Naruto: Lo que en verdad nos une

Capítulo 6

Amegakure era conocido como ´´el país que siempre llora´´, debido a las lluvias torrenciales que azotaban todos los días del año, además de ser una aldea totalmente destrozada y triste, ya que durante la guerra fue un punto de choque entre 3 de las grandes naciones, Suna, Iwa y Konoha, que se vio afectada por estos enfrentamientos constantes quedando una gran parte de la aldea en ruinas y muchas vidas perdidas, no solo en los 3 bandos, sino que también personas inocentes que no tenían anda que ver.
Actualmente nuestros protagonistas se habían infiltrado exitosamente en Ame. Rondaban por la aldea viendo el estado en que se encontraba, y era evidente que tuvo mejores días.
-Así que este es Amegakure no Sato. Por el estado de la aldea y la falta de personas en la calle, puedo deducir que la gente vive con miedo y la revolución que se está llevando a cabo está tomando otro nivel- Dijo Naruto un poco molesto. Estaba claro que Amegakure era el ejemplo de que los fuertes solo prevalecerán, mientras los débiles se quedaban sufriendo, y el hecho de estar viviendo era un simple recordatorio de eso.
-Tranquilícense chicos, nosotros estamos aquí para ayudar a cambiar eso, pero es esencial  que nos mantengamos fuera del radar de Hanzo y busquemos al líder de los rebeldes. Según Zetsu se hacen llamar ´´Akatsuki´´- Comentó Obito para ver a los chicos asentir- ¿Alguien ya detecto algo?- Finalizó.
-Sí, hay múltiples firmas de Chakra en el Noroeste a 4 kilómetros, aproximadamente- Informó Karai con semblante serio.
-Dado a juzgar por sus emociones alteradas diría que se preparan para una pelea y que una de esas firmas es Hanzo, pero hay 3 de ellas que se sienten diferentes a las otras, y si me preguntan, diría que son rebeldes. Sugiero que deberíamos ir- Complementó Garu con los 4 comenzando a avanzar en esa dirección. Si tenían suerte, tal vez podrían reunirse con los rebeldes y acabar con Hanzo de paso, por lo que aumentaron su velocidad y rezaban para llegar a tiempo.
Time Skip
-Entonces, líder de Akatsuki, ¿qué harás? Te lo vuelvo a repetir, si tu amigo el pelirrojo te mata aquí mismo, liberaré a la chica y ella y tu amigo se podrán ir, ¿un trato justo, verdad?- Dijo un calmado Hanzo que se sentía triunfante. Akatsuki había sido un dolor de cabeza para él en los últimos 2 años, ya que iban en contra a su estilo de gobernar y ya se había entrometido en muchos de sus planes, por lo que no los dejaría vivir, primero haría que el líder sea asesinado y cazaría a los demás. ´´Corta la cabeza y la serpiente caerá´´, así de simple.
-Maldición- Susurró un chico peli-naranja que no aparentaba ni 20 años y que se encontraba entre la espada y la pared- Nagato, hazlo… mátame- Le dijo a un chico de cabello rojo que estaba al lado de él y lo veía estupefacto- Es la única manera en que tú y Konan podrán salir de esta. No te preocupes amigo… no dudes- Terminó con una sonrisa triste que iba dirigida a su amigo, quien ya no daba crédito a lo que escuchaba.
-¡No Yahiko, Nagato. Sálvense ustedes, déjenme aquí! ¡Ustedes no pue…!- Gritó desesperada una chica de cabello color azul y amordazada que no pudo terminar ya que Hanzo la tiró al suelo, y el ejército de ambus presentes solo se echó a reír por la escena.
-Ya-Yahiko… y-yo- Nagato no terminó ya que Yahiko corrió directo al kunai que tenía en la mano suicidándose… o eso es lo que habría pasado si una silueta no hubiera aparecido detrás de él tomando su hombro e impidiéndole avanzar.
-Prepárense para salir de aquí rápido- Dijo la figura encapuchada que sostenía el hombro de Yahiko, que era más pequeña que él y por su voz se podía deducir que era un niño.
Pero antes de que pudieran preguntar algo, se vio como Hanzo salía disparado al aire como si hubiera sido golpeado, y un segundo después apareció en un borrón otra figura encapuchada que tomó a la peli-azul y despareció con ella tal y como apareció, al lado de los 3 chicos.
-¡Ahora!- Gritó la segunda figura que tenía voz femenina un poco madura, pero joven.
