XVII

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¡Hola a todxs! Volví y en el dia que corresponde es para festejar eh. Logré equilibrar lo de ver series con escribir asi que por eso he llegado. No se si les pasa pero me he visto muchos documentales últimamente que me han gustado mucho como 'Nada es privado' que es de una temática similar a 'El dilema de las redes sociales', también he visto 'El caso Watts' que es un policial real como 'El caso del pequeño Gabriel' y alguna que otra serie policial sobretodo es mi temática favorita. Por cierto si les gustan los podcast les recomiendo el de Lydia Cacho "La nota roja" que esta tanto en spotify como en iTunes. Es super interesante todo lo que han investigado sobre los femicidios en Ciudad de Juárez.

Fuera de eso como mañana se estrena la serie nueva de Manolo Caro. Les recomiendo que si estan ansiosas y quieren leer algo bellísimo se pasen por el perfil de Lore (@LorelaiMd) que escribio por ahora un corto sobre Alguien tiene que morir que vale la pena leer. Asi como su historia de La Casa De Las Flores que esta terminada y es hermosa.

Bueno ahora si dejo de dar recomendaciones y escribir tanto para dejarles el capítulo. Gracias a todxs por leer, comentar y votar. Me da mucha ilusión y pone feliz leerlas realmente. Espero que estén bien o lo mejor que pueden con esta pandemia interminable.

Besos,

Vero.

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Estan dentro de la camioneta Ernesto conduce hacia el apartamento de José María ya que es lo mínimo que podían hacer por él luego de que se ha cruzado parte de la ciudad para ir a esa cena. La que para sorpresa de todos no ha salido tan mal y probablemente termine siendo el comienzo de muchas. Él ha decidido que así será, no piensa dejar que Paulina pase por esas situaciones que le disgustan tanto sola. Ella va en el asiento del acompañante pero no deja de conversar con el que se ha sentado detrás. Puede verla desde el espejo retrovisor del costado derecho como le sonríe y la brisa de otoño que entra por la ventana le desordena su pelo. Todo un sueño mexicano poder mirarla. Paulina pilla su mirada atenta por el reflejo para acomodar su pelo hacia atrás y morder apenas su labio inferior para quedarse en silencio unos minutos. Ha detectado una canción en la radio que le gusta por lo que se apresura a subir el volumen. Es una canción latina que no reconozco suena como un buen rock noventero. Frunce el ceño para prestar atención a la letra que es cantada por una mujer con un rango vocal extraño. No suena como otras que ha oído. Solo sabe que al parecer a su novia le encanta por que no deja de cantar cada una de sus palabras. Hacia muy poco tiempo que habia descubierto esa canción, una tarde que trabajaba en la floreria y le gusto de inmediato por ser sumamente pegadiza. Por eso no puede dejar de cantarla en cuanto la oye. Apoya su brazo derecho sobre la puerta para seguir el ritmo con sus dedos y seguir cada palabra al pie de la letra que desde que la oyó le parece que la representa tanto. Se ha enterado que la cantante es Colombiana, se llama Shakira y tiene una voz muy particular además de su actitud rebelde típica de la edad.

- José María la ve por el reflejo del espejo retrovisor como en susurros canta la letra perdida en su mente- Este amor no me permite estar en pie. Por que ya hasta me ha quebrado los talones. Aunque me levante volveré a caer. Si te acercas nada es útil. Para esta inútil - dice para alzar sus cejas al ver que la esta viendo- Bruta, ciega, sordomuda. Torpe, traste y testaruda -continúa cantando para sonreír y negar en un movimiento mínimo con su cabeza - Es todo lo que he sido por ti me he convertido. En una cosa que no hace. Otra cosa mas que amarte -el se señala a si mismo viendo que ríe para seguir la canción- Pienso en ti día y noche -.

El alza sus cejas para tomar nota en su memoria de este momento que pareciera sumamente intimo por mas que su suegro estuviera allí con ellos. Es como si realmente la hubiera cantado para que el supiera simplemente que así se siente desde que lo ha conocido. Le respondería que le sucede lo mismo pero seria de demente contestar algo que nadie le ha preguntado. Cuando se detienen en su apartamento el se despide de Ernesto para salir del coche. Estan a unos cinco pasos de la puerta de su edificio asi que el se queda parado en la vereda expectante para ver que si lo acompañara o no. La ve que conversa con su padre para bajar luego sonriendo. Entrelazan sus manos para llegar al hall del edificio.

Tú NombreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora