XV

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¡Hola! Como todos los jueves les traigo un nuevo capítulo. Un poco mas de esa estadía en la playa de estos que no dan más. Espero que les guste. Vuelvo a ser repetitiva pero es por que nunca me parece suficiente les agradezco a todas por leer, votar y comentar. Por seguir leyendo a pesar de que hace rato que la historia de ambas terminó. Realmente significa un montón.

También quería decirles que espero que anden bien y cuidandose. Que dentro de nada tenemos el estreno de la nueva serie de Manolo donde estará Cecilia (entre otros) y parece que vale muchísimo la pena. Si leen esto cuentenme que les pareció el tráiler que subieron. Yo tengo todas mis fichas en ese estreno. Debe ser lo tercero mejor de esta pandemia después del live de Paco con Cecilia en ig y el estreno de la tercera de la casa de las flores 😂.

Bueno ya no tengo mucho más para decir. ¡Solo que lxs leo!

Besos,

Vero.

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No puede explicar lo que les ha costado salir de la cama cuando sono la alarma tan temprano. Durmieron alrededor de cinco horas lo cual es poco pero allí estan entrando en la playa por ese camino de madera rodeado de arbustos. José María está observando todo aquello con mucha atención y sorpresa. No puede creer lo que ve. El color de la arena, el mar y el cielo que parecieran ser uno solo. Esta impactado tanto que hace un par de segundos que no dice nada. Paulina camina detrás de el viendo que no ha dicho una palabra al respecto. No puede no reparar en el bañador azulado que lleva que va con su camisa oscura que tiene detalles en blanco y celestes. Cuando llegan al final del camino de madera el se queda estático allí.

- Paulina se para a su lado para alzar la vista y ver su cara de sorpresa- Pues ¿Que te parece? -.

- Que probablemente estoy muerto y  aún no me enteré. Que asi se ve el cielo - reflexiona mientras que pisa la arena que arde y es tan clara que lo maravilla-.

- Será entonces que nos hemos muerto juntos -agrega ella para bajar a la arena y buscar un sitio debajo de alguna palmera para no sufrir con el sol-.

José María la sigue por inercia y por la forma en que camina que sus ojos simplemente no puede dejar de verle. Paulina lleva un vestido liviano color colorado corto con estrellas pequeñas de diferentes tonalidades que ata a su cintura con un moño y unas sandalias. La ve como se ubica debajo de una palmera en la sombra para dejar su bolso y tomar una de las esterillas para extenderla en la arena. El se detiene en frente de ella cuando la ve como deshace el moño de su vestido para quitárselo. Esta demasiado ajena como para darse cuenta que la esta viendo en detalle. Lleva otro bañador diferente al del dia anterior pero que le queda igual de hermoso. Este tiene tiras que se atan en su nuca y es a rayas azul con blanco. Tan guapa que podría matarlo.

- ¿Me pasas protector en la espalda? -dice Paulina ya sin el vestido para buscar en su bolso el bronceador-.

- Vale ¿y luego tú me pasas a mi? -dice el para quitarse la camisa en el momento en que ella voltea para verlo-.

- Pues claro que si. Guapo -le guiña un ojo para coquetear con él-.

Ella voltea para recoger su pelo en un moño alto asi tiene la espalda y hombros despejados. Le pasa el bronceador por encima de su hombro derecho para que él luego de repasar con su mirada su cuerpo le ponga un poco en cada lado de sus hombros para cerrarlo y dejarlo en la esterilla. Apoya sus manos sobre sus hombros para desparramar por toda su espalda. Paulina siente esa corriente usual que la recorre estremeciendo su piel al paso de sus manos. Si fuera por el iría más allá con ellas pero no es lo que le ha pedido para su desgracia.

- Listo cariño -le dice para besar entre su nuca y los hombros-.

Voltea para encontrarse con su mirada que lo observa todo. Tan bello todo el tiempo que le da un poco de bronca. Se pone de puntas de pie para besar sus labios y tomar sus hombros para girarlo mientras ríe.

Tú NombreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora