Wyatt y yo atravesamos el bosque, con los lobos a nuestro lado y las pesadillas encaramadas a los árboles, siempre han tenido una agilidad para trepar que si no lo vieses no lo creerías.
- ¡Alaia!- Gritó Jason desde una rama, se habían ofrecido a hacer de vigía y si veían a Addison me avisarían- Es el patio trasero, está lleno de gente y Addison está en medio.
Rápidamente aproveché una ráfaga de viento para elevarme y ponerme al lado de Jason, quién me hizo un hueco en la rama para poder subirme a esta, saben que aun no domino bien el poder de volar.
- Sí, gracias Jason- Le di un leve beso en la mejilla y volví a bajar, encontrándome a un Wyatt muerto de celos- Tranquilo lobito, Jason es prácticamente mi hermano- Dije proporcionándole un beso cálido es los labios.
Cuando salimos del bosque y las pesadillas bajaron de los árboles nos dirigimos directamente hacia el gran pelotón de gente que rodeaba a Addison, la cual se encontraba haciendo figuras de luz blanca, apasionando a su multitud.
- Ejem- Carraspeé cruzándome de brazos, Addi me miró atemorizada mientras que los Zombies me miraban con odio- Todos, largo de aquí, ahora- Dije elevando mi tono de voz muestras chasqueaba los dedos, lo cual hizo un buen efecto en los humanos, quienes se fueron dé alli corriendo, los Zombies sin embargo cuidaban a Addison al igual que los lobos me cuidaban a mi.
- ¿Qué hacéis aquí?- Preguntó Eliza poniéndose delante de mi prima.
- Ya lo sabes, no creo que haya necesidad de explicarlo otra vez- Dije cruzándome de brazos- Así que me vas a dar el collar ¿O voy a tener que empezar a repartir ostias?- Dije crujiendo los nudillos de mi mano izquierda.
Como no los Zombies empezaron a alterarse, haciendo que sus manos se fueran a sus zombibandas.
- Yo de vosotros dejaría esas cosas quietas- Gruñeron los lobos activando sus collares, haciendo retroceder instintivamente a los Zombies.
- Tranquilos- Los calmó Addison- No os harán nada-Dijo segura.
- ¿Y cómo estás tan segura de eso?- Dijo una voz mientras enrollaba sus brazos en mi cintura y apoyaba la cabeza en mi hombro mientras me miraba- ¿Se lo dices tú o se lo digo yo?- Me preguntó Wyatt.
- ¿Decirme el que?- Preguntó confundida Addison.
- A no es nada- Empezó Wyatt- Simplemente ya no eres bienvenida a la guarida hasta que no te quites ese collar, así de simple- Informó Wyatt con indiferencia, este chico cada vez me gusta más.
- ¿Como?- Titubeó mi prima- Eso no... no es verdad- Trató de decir ella antes de mirar a Willa- Willa, eso no es cierto ¿Verdad?- ...- ¿¡Verdad?!
- No Addison- Negó Willa- Hasta que no entregues ese collar no serás bienvenida en nuestra manada- Dijo la loba apartando su vista de la de Addison, sé que para ella aquella frase le partía el corazón, Addison es una de las pocas amigas que tiene y el tener que repudiarla por aquello la mataba por dentro.
- Addison- La llamé firmemente, sacándola de sus pensamientos- Dame ese collar y todo volverá a la normalidad- No sé cuantas veces le voy a tender la mano a Addison, ¿Tanto les cuesta darme permiso para abalanzarme sobre ella y quitárselo de un tirón?
- Todo... volverá a la normalidad- Musitó ella mirando al suelo- La normalidad- Esta vez me miró a los ojos- ¿La normalidad es ser una chica débil, la cual no sabe cual es su lugar en el mundo y que necesita que su prima esquizofrénica la salve cada cinco minutos?- Aquello me sorprendió, Addison en toda su vida jamás había nombrado mi... "pequeño problema" público, y aunque todos lo supieran ya de por sí, me descorazonó que lo dijera ella- No volveré a ser la débil- Empezó ella dándome la espalda- ¡No volveré a ser la chica que necesita ser salvada!- Gritó ella haciendo que una onda expansiva de color gris oscuro nos sacudiera a todos, a excepción de los zombies.
