Una nueva vida

15. Cumpleaños Parte 2

Ni yo entendía que era lo qué acababa de pasar, simplemente sentí la necesidad de salir de ahí, pero tan pronto como llegó, se fue.

Alcancé a salir de la casa antes de volver a entrar, después de todo ¿a dónde se supone que iría?

Creo que debo pensar mejor la próxima vez que decida hacer una escapada dramática.

Subí a la habitación de invitados, pasando de lado por dónde Amara y Ezequiel se encontraban. 

Y es qué no tenía ganas de verles, de hecho estaba enojado, ¿pero con quién exactamente estaba enojado?

¿Con Ezequiel?

¿Con Charlie por irse?

¿Con David por no venir?

No tenía una respuesta.

De pronto la puerta de la habitación se abrió. Tal vez debí cerrarla con seguro, pero no sé si hubiera sido correcto.

–¿Puedo pasar? – no necesité voltear a ver para saber que se trataba de Amara.

Quería decirle que se fuera, que me dejara solo, pero no era lo correcto. Además, no era como que yo tuviera mucha autoridad en esa casa.

–Como sea – le dije cortante

–¿Cómo estás? – preguntó ella

¿Cómo estaba? Vaya pregunta más difícil justo ahora.

–Bien – le respondí sin más

–Eres muy malo mintiendo, ¿sabes?

Caminó desde el marco de la puerta, dónde había estado hasta ahora, y se sentó junto a mí en el borde de la cama.

–No fue solo por un cómic, ¿cierto?

Hubo silencio.

¿Qué se supone que debo responder?

–Sabes... hace rato dijiste algo que me llamó mucho la atención. Dijiste que para nosotros las cosas eran demasiado fáciles, ya que habíamos tenido todo desde siempre.

Carajo, tampoco pensé mucho antes de decir esas cosas.

–Ya... perdo...

–Oh no tienes nada de que disculparte, tienes toda la razón.

La voltee a ver a la cara, preguntando que era lo que quería decir exactamente.

–Recuerdas aquella vez que fuimos a visitar a tu amigo y me preguntaste si alguna vez había estado ahí, o si alguna vez había estado en algún orfanato

Recuerdo eso, fue después de que la viera con ese sujeto desconocido. Al principio quería no entrometerme, pero creo que soy demasiado "curioso", así que llegando a casa le pregunté, pero no lo hice de manera directa, si no que le dije lo que ella acaba de mencionar.

Esa vez no obtuve una respuesta de su parte.

–La verdad es que no, nunca estuve en ningún tipo de orfanato, casa hogar o cualquiera de esas cosas. – dijo ella, hizo una breve pausa y siguió –Desde que nací y tengo memoria siempre he vivido rodeada de estos lujos. Somos solo unos niños mimados. Sobre todo Ezequiel – rodó los ojos al decir esto último

Realmente no entendía que es lo que llevó a Amara a decirme todas estas cosas justo ahora.

–¿Por qué me dices todo eso?

–No lo sé, simplemente pensé que debía hacerlo.

Nuevamente hubo silencio.

–Te quiero Nick. Sé que justo ahora sientes que no tienes a nadie contigo y que todo se está yendo a la mierda.  ¿O me equivoco?