Naruto: Lo que en verdad nos une

Capítulo 8

Minato estaba en un duelo de emociones. Esta mañana se reportaron 2 cosas: en primera la muerte de Shisui Uchiha, esto no le molestó, de hecho de alegró, ya que sabía que ese chico era un gran problema para sus planes y lo quería fuera de la ecuación. Lo que en verdad lo molestaba era que el mismo Hiashi había llegado como si nada a su oficina entregándole todos los Hitai-ates de todos los Hyuga que estaban en el programa Shinobi de la aldea, eso significaba que ya no eran ninjas y ya no entraban en su jurisdicción, y tampoco los civiles podrían hacer algo ya que era un clan.
Pero, ¿por qué Hiashi había hecho eso? Es simple. Esa mañana un chico azabache había llegado a las puertas de su complejo solicitando hablar con él y todo el clan. Cuando estaban en esa reunión le pidieron que se identificara, a lo que solo respondio con ´´-¿Yo? Solo soy un idiota sarcástico, pero no solo uno cualquiera, uno que viene a salvarlos´´- Eso había causado diversas reacciones en todos, pero después Garu procedió a relatar su razón de estar ahí y los planes del consejo que tenían para ellos. Todos parecían horrorizados, excepto los ancianos, quienes empezaban a reclamar que ese no era asunto suyo, cosa que era sospechosa. Hiashi preguntó él porque estas acciones, a lo que las pasas solo dijeron que no tenían que responderle, en eso un silbido de Garu llamó su atención, e hicieron lo que no debían hacer… verlo a los ojos, en los cuales estaba el Sharingan girando lenta e hipnóticamente, quedando atrapados en un Genjutsu.
-Sharingan…- Susurró Hanna Hyuga, la esposa de Hiashi. Si se llegaba a oídos públicos que un Uchiha intervino en cosas ajenas, sin duda meterían en problemas a su amiga Mikoto.
-¿Por qué un Uchiha está interviniendo con lo Hyuga, sabiendo que puedes perjudicar a todo tu clan?- Preguntó de manera imponente y seria Hiashi con todos viéndolo, pero él solo alzó un dedo diciéndoles que guardaran silencio y vieran, para proceder a meter su mano en una de las mangas de su obi y sacar un Hitai-ate, uno que no habían visto hace mucho…

-Yo ni siquiera pertenezco a Konoha, no se preocupen. Hiashi-san, debe ver esto- Al ver el hitai-ate los mayores estaban en Shock. Hiashi miró a los ojos de Garu y vio como los ancianos del clan y los ancianos consejeros planeaban el cómo controlarlos… ¡desde hace más de 4 décadas! Vio el como ellos empezaron a implementar el uso del sello del pájaro enjaulado para esclavizar al clan y separarlo en ramas principal y secundaria.
-N-no puede ser- Murmuró Hiashi con todos viendo su reacción.
-¿Qué sucede, Tou-sama?- Le preguntó Hanabi, su hija mayor viendo incrédula la reacción de su padre.
-¡Esto es traición al clan! ¡Los ancianos nos han vendido! ¡Sus transgresiones son tantas que el único castigo que se me ocurre es la muerte!- Todos estaban impactados, si su líder estaba así de enojado, era por una buena razón. Sabían que los ancianos eran un grano en el trasero, ¿pero algo así?
-Enton: Yari no Jutsu- Pronunció Garu realizando el sello de serpiente con sus manos, mientras que llamas negras se formaban a los alrededores de los ancianos y procedían a atravesarlos bajo la mirada de todos- Listo, ¿qué es lo que harán ahora? No pueden quedarse aquí- Dijo simplemente como si hablara del clima con los cadáveres quemándose.
-Gracias y tienes razón, pero, ¿a dónde iremos?- Por lo dicho por Hiashi todos los presentes estaban armando un debate.
-Cómo pudieron ver, yo vengo de Uzushiogakure no Sato. Antes de venir hablé con Uzukage-sama y Daimyo-sama, y están de acuerdo en recibirlos con los brazos abiertos, ¿qué dicen?- Preguntó el chico con el líder Hyuga y su esposa analizando esto.
-¿Dónde están las letras pequeñas del contrato?- Cuestionó la mujer.
-Justo como esperé, además de ser buenos en Taijutsu, los Hyuga son grandes políticos. Las condiciones de vivir en Uzu son: primero, que todo el clan sea uno solo, no más ramas o divisiones, segundo, se descontinuara el uso del sello del pájaro enjaulado, ya que ese es un sello para prisioneros de guerra y la esclavitud en Uzu es un crimen que se paga con la muerte. El clan Uzumaki está dispuesto a proveer un nuevo sello para lo que originalmente querían, y eso sería todo. Aclarando algunas cosas, no se preocupen por cosas como los matrimonios arreglados o el CRA involuntarios, aborrecemos las cosas en contra de la voluntad de las personas, se les proveerá un recinto especial y deberán esperar un poco para que su estatus de clan se apruebe, solo que si se quieren evitar problemas, por favor no actúen como la gran cosa, el comportamiento engreído es mal visto. Y a sugerencia mía, esto solo es opcional, diría que deberían de cambiar un poco su estilo de combate y enseñanza, por lo que pude ver los ancianos los ralentizaron mucho, créanme cuando les digo que el aprender Ninjutsu puede ser vital en batalla. Con todo esto, ¿están de acuerdo?- Había diferentes reacciones en la sala Hyuga, pero todo se decidía ahora con la palabra de Hiashi, quien meditó un rato.
-A mi parecer son buenos términos. Aceptamos, y no te preocupes me aseguraré que las demandas se cumplan, empezando con el sello y la unión de ambas ramas- Garu asintió y los de la anterior rama secundaria empezaban a soltar lágrimas de felicidad, todos los problemas que tuvieron gracias a eso se habían ido. El chico azabache se levantó, asintió y procedía a retirarse.
-¡Espera!- El llamado de Hanna hizo que se detuviera y volteara hacia ella- Si no te molesta, quisiera saber, ¿por qué nos ayudas?- Ante esa pregunta todos se hicieron hacia él, y pudieron ver que ese rostro y ojos que se mantuvieron estoicos e inexpresivos se suavizaron y puso una sonrisa.
-Usted debería saberlo. Mi madre solía hablarme de como ambas solían entrenar, compartían consejos y experiencias. Ella nos contó a mí y a mis hermanos que usted era como la hermana que nunca tuvo y la consideraba de su familia. La familia se protege y apoya entre sí- Terminó y se podía ver como Hanna se llevó una mano a su boca y sus ojos se abrieron en Shock.
-Kaho…- Susurró Hanna, y esto solo hizo que la sonrisa del joven Uchiha se profundizara y asintiera. Le gustaba ver eso, el efecto que su madre tenía en las personas, sus hermanos y él incluido.
De esa manera los Hyuga renunciaron al sistema Shinobi y procedieron a empacar todas sus pertenencias en los sellos de almacenamiento  que les facilitó el Uchiha. Él permanecía en un rincón viendo como ambas ramas ahora se reintegraban, hasta que algo lo sacó de su trance.
-Disculpa- Le dijo una chica de unos 13 años de ojos perlados, tez clara, cabello laceo, corto y de color castaño oscuro, vestía un traje de entrenamiento de su clan con una chaqueta manga corta amarilla que estaba abierta- Quisiera agradecerle por hacer esto por nosotros, señor idiota sarcástico- Dijo haciendo una reverencia y sacándole una gota a Garu.