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El nivel de fuerza con el que las feromonas de Jimin se disparaban cada vez subía en intensidad. Era una aglomeración de fragancias dulzonas y cítricas, advirtiéndole que se apoderarían de su consciencia y lo convertirían en su muñeca, libre para manejar. Jungkook sería suyo si solo se lo pidiera, en su celaje de hormonas y deseos instintivos. Jimin estaba entrando en celo, y al estar tan cerca de él solo podía tener en mente lo mucho que deseaba unirse a su ser, conocer cada recóndito lugar de su piel y embriagarse de su esencia potenciada.

Cada vez que Jimin soltaba un gemido por las nuevas sensaciones en su vientre, Jungkook sentía que cavaría su propia tumba en ese mismo lugar. Su consciencia residiría allí, presa y sin salida, mientras su alfa tomaba el completo control en búsqueda de las necesidades que necesitaban ser complacidas.

Era increíble la forma en que la naturaleza actuaba, pidiéndole a gritos socavar en el cuerpo de su acompañante y designarlo como 'mío, absolutamente mío'.

Bastó con acariciar una de las piernas de Jimin para apreciar que su cuerpo respondía a su tacto, casi hablando para pedirle otro minimo roce. Aunque él quería mucho más, no faltaban palabras para darlo a entender. Los labios del omega se entre abrieron, en una clara mezcla de querer decir algo y suspirar al mismo tiempo.

Su celo había empezado. Estaba en sus pupilas dilatadas, en la humedad de sus labios y la que podía visualizarse desde la tela de su pantalón. Estaba en el calor que su cuerpo desprendía, y en el olor que invadía toda la habitación. Era olor a omega en celo, el aroma cítrico tornándose tan intenso que era casi imposible discernir la naturaleza de este. Sabía que era olor a fresas y flores de cerezo solo porque conocía su aroma desde hacía tiempo ya.

—¿Quieres... —tuvo que carraspear, ya que su voz había salido más ronca de lo normal—... Quieres que...?

—Besame —las manos calientes del rubio escalaron por su pecho hasta sus mejillas, tomándolas y jalándolo para besar sus labios. Si Jimin no era desinhibido antes, ahora lo era definitivamente. La forma en que impulsó su lengua hasta hallarse en el interior de su boca fue invasiva y excitante de igual manera.

Jungkook descendió sus manos hasta agarrar su cintura con fuerza, fastidiado por la gran cantidad de tela que cubría su cuerpo. Quería sentir cada porción de su piel, que la calidez de esta invadiera sus frías manos y sacar en el camino toda una infinidad de sonidos por parte de Jimin.

Éste se cernió en su cabellera para jalarla, poniendo el cuello del alfa a su disposición. Jungkook no podía quejarse. La sensación de ligero dolor era más que plácida junto a la forma en que la lengua ajena recorría la piel de su cuello. Los labios de Jimin eran gruesos, carnosos y calientes; todo en él emanaba calor. Le sumaba al placentero acto, porque no había nada mejor que sentir sus labios trazando besos en su piel.

Jimin mordisqueó el costado de su cuello, donde su arteria latía al son de su acelerado corazón. El celo agudizaba sus sentidos, volviéndolo un astuto individuo que en menos de un minuto ya había desprendido a Jungkook de su saco y camisa. El alfa estaba orgulloso de su trabajado físico, pero la mirada tan atenta de su omega fue capaz de llevar los colores a su cara.

Observó a Jimin morderse el labio, sus pupilas tan oscuras delineando su presencia. Estaba a la merced de un omega en celo, y la sensación era tan emocionante que una sonrisa escaló por su boca. —Dime qué quieres.

El rostro ajeno era tan expresivo. Podía ver el deseo corromper sus facciones inocentes, creando a un ser apetecible y encantador. Todo en él debía ser suyo, y todo lo suyo sería de él al mismo tiempo. Jungkook le pertenecería, y Jimin le perteneceria a él. Era un hecho que brindaba aún más calor en su ya erecta entrepierna. —Quiero muchas cosas —Jimin arrastraba las palabras, su lengua enredándose ligeramente. Podía darse cuenta de que hablar le resultaba complicado, y eso le encantaba. Cuando tuviese sus manos sobre él lo convertiría en un desastre de incoherencias—. Quiero tu nudo, alfa, quiero tu marca, y te quiero a ti.

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⏰ Última actualización: Sep 25, 2020 ⏰

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HOUSE OF CARDS | kookmin.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora