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Era noche de luna llena, las estrellas brillaban iluminando el hermoso cielo nocturno, todo parecía estar tranquilo, pero esa paz era interrumpida por un gritó lleno de dolor, las aves nocturnas volaban asustadas tratando de alejarse de aquel sonido, que cada cierto tiempo se repetía y no paró hasta que de pronto un llanto ocupó el lugar, era un llanto que llenaba de alegría el corazón de una persona, mientras quienes la rodeaban la miraban con una mezcla de tristeza y alegría

??: Aquí tiene Hinowa-sama, es un … niño sano -le entregó un bulto envuelto en cobijas mientras lo miraba con tristeza-

Hinowa: es precioso, mi bebé -al sostenerlo sintió que todo el dolor y rechazo de su familia había valido la pena y unas lágrimas de felicidad lo probaban-

??: Señora, es un monstruo, qué haremos? -

Hinowa: no importa - sabía que no le decía monstruo como insulto- si mi padre lo acepta o no, es mi hijo y si tengo que irme de aquí, me iré

??: Cómo usted diga Hinowa-sama, si gusta podemos ocultar el nacimiento del pequeño mientras usted se recupera del parto - tomó una mano de la mujer con ambas suyas mientras trataba de evitar llorar-

Hinowa: te agradezco, espero estar en forma pronto, se que mi pequeño Inuyasha y yo pronto tendremos que irnos -apretó la mano de la partera en señal de agradecimiento-

Una vez dicho ésto, otra mujer llegó con comida para la mujer que ahora era madre, una vez terminó volvió a tomar al pequeño y lo acostó a su lado para dormir y descabsar, así sin darse cuenta, había pasado una semana, cada día recuperaba más fuerzas, tal vez en una semana más podría huir con su pequeño, pero antes de eso, recibió una visita que no esperaba

??: Por favor Hosen-sama, la princesa está enferma y necesita dormir -se escuchaba la voz de la partera afuera de la habitación-

Hosen: tonterías, quiero ver a mi hija y a mi nieto -se oía molesto-

??: Señor, su nieto … -no acabo de hablar cuando se escuchó como la mujer cayó al piso, señal de que la habían empujado-

Hosen: Okita, Mitsuba, continuemos!!!  -la voz sonaba neutral pero firme-

Okita: sí padre -dicho esto la puerta se abrió, dejando ver a un hombre cano de pelo largo, seguido de un hombre y una mujer de cabello castaño claro-

El hombre se acercó a la mujer en cama, ella se abrazó al pequeño, pero el hombre sin problema le arrebata al bebé que comienza a llorar, dejando ver un pequeño cabello plateado y unas orejas de perro, al verlo el recién nacido comenzó a llorar, e...

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El hombre se acercó a la mujer en cama, ella se abrazó al pequeño, pero el hombre sin problema le arrebata al bebé que comienza a llorar, dejando ver un pequeño cabello plateado y unas orejas de perro, al verlo el recién nacido comenzó a llorar, el hombre mostró notable enojo en su mirada, estuvo por aventar al pequeño, pero una voz lo detuvo

Okita: no lo haga padre!! -se estiró para detenerlo, pero se detuvo antes de tocar el hombro de su progenitor-

Hosen: por qué no?  - lo miro de reojo con molestia, provocando que su hijo pusiera su rodilla derecha y ambos puños en el suelo, con la cabeza baja, al igual que su hermana-

Sango X Inuyasha, Mis verdaderos sentimientos Donde viven las historias. Descúbrelo ahora