- Mierda- Maldije por lo bajo, por culpa de la onda expansiva mi cuerpo había salido volando hasta incrustarse en la pared, Addison, por su parte se dio la vuelta con los ojos llenos de horror.
- Chi... chicos- Trató de decir, estaba claro que ella estaba tan sorprendida como nosotros- Yo..
- Ahórrate las disculpas- Dije mientras me ponía de pie de mala gana- Addison, escúchame y escúchame bien porque no lo diré otra vez- Dije poniendo mis manos sobre sus hombros con cierta fuerza, haciendo que ella se quejara por el dolor- ¿Estás conmigo...- Empecé a decir mirándola fijamente a los ojos- ...o estas en mi contra?- Aquello la sorprendió bastante, ella sabe perfectamente que debe decir para salir impune y que debe decir para acabar con un ojo morado.
- Ali yo...- Dijo ella apartando mis brazos de sus hombros mientras sujetaba aquella piedra con sus manos- ...sabes que no puedo- Dijo con lágrimas en los ojos, aquello me sentó como balde de agua fría.
- Uff- Suspiré cerrando mis ojos mientras miraba al suelo, pude notar como Addison se entristecía, sabía perfectamente que siempre la quise como una hermana, pero como acabo de decir "La quise"
- Jajajajajajajja- Empecé a reír, reí y reí una y otra vez como si de el chiste más gracioso del mundo se tratara, haciendo que mis pesadillas empezaran a alejar unos pocos metros a los lobos de allí.
- ¡¿Qué es tan gracioso!?- Preguntó Eliza enfadada mientras se ponía como escudo para Addi.
- Tu valor es admirable querida- Dije aun sin levantar mi vista, hiendo que mi pelo no les dejara ver mi rostro- Lástima que eso no te sirva de nada conmigo- Dije esta vez elevando la mirada, haciendo que todos y cada uno de los zombies se asustaran, Addi incluida, mis ojos se habían transformado completamente, mi iris estaba blanco, y el blanco del ojos estaba azul brillante, seguido de que mi pupila era fina y alta, no redonda como de costumbre, mis uñas habían crecido transformándose en garras y en mi boca asomaban dos colmillos.
Espero q os guste el dibujo
- ¿Qué eres?- Se preguntó por lo bajo Eliza mientras yo me elevaba unos metros por encima del suelo mientras mis manos se llenaban de energía azul.- Es curioso- Empecé a decir mientras miraba mis manos- Ni si quiera yo lo sé- Terminé de decir mientras les echaba una mirada pirada, no tardé en lanzar un rayo de hielo al suelo, encerrando a todos los zombies, a excepción de Eliza, en una gran cúpula de hielo.
- ¡Addison!- Gritó Zed desde dentro, el cual ya se había quitado la zombiebanda y trataba de romper el hielo, que lástima que no pueda.
Rápidamente lancé ráfagas de aire a Addison y a Eliza, la cual no tardó en salir volando, siguiendo mis pasos e incrustándose en la pared.
- ¡Eliza!- Gritó Addi al ver a su amiga en la pared- ¡Ahhh!- Gritó desesperada volviendo a emitir una onda de color negro, la cual pude esquivar desde el aire con solo elevarme unos pocos centímetros más.
- ¿Eso es todo lo que tienes primita?- Pregunté seguido de una carcajada, ella, y sin saber como, empezó a lanzarme bolas de luz oscura que emitían de sus manos, las cuales sinceramente eran difíciles de esquivar debido a la gran velocidad a la que iban.
- Esto se pone interesante- Dijo una voz mientras miraba toda la escena desde la oscuridad.