku ni siquiera lo volteó a ver.
Está vez no solo era cuestión de orgullo por parte de Izuku, era dolor y muchos sentimientos.
Aunque pareciera estar tan enojado y desinteresado, estaba muy triste y decepcionado.
Después de mucho tiempo confiaba en alguien y abría sus sentimientos, solo para ahora estar en el suelo sintiéndose humillado.
— Izuku — dijo su nombre en voz clara pero se le notaba molesto.
Odiaba a toda la realeza y lo que tenía que ver con esta, gracias a estos su vida quedó desgraciada desde muy temprana edad.— Soy la reina Mitsuki, mi hijo me contó lo que pasó... — Izuku levantó la cabeza rápido y miró al alfa con seriedad — estas invitado a una cena en signo de agradecimiento por salvar a mi hijo — el peliverde rió despacio como burla.
Con unos cuantos pasos lentos y una pequeña sonrisa amenazante, se acercó a la mujer para verla directo a los ojos, sin miedo o respeto alguno.
— Prefiero la muerte... — la ofensa era gigantesca para la reina ¿Quien le negaría una cena a la realeza?
Ignoró por completo al príncipe y a la reina para seguir caminando, claro que se iría para jamás regresar, ni siquiera miró atrás, quería olvidarse de todo.
Hasta del rostro de Katsuki.
— Lo siento... — pidió perdón a su madre que estaba perpleja — es mi culpa — suspiró molesto consigo mismo.
— ¿Lo buscarás? — Katsuki asintió, no se va a rendir tan fácilmente.
Incluso si eso quería decir terminar casi muerto a manos del omega.
— Quiero arreglar todo...
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[HABRA PARTE 2 UWU]
Intentaré subirla mañana ;)
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El Aventurero (Katsudeku) (Omegaverse)
FanfictionEn un tiempo de Reyes y Reinas, donde si no eres realeza eres un habitante más del pueblo. Pero hay uno que otro que no quiere ser ninguno de los dos. Un aventurero.