-¡Katon: Gōkakyū no Jutsu!- Gritó una tercera figura en un risco que estaba a la izquierda del que estaban los ambus y Hanzo, disparando 2 enormes bolas de fuego que impactaron en el mini-ejército.
-¡Katon: Kaen H¬osha- Excalmó una cuarta silueta que poseía un Gunbai sobre la capucha en otro risco del lado opuesto del que estaba la tercera persona, que expulsó una corriente de fuego de manera horizontal en una amplitud de 2x5 metros.
Esta fue la oportunidad perfecta para las 2 primeras figuras, que tomaron al trio que estaba siendo amenazado y escaparon. Una vez que estuvieron a salvo, el trio se puso a la defensiva.
-¡¿Quiénes son ustedes?!- Preguntó Yahiko poniéndose enfrente de sus amigos y con un Kunai en la mano, mientras una de las 2 figuras alzó una mano en gesto de que se calmara y habló.
-Tranquilo, no somos enemigos- Dijo quitándose la capucha revelando que se trataba de Karai y la otra persona era Naruto- Hemos venido a ayudar, mi nombre es Karai- Terminó tranquila, pero tomó una inusual actitud fría y estoica que le dio escalofríos a Naruto.
-N-Naruto, un gusto- Dijo un poco asustado y viendo a Karai.
-¿Y bien? ¿Cómo fue?- Preguntó Karai al aire y las 2 personas restantes salieron de las sombras.
-Los ambus murieron, pero Hanzo escapo poco antes de que incendiáramos la zona- Terminó Obito quitándose su capucha.
-Por si acaso dejé un par de Kage Bunshin con un Jutsu de ocultación para investigar, y matarlo si es necesario- Reiteró Garu ya sin su capucha y secando el Gunbai que extrañamente estaba manchado de sangre.
-¿Por qué nos ayudaron?- Preguntó Konan en un tono mortal.
-Queremos lo mismo- Respondió simplemente Obito.
-¿Lo mismo?- Susurró Nagato aun en guardia, quería ver si podían confiar.
-Este lugar sufre por las acciones y decisiones de la gente con gran poder e influencia, la gente inocente vive con miedo y solo con lo que tiene para sobrevivir. No, no solo Amegakure, sino en todo el mundo existen personas así, siendo oprimidas por aquellos que se dieron a sí mismos el derecho de gobernar. Lo que queremos es acabar con el sistema que no permite que todos vivan de esa manera y crear uno nuevo, uno en donde todos puedan el vivir felices, pero es muy pronto para iniciar un golpe directo al mundo entero, así que Ame es un buen comienzo- Dijo Naruto en un tono que denotaba madurez para solo un niño de 9 años, y con una seriedad y convicción implacable, para terminar con una sonrisa.
Después de que los 3 procesaran lo dicho por el más joven, Yahiko fue el primero en hablar – Veo que dicen la verdad, y lo que dices es la cruda realidad que nos azota en este mundo, pero mientras nadie haga algo las cosas seguirán así, y también les quiero agradecer por venir a ayudar. Mi nombre es Yahiko, y ellos son mis amigos Konan y Nagato Uzumaki- Respondió y las 4 personas enfrente de ellos reaccionaron ante esto.
-Es bueno encontrar a más de nosotros- Dijo Naruto sonriendo mientras le estiraba la mano indicándole que la estrechara.
-¿A qué te refieres?- Preguntó Nagato muy confundido.
-El clan Uzumaki. Nuestros orígenes datan de incluso antes de la creación de las Naciones Elementales. Tú cabello rojo es una prueba de que eres de dicho clan- Aclaró Karai con los 3 chicos de la lluvia un poco sorprendidos.
-Y por lo que veo posees una línea de sangre ajena al clan- Dijo Garu llamando la atención de todos- Tus ojos poseen el legendario Doujutsu Rinnegan, los ojos del mismísimo Rikudou Sennin, y pertenecientes al clan Uchiha- Terminó, todo esto de manera seria.
-¡¿Qué?! ¡¿Estás diciendo que desperté los ojos del Sabio?!- Exclamó un Nagato en Shock.
-Despertado es un término incierto en esta ocasión. Más bien implantado por un miembro de mi clan- Respondió de vuelta del mismo modo que antes.
-No estarás insinuando que se los arrebataras, ¿o sí?- Preguntó Konan mirando al Uchiha de forma afilada. Garu no dijo nada unos momentos, y eso fue suficiente para que los 2 amigos de Nagato se pusieran a la defensiva.
