¡Morgan es un cliché!

En silencio (Especial Christian)

— Christian Pov —

Ver a Lydia tomar la niña de Morgan en brazos me alegraba, pero muy al fondo podía sentir su tristeza, el perder un bebé a su edad no debía ser fácil, y menos perder a todo tu equipo y que tu esposo fuera en él lo hacía el doble de apestoso.

Los minutos pasaban, algo no andaba bien, no veía a Morgan o a Blake por ningún lugar y me estaba preocupando, no dejé que eso afectara a Lydia o a su hermano y me fui con la excusa de querer ir al baño.

Después de caminar unos minutos y cerca de los matorrales estaba Blake tendido en el suelo, bañado en sudor y lágrimas, rápido corrí hacia él y vi una jeringa con una inscripción que decía antídoto para el paralizante, para nuestra suerte al aplicarlo el efecto fue casi inmediato y el sentimiento de tristeza en Blake me conmovió.

— Debo encontrarla Christian, debo hacerlo, como es que ella...

— Cállate y escúchame, Morgan acaba de sacrificarse por su familia, a este punto no hay mucho que podamos hacer ninguno, sólo proteger a tu familia Blake, sabía que si nos contaba de su plan iríamos tras ella, conozco a Morgan más de lo que crees y sabe que cometió en un error ahora buscará como enmendarlo.

— No importa si tiene que dar su propia vida, ella va a salvarnos, pero prometí no dejarla no importa lo que se venga encima.

Blake es un tipo fuerte, más de lo que creí, y me recordaba a mi joven yo tratando de salvar a mis hijos de su madre, Thomas y Christopher. Aunque hasta hoy no sé de Thomas puedo prometer que no los abandoné y los cuidé todo lo que pude.

— Muchos años atrás —

Cuidar de Tom y Christopher se había vuelto un dolor de cabeza fatal, mi esposa últimamente estaba trabajando demasiado y yo me encargaba del mío en la policía, estaba desecho y los únicos días que ella pasaba en casa se la pasaba en la habitación y los niños cada vez más tristes, ya no sabía que responder cuando preguntaban por qué mami no llegaba.

Así como ellos su ausencia ya no colaba tan bien a que fuera sólo por trabajo, así que, como todo, empezó el marido celoso empecé a perseguirla pensando que me engañaba con otro hombre, sabía que ella no se daba cuenta de que su amado esposo lo seguía y los primeros días no mentía de su oficina no salía, pero una semana después todo se tornó más oscuro, un auto negro se acercaba a recogerla daban vueltas unas cuadras y la regresaban a su oficina. Dos días después ese auto se la llevó y no pude seguirla, pasó dos días fuera de nuestro lugar de residencia, cuando regresó, no la confronté y pasamos una tarde animada con los niños.

Tres días después volvió al trabajo, y esta vez le puse un micro rastreador en un botón de su blusa, allí cuatro horas después cuando salió de la oficina otra vez, esta vez fui mas sigiloso cuando la seguí, no iba solo con un chofer iban más personas allí dentro, y luego de tres horas de viaje llegamos a un depósito viejo, y todo se fue al carajo cuando vi que sacaban a un hombre atado del auto y con su cabeza cubierta por un saco.

Ya dentro fue dónde supe todo, mi esposa Meredith era la jefa de uno de los negocios familiares más peligrosos del mundo, no tenían nombre, pero todos les temen, habían rumores de que unos hermanos lideraban una mafia que fue heredada por un psicópata, hasta dónde pude ver los asesinatos cometidos fueron sangrientos y violentos, el que presencié no fue una excepción.

No recuerdo su nombre, me esforcé tanto por olvidarlo que cuando intenté hacerlo mi cabeza no me lo permitió, volví a casa con mis hijos y sin saber como explicarles que su mamá quemó vivo a un hombre que parecía inocente. Pues cuando decidí contarles la verdad, Christopher palideció y Tom se enfureció tanto que decidió gritarme diciendo que todo era una mentira.

Romperle el corazón a los hijos no era fácil, sé que Tom no lo olvidó, pero Christopher si lo hizo, y sin nadie decirle nada, se creó la historia en su cabeza de que su madre lo abandonó sin motivo aparente y eso ha dicho desde siempre, parece no recordar que fui yo quién eché a su madre de casa y que Tom decidió irse con sus tíos después del desastre. El saber que mi esposa era una mafiosa fue difícil, pero era mucho peor para ellos el tener que asimilar que ninguno de nosotros conocíamos con quien estábamos conviviendo.

Intenté llevar a Christopher a que tomara mi profesión, pero su reacción siempre ha sido alejarse de estas cosas, nunca le agradó saber que la vida de su padre corría peligro todos los días que pisaba su oficina, por eso su decisión de abandonar todo lo que a lo policial se relacionara.

— Actualidad —

Ver a Blake temblar de la desesperación me recordaba a la impotencia que sentía al ver como en mi familia todo se fue a la mierda, y este hombre estaba en el mismo camino.

Morgan no era mala, pero era de una entrañable valentía y con tal de defender a su familia daría su propia vida. Yo no pude mantener a mi familia segura, pero ella trataría de hacerlo y que todo terminara bien, aunque en esto no todos pueden ganar.

— Christian, tienes que llevarme con ella, buscaremos dónde dejar a los niños.

— No podemos movernos, al menos no hoy, ella pasará la noche segura, déjame ver si puedo sacar a tus hijos del país, la madre de Morgan, Bruno y sus hermanos tienen que irse del país, por el momento ve y revisa la cuestión de los pasaportes, hay una tía en el extranjero que los puede ayudar.

Miré a Lydia, que tenía a la niña en brazos, ella estaba preocupada, esta situación se salía de nuestras manos.

Entendía a Blake pero también a Morgan, sus puntos de vista ambos eran válidos, sus razones para cometer sus loqueras eran válidas, ambos estaban protegiendo a quienes mas quieren. El asunto con mi ex esposa es cruel y despiadado, pero tarde o temprano ella vendría en contra de nosotros, sólo que por un fallo el proceso se adelantó.

Y lo que se viene es malo.

Hola lectores y lectoras, estoy súper feliz, también algo nostálgica porque ¡Morgan es un cliché! está llegando a su fin.

Como parte de este cap traigo una canción para recomendarles, su nombre es In Silence de Janet Suhh, espero que la disfruten y preparen los pañuelos para lo que se viene.