Capítulo 27

72 8 4
                                    

" LA VENTANA Y EL CUCHILLO "

Isabella:


Mí despertar como siempre no fue de los mejores, no claro que no.

Tenía la pierna de Sol sobre mí pecho y no me podía levantar porque mis piernas servían de almohada para Courtney quien dormía profundamente al igual que el resto.

En resumen todas estaban sobre mí.

Incluyamos a Megan que cayó su cabeza contra el colchón cuando me levanté, pero ella ni siquiera se inmutó, en cambio se dió la vuelta y siguió durmiendo. Despacio procure salir del colchón sin despertarlas a todas.

Cuando llegamos a casa eran casi las 5 am y así sin más fuimos directas en silencio a dormir, ninguna dijo nada y eso me resultaba bastante extraño ya que pensé que no iban a parar de preguntar al ver qué cuando llegue no estaba sola, cuando nos encontramos con ellas vi la sorpresa en sus ojos, vi como lo veían, incluso Courtney lo miraba aún sin creer que él estaba allí y para mí, bueno yo tampoco lo creía pero el rubio ahí sentado junto a mí sonriéndome lo confirmaba, pero aún así no quitaba la sorpresa y bueno, tampoco quitaba el miedo ya que ellos rompieron el trato y tengo la horrible sensación de que Quinn lo sepa, tengo miedo de que los hechos vuelvan a repetirse.

Después de ir al baño, salí en silencio del cuarto y bajé las escaleras para ir directamente a preparar algo para comer ya que, según el reloj está por pasar el mediodía.

Vierto un último paquete en la olla antes de irme y dejar que todo se cocine.
Reviso mí celular y me pierdo un rato en él y unos gritos junto a risas me indican que las chicas allá arriba despertaron y luego unos pasos anuncian que alguien baja y ese alguien cae sentado junto a mí antes de que pueda correrme.

— Buenos días —saluda Soralla.

— Buenos días —contesto.

—¿Pudiste dormir algo? —inquiere luego de escanear mí cara.

Llevo unas ojeras horribles, el pelo totalmente revuelto y la palidez de mi rostro no ayuda.

— Mentiría si dijera que si.

— Supongo que no quieres hablar sobre lo de anoche ¿Verdad? —pregunta tanteando el terreno.

— No —contesto—. Pero buen intento.

— Como quieras —dice alzando las manos—. Te dejaré en paz, pero dudo que las salvajes de allá arriba lo hagan —advierte señalando las escaleras—. Así que respira y junta paciencia porque conociéndote, la necesitarás.

Con eso dicho se levanta yendo a la cocina y como si todo hubiera estado planeado Sol y Megan bajan corriendo las escaleras y está última empuja a Sol quien casi pierde el equilibrio más logra no caer pero pierde tiempo en que Megan llega tirándose sobre mí.

—¡Quítate Roxie! —vocifero enojada tratando de que me deje.

Ella trata de hacerme cosquillas y yo me remuevo para que pare y en un arranque le pegó una patada que la aparta de mí.

— Ya fiera, tranquila —ella me devolvió la patada y así empezamos hasta que la tire del sofá—¡Oye que eso duele! —se quejó, levantándose—¡Le diré a mis hermanos y ya verás que Rayo...

— Cierra la boca Roxie —le callo antes de que se le ocurra decir uno de sus atrevidos comentarios.

—¿Qué? Solo estaba por decirte que iré a visitar a mis hermanos en cuanto pueda —anuncia con una sonrisa de falsa inocencia—. O en cuanto Ryder se comunique conmigo.

Perfecto Desastre Donde viven las historias. Descúbrelo ahora