-No- Fue todo lo que dijo Garu y los 2 se detuvieron para escucharlo- Conozco al dueño de esos ojos, y si él decidió dártelos es porque debió de confiar en ti. Además yo también soy en parte un Uzumaki, y entre la familia no nos robamos ni dañamos- Terminó de hablar para ver a los 3 de Ame relajarse y pedir disculpas, cosa que él entendió- Mi nombre es Garu, perdonen por el malentendido- Se presentó.
-Soy Obito, un gusto- Dijo con una sonrisa amistosa.
Con las presentaciones hechas, los 3 de la lluvia procedieron a llevar a sus nuevos miembros a conocer al resto de la ´´familia´´, como ellos le decían. Contar con ellos 4 será un cambio para mejor.
Time Skip- 2 años
En todo este tiempo que pasó Akatsuki nunca volvió a ser lo mismo. A las 2 semanas de que se uniera el grupo de Naruto, se esparció la noticia no solo en Ame, sino en todo el mundo, de que Hanzo de la Salamandra había muerto a manos de una organización nueva y desconocida, cosa que puso en alerta a las demás Naciones.
La muerte de Hanzo significó un renacimiento en Ame, por lo que la gente ya no tenía tanto miedo, ya que se sentían protegidos gracias a los Akatsuki, la cual solo hizo crecer su número de miembros de manera exponencial y empezó a reconstruir la aldea, además de cambiar su uniforme, el cual ahora constaba de una capa negra que cubría desde los hombros hasta poco arriba de los tobillos y cuello alto, pero lo que más resaltaba eran esas nubes rojas que llevaban bordadas. Yahiko era conocido como el líder de Akatsuki y el que dirigía todo este cambio, por lo que no tardó en ser nombrado el nuevo líder de Amegakure, quien también permitió que algunos nukenins se unieran como:
Kakuzu de Takigakure: Este ninja fue exiliado de su aldea tras haber fallado la misión de asesinar al Shodaime Hokage, por lo que se hizo con una técnica secreta de dicha aldea y empezó a trabajar como mercenario y recabar innumerables cantidades de dinero, cuando se le preguntó él porque, simplemente contestó -´´Este mundo cambia, y cuando lo vuelva a hacer, es mejor estar preparado´´- Los presentes solo sudaron por tal respuesta.
Sasori de Sunagakure: Este joven de 20 años era un total prodigio en el arte de las marionetas, tanto que se ganó un nombre entre los que practicaban este arte por sus increíbles creaciones. Había renunciado a su estado de Ninja de su aldea para pronto irse a explorar y ver el mundo por su cuenta debido a que no le gustaba como manejaba las cosas el Yondaime Kazekage, y cuando se lo hizo saber a su abuela simplemente le dijo que así eran las cosas. El joven parecía tener una gran admiración por el Sandaime Kazakage, tanto que creó una marioneta muy parecida a él, y con mucho trabajo, copiar su técnica de arena de hierro, además de eso, su trabajo en venenos estaba a otro nivel.
Deidara de Iwagakure, con tan solo 17 años había sido capaz de dominar uno de los kinjutsus más poderosos de su aldea natal, pero la ignorancia de la gente era tanta que le empezó a temer como si fuera una clase de monstruo, por lo que el consejo de la aldea obligó al Tsuchikage a exiliarlo. Sin nada más que aceptar eso, Deidara salió de su aldea, para unos meses después ser reclutado y puesto bajo la protección del ala de Akatsuki. Deidara era el miembro experto en demolición, cuando se necesitaba un trabajo donde la discreción era innecesaria, él era el mejor.
Kisame Hoshigaki de Kirigakure: Uno de los siete espadachines de la niebla sangrienta y apodado el ´´Bijuu sin cola´´ debido a sus masivas cantidades de Chakra y portador de Samehada. Su lealtad a su aldea era tan grande que fue capaz de asesinar a muchos de sus compañeros para proteger los secretos de esta, pero con el Mizukage siendo un sanguinario, decide que ya no puede serle leal, por lo que es reclutado en la organización.
Hidan de Yugakure: Después de que su aldea dejara de ser militar, renegó de ella para profesar su religión, el Jashin, la cual debía buscar aquellos que tuvieran un alma tan contaminada con maldad y deseos impuros para proceder a matarlos en un ritual especial y ganar inmortalidad en el proceso. Él se unió rápidamente a Akatsuki debido a que era más probable que encontrara más presas, pero su actitud de loco sociópata a veces fastidiaba a sus compañeros.
Por su parte, solo Zetsu, Obito y Karai se unieron a los demás, pero Naruto y Garu no debido a que aún eran menores, sin embargo, eso no significaba que no hicieran nada, ya que aparte de entrenar, cumplían con sus labores de jefe de clan. Gracias a diversos clones de Zetsu que servían como espías alrededor del mundo, pudieron descubrir un conjunto de campamentos Uchiha que nunca pertenecieron a Konoha bien escondidos, por lo que Garu en compañía de Obito les fue a dar una visita. Al llegar, naturalmente fueron rodeados y amenazados por su presencia, pero una vez que aclararon que eran Uchihas también, los invitaron a pasar. Era sorprendente que existieran Uchihas que no eran arrogantes, engreídos, orgullosos y hambrientos de poder, sino que estos eran calidos, amables, serviciales y sobretodo hogareños. Mientras que en Konoha existían de entre 700 a 950 Uchiha, estos campamentos albergaban de entre 2500 a 3000, a los cuales se les prometió que algún día se dejaran de esconderse y tendrán un buen lugar donde asentarse.
Por otra parte, Madara le reveló a Naruto que los verdaderos responsables de la ´´caída´´ de Uzu fueron el mismo consejo que hicieron los primeros años de su vida un infierno… eso si lo puso furioso. Ellos habían creado y esparcido un rumor falso sobre Uzu, que desató los grandes miedos de las Naciones Elementales, a excepción de Suna, debido a que el Sandaime Kazekage era muy listo y vio a través del engaño, sin embargo Kiri, Iwa y Kumo se aliaron en contra de Uzu para acabar con ellos. Afortunadamente para ellos, Kensei (el padre de nuestros protagonistas para el que no se acuerde) se enteró de todo a través de unos espías de Konoha en las otras aldeas y mandó el mensaje de vuelta para avisar y ayudar a planificar la defensa de su patria. Y así ocurrió todo como se planeó, las otras aldeas fueron diezmadas a tan solo entran en mar Uzumaki, y procedieron a evacuar Uzu dejando cadáveres falsos para que el engaño sea completamente creíble, quedando ocultos y a salvo del mundo hasta la fecha. Naruto realizó la misma visita que Garu hizo con su clan, pero esta vez iba con Karai y Nagato, en donde que decidió que Naruto sería el líder definitivo y Uzu  renacería de sus cenizas.
Debido a todo esto, Ame, Akatsuki, los Uchiha y Uzumaki llegaron a una alianza para reconstruir Uzu. Al principio los Uzumaki se presentaban reacios a una alianza con los Uchiha, pero cambiaron de parecer al ver cómo eran, y terminaron aceptando, agréguenle a eso que se enteraron de la relación entre Kensei y Kaho que era de amor puro e incondicional, lo cual solo la hizo más fuerte.
Uzu había quedado reconstruida en su totalidad al año y medio, Madara y el Gedo Mazo habían sido trasladados y ahora solo faltaban aliados, por lo que empezaron a hacer misiones para conseguirlos. Primero comenzaron con una misión que originalmente era para Akatsuki, el escoltar a la actriz Yukie Fujikaze y su equipo de grabación al país de la nieve, que hacía que por alguna la mencionada estuviera de mal humor, pero unas cuantas palabras de Naruto (quien participaba en la misión junto con Karai, Nagato, Deidara y Obito) bastaron para calmarla, eso era lo que a la gente le gustaba de él, su gran carisma y manera de ser. Más tarde se enteraron que Yukie en verdad se trataba de Koyuki Kazahana, la princesa del país de la nieve y la que debería tener el puesto de Daimyo en lugar de su malvado tío Doto. Conforme pasaba la misión recibieron un par de ataques por parte de las fuerzas de Doto pero nada que no pudieran manejar, y al ver la situación del país, decidieron ayudar a la larga, así que Karai ideó un plan, el que consistía que secuestraran a Koyuki que tenía un marcador Hiraishin (técnica básica en Uzu debido a los múltiples usuarios de Fuinjutsu y su utilidad en momentos cruciales) y posteriormente irrumpir en la guarida de Doto, averiguando sus planes en el proceso.
