A book behind you 2: A heart.

♡23- Nueva familia.♡ FINAL.

Noa logró llegar hasta ella. Rápidamente se lanzó al suelo sin importarle raspar sus rodillas, seguidamente acunó a Charlotte en sus brazos.

El sonido de las sirenas policiales se hizo presente en todo el lugar, pero para Noa solo importaba la persona que tenía a su lado.

El cuerpo de la castaña estaba lleno de hematomas recientes, por las piedras que la golpearon. Rasguños, y su camisa holgada por su notable embarazo estaba rota, por varios huecos.

—Hey, todo estará bien —susurró Noa, apartando unos mechones del rostro de su compañera.

Charlotte no hablaba, temblaba y se veía débil en sus brazos.

Pero el verdadero temor llegó justamente cuando de la coronilla de su cabeza, brotaba un hilo espeso de sangre.

Y fue cuando Noa se dió cuenta, que estaba perdiendo la conciencia.

Una piedra golpeó su cabeza.

Noa palideció de inmediato, y la abrazó más fuerte, temiendo que alguien llegará a arrebatarsela.

—Quédate conmigo, ¿sí? Resiste... Ya todo pasará. —susurraba.

Charlotte parpadeaba lentamente, luchando por poder seguir consciente, aunque ella misma se dió cuenta que no podía aguantar más.

Con dificultad alzo una mano a la mejilla de su esposo, acariciándolo.

—Si... Si n-no lo logro —hablaba la muchacha con dificultad, en apenas un susurro— s-salva al bebé...

—¡Qué mierda estás diciendo! ¡Saldremos de todo esto! No digas tonterías. No gastes energía, estaremos bien mi reina... —al final su voz comenzó a entrecortarse— todo estará bien, reina.

—Cuida a-al bebé...

Los ojos de Charlotte terminaron por cerrarse, y su mano cayó en un golpe seco a su pecho.

Noa comenzó a quebrarse con impotencia.

—¡Te dije que te quedaras conmigo! —soltó en un grito desgarrador.

—¡Ya llegó la ambulancia! —gritó una voz desconocida a lo lejos.

Pero Noa solo escuchaba un pitido en sus oídos. Sus ojos se oscurecieron y en su mundo solo existía ella. En su mundo que ahora, sentía derrumbarse por completo.

Con una mano libre se agarró de su camisa cerca del pecho. Como si le asfixiase, como si su corazón fuera a fallar.

De la misma manera en la que decayó charlotte seis años atrás tras la muerde de su madre.

—¡Noa!

Se escucharon las voces de los demás chicos a lo lejos, ya estaban todos reunidos ahí.

Asher y Cameron sostenían con fuerza a Esther, obligándola a caminar mientras ella trataba de zafarse de su agarre con ímpetu.

Nick y Blake habían llamado a la policía y a los paramédicos tras la llamada de Adeline. Shenara tenía la mirada perdida, hasta mirar a Charlotte perpleja y correr hasta ella con preocupación.

Jean tenía en brazos a Aneu, quien observaba sin entender nada.

Los médicos llegaron corriendo con una camilla e intentaron forcejear con Noa ya que no quería soltarla. Sus ojos parecían salir de sus órbitas, como si estuviera a punto de tener un paro o un ataque.

—¡Noa! ¡Reacciona! —chilló Shenara a su lado.

Adeline y Nick se acercaron y lograron alejar a Noa para que los médicos la subieran en la camilla.