•Wade × Peter

【8】

[♡]: Un regalito.

El pequeño castaño de ocho años, estaba sentando en una de las bancas que se encontraban en una pequeña plaza. Entrelazaba sus dedos nervioso, movía la cabeza y a veces tarareaba una que otra canción. Su tía estaba sentada al lado del pequeño, mirando para todos lados a ver si llegaba el pequeño Wilson.

Los pequeños enamorados eran algo así como una pareja. Novios. Se aman mucho, se daban abrazos, besos en el cachete y nunca se separaban. Eran tan felices juntos que no se querían separar ni un momento.

Con el tema de que eran dos niños, uno de 8 y 9 años, como quien dice: "son dos nenes y apenas son chiquitos. No tienen ni idea de lo que están haciendo", con ellos era algo distinto. Ellos nunca tuvieron esa clase de confucion por ser dos nenes que se amaban tanto. Es más, no le dieron importancia. May lo entendió y hablo con los dos enamorados; dejando que se amen y sean una pareja feliz. En su escuela lo mantenían en secreto; pero nadie sospechaba. Parecían más mejores amigos que otra cosa.

Entonces eran felices sin importarles que.

Un día viernes, fuera de la escuela, Wade prometió que le daría algo especial al pequeño castaño. Pero que ese algo especial -Que, obviamente, Peter sabía-, se lo iba a dar el sabado en la plaza de siempre. Por eso ese mismo día, Peter estaba tan nervioso.

-Mira, Peter, ahí viene Wade.

El castaño salió de sus pensamientos alzando la vista, viendo al pequeño Wade acompañado por una mujer de alta edad; Al.

El rubio al ver a su castaño preferido sentado en una banca no tan lejos, fue corriendo hacia el. Al río un poco y trató de seguirle el paso.

-¡Peter! ¡Peter!- El nombrado se levantó de un salto y abrazo a su "perejita", acompañado con un beso en el cachete ajeno que ruboriso un poco al rubio.

-Hola, Wade.- Sonríe y corta el abrazo.

-Wade, pequeño mocoso, casi me pierdo por tu culpa.- Habla Al riendo un poco acercandoce al pequeño grupo de personas.

-Buenas, Al.- Saludo May- ¿Cómo anda?

-Hola querida- Sonríe- Nesecito hablar contigo, a solas.

May hace una mueca de confusión y asiente. Guía a la mujer de alta edad a un lugar algo lejos de los pequeños.

-¿Y? ¿Cómo estas?- Pregunta el rubio sentándose. Peter copia el acto.

-Algo nervioso... Pero bien- Sonríe- ¿Y tu?

-Bien....- Una sonrisa forzada se posó en sus labios. Sentía como su corazón de a poco se iba rompiendo.

-¿Pasa algo?- Pregunta al notar al rubio algo triste.

-No, nada. Ven- Levanta la vista con una sonrisa y guía al castaño a un ligar algo "oculto".

-¿A donde vamos?

El rubio no contestó y se dignó a sonreír.

Guió al pequeño castaño a un lugar algo bonito. Se centraron en un lugar algo parecido como un mini-bosque. Había mucha sombra, y algunas que otras partes luminadas por el sol.

-¿Porque nunca supe de este lugar?- Pregunta Parker mirando ese chiquito, pero bonito lugar.

-Lo encontré primero. Nunca quise decírtelo- El rubio aún sostenía la pequeña y suave mano del castaño-, es perfecto para darte la sorpresa que tanto esperabas.- Una tierna sonrisa apareció en sus labios. Linda sonrisa que Peter podrá ver por última vez.

-¿A-ahora?

-Si, quiero darte esa sorpresa ahora.

-Esta b-bien...