Naruto: Lo que en verdad nos une

Capítulo 14

En este momento la sala del consejo de Konoha estaba siendo ocupada por cada miembro de este, pero se les veía de lo más rígidos y nerviosos, ¿razón? El Daimyo del fuego estaba presente en la reunión; este era un hombre joven y muy inteligente, tanto como Shikaku Nara (pero no como Karai), además de que administraba muy bien sus dominios, tanto que era muy difícil esconderle todos esos sucios secretos que hacían sin su consentimiento. Esa era una razón, pero la principal era que sus 2 primeros Hokages, la esposa del Shodaime y hasta el infame Madara Uchiha también estaban ahí, los primeros 3 para saber que le sucedió a la aldea en su ausencia, mientras que el último solo porque estaba aburrido y quería ver que es lo que pasaría, ya que los ancianos y el Yondaime habían citado al Uzukage.
-Realmente es una sorpresa el ver que han sido resucitados, señores y señora- Dijo el Daimyo a los revividos.
-Hasta nosotros, pero realmente me gustaría saber que sucedió mientras no estábamos- Dijo Hashirama, y los civiles se pusieron muy tensos.
-Créeme cuando te digo que no quieres, Hashirama- Le respondió muy cortante Madara al castaño.
-¿Acaso tú sabes?- Preguntó de vuelta.
-No tienes ni idea- Ante la respuesta del azabache, Hashirama estaba empezando a sentir un mal presentimiento, por lo que iba a ponerse a preguntar, pero no lo hizo cuando la puerta se abrió y entraron 2 personas.
Garu y un hombre vestido con una capa negra con capucha y una máscara de Shinigami entraron en la sala, ganándose las miradas de todos los presentes. Se suponía que habían citado a los altos mandos de una aldea pero no había tan siquiera un lugar donde sentarse, así que dando un suspiro, ambos se pusieron a ordenar un par de asientos para sus líderes. Para algunos presentes como los líderes de clan, Rin Nohara, Hiruzen, los últimos 2 Sannin, los revividos y el Daimyo del fuego, sabían que esto significaba que no les estaban dando una buena bienvenida, por lo que este último le lanzó una mala mirada a Minato.
-Espera mocoso, ¿se puede saber quién eres y haces aquí?- Preguntó un civil, cuando inmediatamente recordó que él era el Uchiha del que hablaban desde hace 1 mes.
-Soy cacahuate, un placer conocerte- Dijo Garu de forma infantil. Los civiles y ancianos creyeron que era idiota y si jugaban bien sus cartas, podrían tenerlo como su mascota.
-¿E-enserio?- Preguntó el mismo civil que no contenía su idea de controlar al joven, pero este solo frunció mucho su ceño y se puso molesto.
-¡Claro que no maldito idiota! ¿Por qué mierda sería un maldito placer?- Dijo mientras sentía que las esperanzas de los idiotas se caía. Su tiempo conviviendo con su media hermana Tayuya le había ayudado, mientras Madara reprimía las ganas de reírse abiertamente.
-¡Estas insultando a un miembro del honorable consejo de Konoha y eso tiene un castigo!- Dijo otro civil queriendo salirse con la suya.
-De hecho, más bien desde que llegamos a esta aldea, lo único que hemos recibido son insultos, además que ese hombre inició- Respondió de forma seria el encapuchado, haciendo que el Daimyo se sobe las sienes y para incomodidad de muchos, Madara suelte una pequeña carcajada.
-Típico de ti, eres muy serio normalmente, pero un idiota cuando el asunto es complicado. Preséntate bien, ¿quieres?- Dijo el Uchiha mayor sonriendo.
-Bueno, bueno, lo aprendí del mejor. Cambiando de tema, mi nombre es Garu Uchiha, actual líder del clan Uchiha y representante de los clanes de Uzu a excepción del Uzumaki- Terminó el joven, mientras que al pobre Daimyo le estaba dando su sexto dolor de cabeza en lo que va de la reunión, los civiles parecían pálidos y Mito se exaltó.
-¡Espera! ¡¿Uzu, los Uzumaki viven?!- Preguntó esperanzada mientras Kushina también lo estaba.
-Sí, pero hablemos más de eso cuando llegue Uzukage-sama- Dijo el enmascarado.
-¿Podría presentarse, señor?- Pidió el Daimyo al encapuchado.
-Por supuesto, yo soy Senso (Guerra), capitán ambu de Uzushiogakure no Sato y miembro de la división de los 4 jinetes del Apocalipsis- Terminó el ambu viendo los rostros de impresión de los presentes. Pero antes de que alguien más pregunte, Madara tomó la palabra.
-Oe Garu, solo para corroborar, este Chakra que he estado sintiendo, ¿acaso es de él?- Preguntó Madara a su nieto.
-En efecto, ¿por qué? ¿Curiosidad?- Devolvió de vuelta.
-Disculpa Madara, pero, ¿de quién hablas?- Preguntó un curioso y chismoso Hashirama, ya que le parecía extraño este comportamiento en él.
-Solo de un viejo discípulo- Contestó como si fuera muy normal, pero para los que lo conocían era algo difícil de creer.
-¿Un discípulo, tú?- Añadió Mito igualmente curiosa.
-Sí, lo conocí al término de la Tercer Guerra Shinobi. Era un ninja de aquí y un miembro de mi clan. La primera vez que lo vi estaba al borde de la muerte, su equipo lo había traicionado a pesar del sacrificio que hizo por ellos, y sin embargo, estaba listo para morir- Dijo el azabache mayor viendo la expresión de Hashirama cuando mencionó traición- Cuando lo salvé, lo tomé como mi aprendiz, en verdad es alguien que se esfuerza mucho hasta lograr su meta. Irónicamente, una noche volvió a salvar la vida de sus compañeros y evitar que su antigua mejor amiga se convierta en la Jinchuriki del Sanbi, pero el crédito le fue dado a un patán- Continuó con muchos luciendo sorprendidos, ya que conocían la misión, en donde supuestamente Kakashi había salvado el día, pero resulta que no era verdad. Unos ya sospechaban quien podría ser, ya que solo había una persona que encaja en la historia- Su nombre es… Obito Uchiha- Soltó la bomba. Las respuestas eran variadas.
-¿E-espera? ¿Está seguro de esto?- Preguntó el Sandaime. En el pasado había conocido al chico y no podía evitar compararlo con su antigua figura de nieto del que no sabía nada desde hace mucho.
-Muy seguro, siento su firma de Chakra tan clara como el agua- Dijo Madara. Minato se molestó un poco por esto, al igual que Kakashi. Kushina y Rin solo podían sentirse aliviadas por saber que estaba vivo, y esta última juró ir con él para pedirle perdón y por fin corresponderle… lástima.
-¿Cómo esta él?- Preguntó Kushina queriendo saber de su figura de hermano pequeño y el chico que le caía tan bien.
-Actualmente es uno de los hombres más fuertes, importantes y respetados en toda Uzu. Su nivel y esfuerzo le han traído bastantes frutos, y es feliz. De hecho, hace unos meses su esposa acaba de tener a su segundo hijo- Explicó Garu. Rin al escuchar lo último sintió como su corazón dolía, ¿así era como se sentía Obito cuando lo ignoraba sin darse cuenta?- Estará presente dentro de poco, ya que tiene que estarlo... después de todo, él es Uzukage-sama- Terminó el joven y el consejo se había sorprendido una vez más.
-¿Qué no solo un Uzumaki puede ser el Uzukage?- Preguntó el Daimyo del fuego con intriga.
-No necesariamente. Desde hace tiempo los clanes Uchiha y Uzumaki han establecido una relación de hermandad, y el que Obito-sama este en el puesto es una muestra de respeto a esa relación, además por el mérito y reconocimiento que obtuvo- Respondió Senso dejando incrédulos a los de la sala. Pero Danzo pronto tuvo una idea que le hizo sonreír internamente.
-Y los Uchiha están relacionados con Konoha, por lo tanto los Uzumaki están definitivamente aliados con nosotros- Comentó siendo respaldado por los civiles. El ver esto no les gustó a algunos, en especial a Tobirama. Garu empezó a reír ruidosamente, haciendo que enfoquen su atención en él.
-Es irónico, ¿no crees? Hace apenas unos años tenías extendido un rumor falso sobre mi clan para asesinarlos, ¿y ahora utilizas su nombre para tus causas egoístas? Así que escúchame, pedazo de mierda, vuelve a mancillar el nombre de mi clan o aldea, y te mataré- Respondió Garu mientras hacía sentir una parte de su presencia y le dirigía una mirada que reflejaba la muerte.
Antes de que siguiera la discusión, las puertas volvieron a ser abiertas, por donde entró otra figura encapuchada y con máscara de Shinigami, pero difirente a la de Senso, y parecía ser mujer; seguida de ella, entró otra mujer, se trataba de Ryoko, que no venía de cara bonita, ella podría ser una esposa y madre amorosa y cálida, pero también era muy inteligente y calculadora, alguien perfecta para el puesto de intermediaria, y por último, apareció el Uzukage con su máscara aún.
-¿O-Obito, e-eres tú?- Preguntó el Sandaime queriendo ver a su antiguo nieto que le traía alegrías, y también Kushina. El Uzukage solo suspiró, y lentamente se quitó la máscara. Una vez fuera, se mostró su joven rostro de adulto, estaba algo bronceado, pero lo más notable era esa cicatriz que le cubría media cara como consecuencia de ese accidente en la guerra; era totalmente guapo, y muchas mujeres de ahí se lo atribuyeron en sus mentes.
-Ha pasado tiempo… Konoha- Respondió de forma seria y cortante, sin ninguna emoción en su rostro. Eso, y su voz madura, estremecieron a algunos, como Kakashi. El aura que despedía reflejaba confianza y poder.
-Es bueno volverte a ver, Obito- Dijo Kushina conteniendo las ganas de ir a abrazarlo. Él y Ryoko divisaron su cabello blanco, sabían lo que se trataba, Mito también, no quiso preguntar, pero se sentía decepcionada.
-Ya veo…- Fue todo lo que dijo Obito y se fue a sentar al lado de su esposa. Claramente la mujer peliblanca se sintió incómoda, y Tsunade que lo notó, iba a protestar, pero el Daimyo habló.
-Daremos inicio a esta reunión, así que pido por favor que guarden silencio, y si tienen algún comentario irrelevante, se lo queden para ustedes- Ordenó el hombre y todos se callaron.
-Bien, el tema de esta reunión iba a ser primariamente una posible alianza, pero antes de eso queremos explicaciones. ¿Qué hace un Hyuga y un Uchiha en las filas de Uzu, cuando pertenecen a Konoha?- Cuestionó Homura con sus 2 compañeros y los civiles estando de acuerdo.
-Los Hyuga llegaron un día a Uzu pidiendo asilo político, cuando preguntamos, nos contaron como los altos mandos aquí presentes tenían planes de esclavitud y servidumbre para ellos, por lo que temiendo por sus vidas renunciaron al programa Shinobi y partieron- Explicó Obito viendo el cómo los implicados se ponían rígidos y a la ofensiva, mientras que los que no sabían solo se sorprendían. Los hermanos Senju y Mito se quedaron en Shock por ello- Y en cuanto a los Uchiha. Ellos fueron sacados de aquí por Garu aquí presente antes de que Itachi Uchiha empezara a cobrar las vidas de sus familiares por órdenes de Danzo y el Hokage- Terminó obteniendo las mismas reacciones, pero más profundizadas, y el Daimyo apretaba su abanico en ira.
-¡Namikaze, ¿por qué no se me notificó nada de esto?!- Exclamó el joven bastante molesto.
-¡D-debe de ser una acusación falsa, Daimyo-sama!- Respondió el rubio atemorizado.
-Oh no, claro que no lo es- Mencionó Garu mientras sacaba del sello en su muñeca los diarios de Minato y Danzo, haciéndoles estrecharse y fruncir el ceño- Como pueden ver, todo lo que acusemos es verdadero y hay pruebas, esto es prácticamente una confesión- Añadió el chico. Los tenia donde quería. Esta era su venganza por todo lo que ellos le hicieron a todo lo que amaba.
-¿Cómo es que los tienes?- Preguntó Danzo irritado.
-Bueno, dejas las instalaciones de tus ambus y tu oficina muy desprotegidos, y en cuanto el Hokage, bueno, estaba muy ocupado pensando de qué color seria la ropa interior de mis compañeras y sensei, que no notó cuando simplemente caminé y tomé prestado su diario- Respondió restándole importancia. Minato recibió la mirada de Kushina que decía que quería una explicación, pero simplemente la ignoró, ya que este era el último de los problemas.
-Ahora déjenme ver, ¿dicen que los Hyuga prácticamente tuvieron que escapar para evitar un destino cruel y lleno de miseria, y que los Uchiha en realidad no murieron, solo fueron trasladados y que se juzgó mal a Itachi Uchiha?- Preguntó Shikaku queriendo hacer un resumen de lo que ocurrió.
-Prácticamente si- Respondió secamente Ryoko.
-¡Eso no importa, esos clanes le pertenecen a Konoha y tendrán que devolverlos!- Exclamó Koharu como la anciana ridícula que es.
-¡Suficiente!- Gritó Tobirama ya harto por todo esto- ¡¿Qué demonios sucedió, expliquen?!- Exclamó alzando su intensión asesina que afectaba a civiles principalmente, y un suspiro de Madara llamó la atención de todos.
-¿Recuerdas lo que te intenté explicar ese día antes de convertirnos en enemigos, Hashirama? Es exactamente lo que está pasando, si tan solo me hubieras escuchado… pero este no es tiempo para lamentarse- Dijo el Uchiha mayor, e inmediatamente Hashirama apretó los puños. Su viejo amigo terminó teniendo la razón y por su culpa había hecho mucho daño.
-Oiga, ¿no cree que es muy pronto para decir ´´te lo dije´´?- Preguntó Senso.
-¿A qué se refieren?- Preguntó Tobirama serio.
-Esto no es más que solo una pequeña parte de las transgresiones de Konoha en contra de nuestra aldea- Escupió Obito haciendo que muchos ojos se estrecharan en Shock.
- Así es, por ejemplo ellos fueron los responsables de la caída de Uzu- Respaldó Ryoko.
-¡¿Qué?!- Exclamó Mito.
-Tal y como escuchó, Mito-sama. Según las notas de Danzo, esparcieron un rumor falso que levantó a las demás naciones contra nuestra gente- Continuó Ryoko. Mito empezó a temblar y sentirse destrozada. Los Uzumaki antes habían confiado en Konoha y recibieron esto- No se preocupe Mito-sama. Afortunadamente en esos tiempos un chico de nuestro clan que vivía aquí se enteró de esto y pasó el aviso de vuelta, también ayudó a planificar el contraataque. Gracias a eso los Uzumaki sobrevivieron y abandonaron su hogar para esconderse- Explicó viendo como la sorpresa volvía a estar latente, pero la más sorprendida era Mito.
-Espera… un chico de nuestro clan, entonces ese sería… ¡Kensei-kun!- Exclamó Mito recordando al chico que tan bien le caía. Recuerda que era alguien serio, pero a la vez amigable y cálido; solía tener charlas muy intelectuales con él y lo amaba como a un nieto. Los jefes de clanes recordaron ese nombre y a su cabeza les vino la imagen del hombre cuando era joven que se la pasaba al lado de la mujer que se convertiría en su esposa-¿Qué sucedió con mi niño?- Preguntó desesperadamente sorprendiendo a Hashirama y Tsunade.