Todo se realizó a la perfección, Doto estaba a punto de ser derrotado, así que como su última carta de triunfo encendió una máquina que supuestamente podía conquistar todas las Naciones, grande fue su sorpresa al ver que solo se trataba de una máquina que removía la nieve del país trayendo la primavera. Pronto empezó a delirar cosas ininteligibles, pero solo bastó Rasengan de Naruto para cayarlo. Con todo eso resuelto, Koyuki se alzó como la nueva Daimyo del nuevo país de la primavera y firmó inmediatamente una alianza con Uzu, y pronto se les unió Nami no Kuni, que también hizo una alianza cuando el grupo dirigido por Sasori, Garu y Kisamelos liberaron de las garras del temerario empresario Gato y devolverles sus pertenencias, además de ofrecerles protección.
Durante muchas exploraciones encontraron ninjas renegados y gente que había salido de sus aldeas para buscar una nueva vida, cosa que encontraron en Uzu. Lo más sorprendente fue encontrar clanes que huían de las grandes Naciones por el temor de ser convertidos en armas. Primero iniciamos con los Kaguya, cuando un escuadron de Uchihas liderado por Garu exploraba el país del té los encontraron en una cadena montañosa. Les extendieron una oferta para venir a Uzu y tener una mejor vida, y, aunque sonaba bien, ese no era el método de los Kaguya, ya que ellos eran guerreros por naturaleza, así que hubo un enfrentamiento entre Garu y el heredero del clan, un chico de su misma edad llamado Kimimaro. La batalla fue en su mayoría muy pareja, debido a que ambos eran grandes guerreros y poseían una gran resistencia, pero la experiencia del Uchiha fue lo que lo llevó a la victoria. De esta manera los Kaguya ahora eran parte de Uzu.
El siguiente clan que se les unió fue el Shizen, un clan que podía manipular la energía de la naturaleza y modificar su fuerza, velocidad y resistencia a coste de perder un poco el control. Ellos si aceptaron de buen gana, pero aceptaron aún más cuando Karai les prometió ayudarles a mejorar el control de Senjutsu.
Y por último tenemos a los Kessho, que tenían la habilidad natural de controlar el Shoton y eran unos habilidosos médicos que poseían diversos tipos de plantas curativas, algunas ni siquiera antes vistas. Naruto acompañado de Yahiko y Sasori fueron a hacer contacto con ellos. Al principio se mostraron hostiles, pero el líder del clan y su esposa, Hiroshi y Guren habían decidido escucharlos, por lo que se reunieron con ellos. Naruto les ofreció total protección y un lugar donde poder establecerse sin ser forzados a cosas como el CRA o matrimonios arreglados, cosa que les gustó y aceptaron.
Lo que más cabe a resaltar fue que un escuadrón conformado por Kisame, Konan, Nagato, Naruto y Obito como líder fue en dirección de Mizu no Kuni para apoyar la rebelión en contra de la purga de las líneas de sangre. Al principio los rebeldes se asustaron por ver que un grupo de Akatsuki se les presentó de la nada, pero una vez que aclararon que vinieron a ayudar con la líder de los rebeldes, Mei Terumi, agradecieron profundamente y aceptaron su ayuda. Participaron en diferentes tareas, desde protección de cargamento, transporte de heridos a Uzu, reconocimiento, vigilancia, etcétera. Él día de la batalla final había llegado, la cual fue bastante unilateral debido al diverso número de ninjas nivel Kage entre los rebeldes, además que las fuerzas de Yagura estaban debilitadas por los estragos que se causaron. En cuanto al mismo, no fue oponente para Naruto, no tuvo que utilizar Ninjutsu, solo bastó con una ligera batalla de Taijutsu y logró colocar discretamente un sello de supresión de Chakra, rompiendo así el Genjutsu en el que estaba.
Con la guerra de líneas de sangre acabada, Mei al momento de hacerse con el puesto de Godaime Mizukage firmó una alianza con sus salvadores y les estuvo totalmente agradecida, y dijo que si había algo que pudiera hacer por ellos lo haría, por lo que pidieron a Yagura. Al principio Mei parecía un tanto exaltada por esa petición y la iba a rechazar, pero se presentó evidencia que mostraba la inocencia del ex Mizukage y con eso fue suficiente para convencerla.
Sí, para ser un comienzo no estaba tan mal, pero aún quedan cabos sueltos… bastantes de hecho…
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Fin de capítulo
Las cosas a partir de este punto van a tener un gran cambio en las Naciones, ¿no creen?
De antemano quiero pedir disculpas por no publicar, pero la escuela me va a empezar a quitar tiempo de escritura, no quiere decir que vaya a dejar la obra, la voy a seguir y publicar cuando pueda.
Gracias por leer y hasta el siguiente capítulo