II

1.1K 75 0
                                    

—Tienes que esforzarte mas Kakarotto, tu poder se ha incrementado bastante pero aun así no es suficiente —. Le dijo bardock a Kakarotto, el no era un padre super estricto, ni mucho menos amargado. De hecho era un padre cariñoso, pero quería preparar a su hijo para lo que fuera a llegar, quería que este estuviera preparado para cualquier adversidad que se le presentará.
—Lo se padre. Sigamos entrenando—.Contesto Kakarotto y siguieron con su entrenamiento.

Palacio del Rey vegeta

—Su hija tiene un poder sorprendente señor, es incluso más fuerte que el príncipe a su edad —. Dijo un investigador al rey. Este por su parte se encontraba mirando por el cristal hacia una habitación donde se encontraba una niña peleando contra 30 saibaimans.
—Jumm.! No es de sorprenderse después de todo estamos hablando de mi hija —. Dijo el Rey con soberbia. —Ella será la más grande saiyajin nunca antes vista —. Terminó de hablar el Rey y salió de la sala de observación
—Lo hizo excelente Princesa —. Le dijo el científico a la Princesa
—Jah, lo se. No tienes porque mencionarlo—. Le respondío de mála gana
—Preparen un baño. Rápido.! —. Ordenó y salió caminando del lugar
—Lo hizo excelente Sharotto-Sama —. Dijo una saiyajin a la princesa
—Sabes que no tienes que adorarme como lo hacen los demás. Verdad Riuky—. Le respondío esta a su amiga y siguieron caminando. Caminaron por varios minutos hasta que llegaron a una puerta enorme que daba directo al baño real, donde la princesa se daría un baño y saldria con una nueva armadura saiyajin.
—Entonces, ¿es cierto que harás las pruebas? —. Preguntó Riuky a la princesa.
—Si, así es. Haré las pruebas junto a los demás saiyajins de clase baja, estoy segura de que todos son unos completos debiluchos —. Dijo con humos de superioridad. Aunque es de esperarse, se crio en un ambiente donde la hacian ver invencible.
—No crees que llegues a encontrar alguien interesante ahí. Digo, después de todo, el talento está en todas partes —. Le dijo su amiga y puso a pensar a la otra.
—No lo creo. Pero debo de admitir que sería interesante tener un buen combate —. Terminó de decir.

Goku

Mañana serán las pruebas. Que frustrante, pelear enfrente a todos los saiyajins del planeta o su mayoria. Pero sobre todo, la oportunidad de pelear contra la Princesa, ¿como será?
—Kakarotto.! Terminó el descanso. Continúa con el entrenamiento.! — Seguimos con nuestro entrenamiento varias horas y nos detuvimos cuando mamá llegó al lugar
—Lo están haciendo de maravilla chicos —. Mi madre nos llevó comida y no perdimos nada de tiempo.
—Estoy orgulloso de ti Kakarotto, te has esforzado bastante. No pude tener un mejor hijo —. Sinceramente, escuchar eso de mi padre en verdad me reconfortaba. Seguimos hablando de cosas triviales y luego nos fuimos hacia nuestra casa. Hoy me acosté temprano, mañana necesitaba de todas mis energías
—Kakarotto, ya es hora —. Me levante de la cama cuando mi padre me habló y fui a desayunar. Sentía un hormigueo en los brazos y en el cuerpo. Sin duda alguna estaba muy emocionado.
—Espero que des lo mejor Kakarotto —. Mire a mi padre. Con solo mirarlo me daba cuenta de que en verdad esperaba mucho de mi, esa mirada penetrante que tenía, pero en el fondo podía notar que estaba feliz. No pensaba defraudarlo.
—Bueno, ya es tiempo. Nos vemos.! —. Me despedí de mis padres y sali corriendo en busca de Eugeo.
—Eugeo.!! —. Llamé como unas 30 veces de pie frente a la casa de mi mejor amigo. Hasta que por fin salió. —Ya era hora, vamos tarde apresurate —. Le dije y salí corriendo
—Lo sé, lo siento. Anoche me dormi tarde —. Me contestó mientras corríamos. Llegamos al castillo del rey, ahí se encontraba la Arena.
Caminamos por el castillo, el lugar estaba con señales para que los demás no se perdieran. Llegamos a una sala donde había una multitud de saiyajins.
—Que montón de participantes. Ahora me pregunto si hay alguna posibilidad de entrar en las tropas de Élite —. Al escuchar lo que Eugeo había dicho le pegue en la Cabeza con fuerza.
— !P-Pero que rayos sucede contigo.! ¡Eso dolió! –. Lo vi sobarse la cabeza con una lágrima saliendo de su ojo y no pude evitar reírme. Lo que hizo que Eugeo se cabreara más.
—Deja de hablar como si fueramos unos debiluchos. No pase todo este tiempo entrenando hasta el cansancio para irme como un guerrero de pacotilla —. Le dije y mire como este se puso serio
—T-Tienes razón. Yo tampoco entrene para nada, estoy seguro de que lo lograremos amigo —. Eugeo me brindo una sonrisa y me extendió el puño. Sonríe y choque puños con el, claro que lo íbamos a lograr.
Uno a uno fueron pasando los participantes.
Las pruebas eran divididas en dos partes.
La primera: Median nuestro poder
La segunda : Liberaban un montón de saibaimans, el deber de cada participante era acabar con todos en el menor tiempo posible. Al finalizar las pruebas, se daba a cabo un combate entre dos de los participantes.
—Parece que me toca, nos vemos Kakarotto. Deseame suerte —. Eugeo empezó a caminar hacia la arena mientras me pedía que lo alentara
—No necesitas de la suerte, tu puedes.! —. Le grité y tome asiento. El rato que espere se me hizo eterno, que lento que pasaban las pruebas.
—Participante Kakarotto —. Escuché mi nombre y me puse de pie, ya era mi turno y no aguantaba la emoción. Empeze a caminar y sentí un dolor de cabeza insoportable pero se fue rápidamente —¿Que me pasa? —. Me pregunté.
Vi la luz al final del pasillo y ahí estaba la Arena. Habían cientos de saiyajins espectando las pruebas.
Había una especie de aparato donde se metía el puño para medir el poder de batalla de cada saiyajin, procedí a meter mi puño allí. Si el poder era inferior a 6000, automáticamente ibas a clase baja.
Los números empezaron a subir y a bajar rápidamente y de un pronto a otro se detuvo.
—9000—.Dijo la computadora y solté un suspiro de alivio al escuchar eso. Escuché un fuerte sonido y mire que empezaron a salir 30 saibaimans del suelo. Rápidamente todos se lanzaron contra mi.
Salte hacia atrás esquivando golpe tras golpe de cada uno de ellos, vi una apertura y salte alto para luego lanzar un ataque hacia todos los saibaimans destruyendolos en el acto a cada uno.
—15 Segundos —. Volvió a decír la computadora.
Todos los saiyajins que estaban viendo las pruebas gritaban y me animaban desde las gradas, debo de admitir que se sentía bien ser el centro de atención.
Salí de la arena volviendo a los vestidores donde se encontraban todos los participantes.
—KAKAROTTO.! Lo hiciste genial.! —. Volvi a ver hacia mi derecha donde se encontraba Eugeo caminando muy animado hacia mi.
—Gracias amigo, tu también lo hiciste increíble. No pensé que tu poder fuera de 6500 —. El me mostró una gran sonrisa de satisfacción ante ello, los dos chocamos puños. Estuvimos hablando mientras esperábamos y se escucho un estruendo en el lugar. Me puse de pie y alze la mirada, logré ver a un saiyajin encrustado a la pared y a una saiyajin con una mirada de enojo total. Asumí que ella había sido la que lo golpeó.
—Traté de calmarse, Sharotto-Sama —.¿Sama? ¿Porque le hablaba de esa forma? Mire más atentamente y logre ver un logo en su armadura.
—Es de la realeza —. Dije sorprendido.
—Pues claro, ¿acaso no sabes quien es? Ella es la hija del Rey Vegeta —. Al escuchar eso de Eugeo me sorprendi, ella era la Princesa. Debo de admitir que era bastante linda, a pesar de que su mal genio se notaba a kilómetros.
—¡A continuación, el primer combate! —. Puse mi atención al anuncio, estaba emocionado, no sabía cuando me tocaría pasar a luchar, ¿contra quien sería?  ¿Sería fuerte? No lo sabía, pero sin duda alguna, no podía esperar.
—¡Participante, Kakarotto.! —. Me sorprendi de sobre manera, sería el primero en luchar. Por inercia mire a la princesa, esta se mantenia de brazos cruzados mientras se recostada contra la pared. El anunciante prosiguió hablando — ¡Contra la Princesa.! —. No lo podía creer, ¿era en verdad? —¡Sharotto-Sama.!

Kakarott Donde viven las historias. Descúbrelo ahora