𝐎 𝟑 | miradas indiscretas

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Anne.

—Me lleva siguiendo todo el tiempo, me da miedo.—Masculla Cole aferrándose a las tiras de su mochila,—Me está todo el día diciendo que tengo que esforzarme pero cuando me descuido me esta coqueteando...

Diana mira al rededor,—¿Crees que pueda hacerte algo?—El niega,—No sé, Cole, solo llevamos una semana y ya te está molestando.

Roy pone sus brazos en jarra y mira directamente a Cole,—Yo estoy de tu parte, tío. Si ese gilipollas no te deja en paz, avísame.

Cole le da una mirada de agradecimiento y asiente,—Gracias, Roy.

Una morena resopla al lado de Roy,—¿Me vas a dar los diez pavos o llamo a mamá?—El resopla y saca un billete de veinte.

—Los quiero de vuelta.

Yo niego,—Espera...¿Quien eres?—Ella me mira indiferente y fuerza la sonrisa más rara que he visto.

—Soy Ingrid, su hermana.—Dijo señalando a Roy, que ponía los ojos en blanco.

Y ahora que me fijaban los dos eran prácticamente iguales. Sus mandíbulas eran dos copias exactas, sus ojos verdes como prados eran y la forma de la cara. Podría decir que eran gemelos pero no.

—Sé lo que estás pensando.—Comentó Ingrid apoyando una mano en el respaldo de la silla de su hermano,—No somos gemelos, somos mellizos. Hay gente que no lo distingue.

—Oh.—Dijo Billy rascándose la nuca. Me hacía gracia por que asentía como se lo hubiese entendido, y yo sabía que por dentro estaba haciéndose preguntas de todo.

Gilbert habló por primera vez en la mañana,—¿Y tú por que no viniste a Avonlea?

Ella cambió su humor a uno más distante,—Problemas... Y eso, bueno, me voy.

Roy pareció cambiar su humor también y miró de nuevo a Cole,—Bueno, ¿Decías que no te deja en paz?—El asintió muy convencido.—¿Crees que seas el único?

Josie lo tomó la palabra,—He teñido varias clases con el Señor Phillips, es un idiota, no creo que Cole sea el único.

Tillie tomó un trozo de yogurt,—Podemos hacer una cosa, si lo sigue haciendo, investigamos. Tu dale un tiempo a ver si para y si no ya buscamos algo de información.

Yo asiento,—Estoy de acuerdo, no nos alarmemos. Igual es así como empieza y luego se vuelve más... Divertido.

Josie me mira con cara de "En serio, bitch?" y agrega,—Ese hombre tiene de divertido lo que yo tengo de monja. Pero por probar, no perdemos nada, ¿no?

Gilbert niega,—¿Y si le hace algo? Cole está bajando sus notas por culpa de ese tipo.

—Ya bueno, pero igual es un calentón. Podemos esperar unos días, no cre—

No puedo seguir hablando que el me interrumpe,—¿Te das cuenta de que puede pasarle algo a Cole? No sabemos de quién estamos hablando... Eso es...

—Acoso.—Termina Jerry comiendo un donut.

—Oh, ahora sabes tú muy bien lo que es el acoso, ¿no?—Digo levantándome para apoyar mis manos en la mesa y mirarlo desafiante.

El parece aceptar el reto y se pone en mi misma posición en frente mía haciendo que nuestras respiraciones se mezclen,—Te recuerdo, que la primera vez que entré al instituto me quitaron un zapato, la cartera y me bajaron la hebilla del pantalón.

—Claro, claro, no te vayas a desnudar y dañes tu masculinidad.—Comento con sarcasmo,—Son fans, no haters.

—No es no, eso es acoso.

𝐂𝐇𝐄𝐑𝐑𝐘 𝐅𝐋𝐀𝐕𝐎𝐑 | awaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora