Esta de vuelta

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Tom se había esfumado.

Christian, Christopher, Lydia y yo estábamos buscando sus datos recientes, donde usó su tarjeta, hasta las gasolineras donde estuvo y las pistas nos llevaban a la nada.

— Tengo una teoría — Solté desanimada — Se lo tragó la tierra.

— No podemos darnos por vencidos ahora — Alegó Christopher.

— No me estoy rindiendo, sólo que estoy cansada y no hemos llegado a nada, debemos hacer el trabajo más terrestre, tal vez llevar más gente con Blake y Dante.

— ¿Si sabes que Blake y Dante han tenido la misma suerte que nosotros hasta ahora? — Dijo Christopher con tono pesado.

— Es mejor que estar encerrados en una oficina sin nada mas que ver, esta mierda de información nos lleva a nada — Me levanté con enojo de la silla y salí de allí lo más rápido que pude.

Estaba enojada, frustrada, no podía tener éxito en la búsqueda y eso me mantenía en un estado de estrés constante, me fui hacia una sala vacía de nuestra sede del FBI, contemplé en silencio aquel lugar, trataba de ordenar mis pensamientos cuando vi a Christopher entrar.

— Morgan quiero pedirte una disculpa, estamos bajo un nivel de estrés alto, y estoy frustrado de no encontrar a Tom.

— No lo entiendo, no pudo simplemente desaparecer sin más, siempre hay pistas o indicios mínimos que nos llevarían a él, pero tal vez no tenga la mente clara en este momento.

— Yo te metí en esto y quiero que no te tomes muy personal lo que te voy a decir pero quiero que dejes de trabajar unas horas o días, eso puede alterar tu estado de salud y el del bebé también — Lo miré desconcertada, sus palabras sonaban sinceras.

— Te aseguro que embarazada o no puedo hacerlo, sólo dame espacio y formular otra manera de buscarlo.

— Vas a irte de una manera u otra, te quiero fuera del caso de mi hermano.

¿Me estaba exigiendo algo? ¿Fuera del caso?

— Si tienes las bolas para echarme del caso las tienes para aguantar a una embarazada que quiere ayudarte además, ¿Quien eres tú para despedirme?

— El jefe de la investigación lleva seis años trabajando para nosotros — Dijo Christian apareciendo en la sala.

— Puede ser el jefe de quien quiera pero nadie te esta dando el poder para sacarme, así que seguiré en la búsqueda — Hablé poniéndome en pie.

— No seas obstinada, descansa al menos Morgan.

Después de tanta insistencia tomé un descanso y me quedé en la sala con Blake que había llegado con algo de café para mi, y una dona.

— ¿Entonces quería que te fueras del caso? ¿Como te pide eso sabiendo la falta de personal? — Preguntó Blake.

— ¿Crees que ellos me protegen?

— Comes por dos, respiras por dos, llevas un niño dentro cielo te queremos proteger, pero eso no justifica el hecho de querer echarte.

— Lo entiendo Blake pero estoy bien y dispuesta a ayudar, tal vez el estrés los tenga así de alertas.

— Deja y cruzo un par de palabras con Christopher, quiero verlos trabajar sin ti, les costará meses encontrarlo eres aplicada y muy buena en lo que haces eso nos suma puntos a la búsqueda.

Sonreí para Blake, pero quería evitar la conversación entre ellos, mi esposo lleva años en esto, Christopher sólo seis y no me gustaría ver un duelo de esto.

¡Morgan es un cliché!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora