especial 3

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N/A:Hola bbys, este capítulo especial va a ser diferente ya que va a ser narrado por Grace. Lo que hace a este capítulo especial-especial, es que es de HALLOWEEN, así que ¡feliz halloween a todos!💘

GRACE

Dos años antes...

—¡No, Molly, basta!—dije mientras lanzaba golpes para todas partes.

Ya hasta sentía que tenía pintura en el ojo.

Le había pedido ser Caperucita roja no una drag queen. —Que conste que no tengo nada en contra de ellas —.

—Quédate quieta, Grace—dijo pero yo seguí lanzando golpes—¡compórtate como alguien de 15 años, por favor!—me dio un golpe en la cabeza.

—Chicas ¿ya están listas?—preguntó Val entrando a la habitación.

Molly y yo la miramos sorprendidas, a penas tenía un ojo listo. June entró detrás de Val.

—¡Apúrense! Mientras más tarde salgamos, menos dulces va a haber.—Aconsejó June.

—June tiene razón. Molly, déjame hacer mi propio maquillaje—pedí de una vez.

Quería dulces, uno puede decir que quince años es muy grande para salir a hacer aquello, pero vamos ¡es muy divertido!.

******

Luego de cerrar la puerta de mi casa, iniciamos nuestra travesía para buscar dulces.

Pero no todo es perfecto.

—Vaya, pero si es mi pequeña vecina—escuché decir a una voz irritante.

No ahora, por favor, no.

Hola—dije cortante y sin voltearme

Mis amigas ya estaban acostumbradas a estas peleas cada vez que iban a mi casa, así que ya sabían que lo mejor era ignorar a Lucas.

—Que lindo disfraz de...¿Qué se supone que eres?—volvió a hablar.

Cada ves que escuchaba la voz de este quinceañero siempre me sacaba de mis casillas.

Me volteé enojada y lo miré hecha una furia.

—Soy Caperucita roja ¿y tú? ¿Qué se supone que eres?—le pregunté con lo mismo.

Mis puños estaban apretados y mi ojos entrecerrados tratando de lanzarle rayos láser.

—¡Wow! tranquila, chica—dijo levantando las manos en son de paz—Controlen a su amiga, chicas—esta vez se dirigió a mis amigas, ninguna de ellas le respondió—Respondiendo a tu pregunta, yo no me disfrazo, ya soy muy grande para salir a buscar dulces. Al contrario de ti.

Esto ya fue mucho.
¡¿Quién se cree?!

Resoplé muy enojada y me volteé de nuevo dándole la espalda a mi odioso vecino, pero aún así seguía sintiendo su sonrisa de suficiencia.

******

Ya llevábamos cerca de una hora caminando por las calles pidiendo dulces.

—Yo digo que debo tener 250, lo siento, chicas, pero mi disfraz es mejor—dijo Molly sonriendo.

—No vale, tu trajiste tu disfraz de Francia—reclamó June.

—Hablando de Francia ¿Cómo está Oliver?—preguntó Val.

Val siempre muestra mucho interés por Oliver. La verdad no sé por qué, supongo que algún día me enteraré.

—¿Por qué tanto interés por mi hermanito?—preguntó Molly, Val solo alzó los hombros simulando no saber—Está bien, creo, o sea eso es lo que nos dice cuando hablamos por videollamada.

—¿Cuándo vuelve?—Pregunté.

—Considerando que se fue hace un mes... Vuelve en un año y diez meses—Contó Molly con los dedos.

Luego de algunos minutos más, recibí una llamada de mi mamá que decía que volviéramos a casa y así hicimos.

Ya en mi casa, nos dedicamos a ver películas de terror y a estar en mi patio junto a la fogata comiendo marshmallows quemados.

—Luego de esa noche, nunca más volvieron a ver a la rubia...—Concluí mi historia de terror.

—Ya no voy a poder dormir. Gracias, Grace—dijo Val tiritando entre su manta.

—Me encantó—sonrió Molly comiéndose otro marshmallow.

Ahora me toca—June se acomodó y se preparó para hablar pero fue interrumpida por un extraño sonido.

Las cuatro giramos hacia la puerta a mi cocina.

—¿Qué fue eso?
—Anda a revistar, te toca, Grace
—Yo no voy— dijeron mis amigas al unísono.

—¿Por qué tengo que ir yo?—pregunté con la voz temblando.

—Es tu casa. Pueden ser tus padres— argumentó Molly.

Después de algunos minutos discutiendo, decidí ir.

Caminé cuidadosamente hacia mi casa y entré a la cocina.

Toda mi cocina estaba a oscuras y solo se veía la luz de la calle.

—Grace...—susurró una voz a mis espaldas.

—No me...—susurré dándome la vuelta—Ay, por favor, universo, quiero tener un futuro, no permitas que muera ahora—supliqué.

—Grace...—susurraron de nuevo.

No, no, no, esto ya no es bueno, no es bueno.

Me volví a dar la vuelta y me acerqué al interruptor para encender la luz, pero un sonido fuerte me interrumpió.

Aquel sonido eran mi cereales que se habían caído.

—No, mi cereales—susurré lamentando.

Volví a voltearme para seguir con mi misión...

—¡¡Buuuu!!—Gritaron en mi cara.

—¡¡Ahhhh!!—Grité de vuelta y salté tanto que me caí—No me asesines—supliqué mientras toda mi vida paraba por mis ojos.

Cerré mis párpados esperando mi final pero nunca llegó, al contrario, escuché una risa desagradable.

—Deberías... haber visto... tu cara—pudo modular Lucas mientras se reía.

—No... puedo creerlo—dije aún con el corazón en la boca—¿Quién te crees?—le dije y le di un golpe en la cabeza.

—Me creo tu vecino—respondió muy estúpidamente.

—¿cómo entraste?—Le pregunté rechazando la mano que me estaba tendiendo para levantarme.

—Tus papás me dejaron entrar—siguió con su sonrisa de siempre y se encogió de hombros.



N/A: se que publiqué este capítulo un día después de halloween pero más vale tarde que nunca.

gracias por leer bbys💕💕

Cleaved originalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora