POV. OMNICENTE
Nadie había esperado que el nacimiento del bebé se presentará hoy. Todo estaba previsto para una semana después pero los bebés nunca son puntuales, ¿Verdad?
En el castillo se habían levantado todos con los chillidos y gemidos que hacía Jungkook pues a pesar de que su hijo se conservará en un huevo los dolores en el vientre seguían al estar conectado con el bebé y se intensificaba al ser dos... Sí, eran dos bebés los que venían en camino. Nadie lo predijo, ni los mejores brujos pudieron descifrarlo pero cuando el cambio de encuvo se hizo el asombro se presentó ya que habían terminado siendo dos bebés y no uno como lo marcaba la genética.
En los años posteriores al nacimiento Jimin se había dedicado a buscar en todos los pergaminos del castillo alguna esperanza pero no había encontrado nada más que descepción pero encontraron registros, vidas enteras de las generaciones pasadas de Jungkook lo que le hizo creer que había un posibilidad de conservar la vida aunque tiempo después grande fue su verdad cuando se dieron cuenta que ninguno contenía nada de un nacimiento de gemelos, todos los bebés nacidos, ancestros de su amado habían Sido hijos únicos pero sus hijos, sus pequeños eran dos y eso solo instabala temor en su corazón.
Al pasar de los años Jungkook se había debilitado tanto que se mantuvo en cama. Sus huesos podían verse a través de su piel, sus labios y su piel perdieron su característico brillo, las enfermedades se hicieron presentes, los vomitos ya eran solo sangre, el cansancio era demasiado y el apetito tan poco. Nunca se había sentido tan pésimo como cuando lo escuchaba llorar en las noches pidiendo con lágrimas en los ojos vivir para poder ver a sus hijos. No había sentido tanto odio hacia un dios cómo cuando Jungkook le decía que buscara a alguien para reacer su vida a alguien que pudiera criar a sus hijos, jamás había sentido tanta tristeza e impotencia como ahora que los gritos de Jungkook se escuchaban por todo el pueblo.
Los zapatitos, la ropa se había quedado sin terminar pues Jungkook ya no tenía fuerza para hacerlo así que resignado el último par de trajecitos se quedaron incompletos, como sería su vida sin Jungkook. Hubieron tantas peleas porque no podía soportar que sus hijos arrancarán de su vida a la persona que más amaba pero también no podía soportar que el sol le robara la felicidad de ser padre, todo era tan frustrante y doloroso que muchas veces el dolor de cabeza lo superaba.
Quiso llorar pero debía mantenerse fuerte para Jungkook porque estaba en labor y de una u otra manera debía ayudarlo. Una parte de su dolor fue recorriendo su cuerpo haciendo que se tensarse por la intensidad de este y aún así se mantuvo a su lado hasta que todo termino, hasta que escucho los primeros llantos de sus bebés. Sus pequeños habían nacido en su forma animal pero tan solo faltaron unos minutos para que pasaran a su forma humanoide, una tan pequeña y débil que solo hizo sentirlo peor.
Ese día abrazo a Jungkook y le agradeció tanto por soportarlo y por soporta el dolor. Le recito una y otra vez cuánto lo amaba, cuánto deseaba que se quedara con el y lloro en su hombro todo lo que restaba de la noche pidiendo perdón incansablemente por sus errores pero nada sirvio porque al final Jungkook había caído desmayado por el cansancio del parto y de los dolores que tuvo que pasar.
Se asustó tanto que su mente no proceso nada y solo grito al sol por arrebatarle a su alma gemela, no se tranquilizó hasta que todos los doctores tuvieron que cedarlo para que no se hiciera daño, hasta ahí se calmo.
Despertó en la tarde, sus huesos dolían y su cabeza punsaba pero eso no importaba porque tan rápido como fue conciente corrio hacia el cuarto donde habían atendido a Jungkook y al no encontrarlo ahí su alfa entro en pánico haciendo que sus llamas tomarán un color cobrizo intenso. Corrió y grito tanto que su garganta se seco pero todo se calmo al sentir aún el lazo que los unía aunque aquel lazo ahora era delgado y débil, no como antes que era fuerte y resistente.
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Garden of Paradise [Jikook]
FantasíaJimin, el próximo Rey y el fénix más fuerte jamás pensó que su mate sería aquel Omega al que todos molestaban por no saber de que especie era e ignorando todos sus principios lo negó sin saber que Jungkook era la prueba viviente de aquella leyenda s...