Parte 2
Despertaste, solo en ropa interior, te dolía la cabeza y todo estaba bien hasta que unos recuerdos borrosos atacaron tu memoria, sus labios sobre los tuyos, tus manos en su pecho, el besando tu cuello, una de sus manos en tus pechos, sus manos apretando tus muslos, tu gimiendo su nombre, ojala todo hubiera quedado ahí, pero cuando bajaron a desayunar, él se encontraba ya sentando a medio desayuno, las miro y lo único que sentirse fueron nervios mezclados con deseo, pues deseabas hablar de eso, pero no cuando su hija que era tu mejor amiga estaba muriendo de miedo por lo que él les diría.
Se sentaron y pidieron de desayunar y ahí fue cuando empezó a soltar un enorme discurso, pero si eras honesta contigo misma, no estabas prestando atención, veías cada parte de le, fijándote fijamente, más recuerdos golpeaban tu mente, te estremeciste al recordar su erección y como se deshizo de aquel vestido rojo, el cómo tus piernas temblaban por tener más de él, el ver sus ojos negros viéndote solo a ti, te golpeo la realidad, cuando el mesero, tiro un poco de jugo en ti, ahora Sasuke era el que me miraba a ti, bueno, miraba tus pechos, pero se levantó de golpe, diciendo que el día de hoy no estaría, pero que confiaba en ustedes, ese día fue una tortura para ti, pues en tu mente solo vagaba una pregunta, porque no había llegado a más?, seguas in recordar sus palabras, pero con el resto de le día, intenta dejarlo pasar.
Al día siguiente, tampoco habías visto a Sasuke, te ponías labial y te volvías a ver en el espejo
- Te ves increíble, Alex morirá al verte, es guapo, digo su mejor amigo igual lo es, tuvimos suerte con ese par d bombones. - Sara de jalaba fuera de su habitación, pues irían juntos a nadar con los chicos que habían conocido el día de ayer mientras recorrían otra playa cercana.
Nadaron un buen rato, pero regresaron temprano, pues irán a festejar el cumpleaños de uno de ellos, lo cual era una gran coincidencia pues al día siguiente era el cumpleaños de Sarada, así que aceptaron la invitación, las horas arreglándose pasaron rápido entre platicas y risas, pero algo paso, mientras platicabas con tu mejor amiga, ojala pudieras decirle que el hombre más atractivo que has encontrado te había besado, pero no sabias por qué no habían continuado, pero sabia que no podías, que te llevarías ese secreto a la tumba.
Luego de un rato, tocaron la puerta, era Alex y su mejor amigo, Sarada salió corriendo a saludar, se fueron caminando, mientras el solo se quedó ahí, admirándote, te tomo de la mano y con nervios te beso, accediste, pero no podías evitar de pensar en Sasuke, en lo bien que te besaba, en lo bien que sabia donde tocar, su voz ronca y sus manos sobre tu cuerpo, poco a poco el tono empezó a subir entre Alex y tú y antes de cerrar la puerta, lo viste, Sasuke te veía fríamente, podías notar los celos en su mirada, pero eso solo te gustaba más, retrocediste y guiñaste un ojo antes de cerrar la puerta y desaparecer de su vista.
Sasuke no iba a negar que estaba molesto, pero no diría nada, no era quien, pues no estaba correcto, aun así lo más bajo de él no podía negar lo mucho que extrañaba los labios de aquella chica, lo mal que lo ponía recordar sus labios, sus pechos y aquel culo que l ponía al limita, sin darse cuanta una gran erección asomaba en él, cerró la puerta de su habitación y tomo asiento en aquel sofá, mirando a la ventana que daba una gran vista al mar, intento sacar cada imagen de su mente, pero no podía, así que saco su miembro de sus pantalones e imagino todo lo que hubiera pasado si hubiera seguido, no pudo evitar gemir al recordar en como quito aquel vestido rojo, al recordar la lencería negra, el cómo estrujo los perfectos pechos, las ganas que tenia de tenerlos en la boca, la tentación de recargarla sobre el lavadero y colocarse entre sus piernas, el escucharla pedir más y hacer llegar a un maldito orgasmo y justo cuando pensó en eso, se tensó y tiro el liquido caliente sobre su abdomen y mano, así que decidió tomarse una ducha, mientras analizaba cada una de sus acciones y lo mal que estaba, pero cuando se trataba de ti es como si no importara la sensatez y lo racional.
Mientras en otra parte del hotel Alex y tu bajaban y Sarada de dedicaba una mirada traviesa.
- Tardaron años, vámonos, se nos hará tarde. - Dijo mientras te tomaba del brazo y susurraba que quería detalles.
Ya lejos de los chicos empezaste a hablar. -Si te soy honesta no fue la gran cosa, no hubo nada interesante. - Fue lo único que estabas dispuesta a decir.
-Bueno, bueno, espero que llegue aquel chico que sepa cómo tratarte. - Dijo Sara derrotada, pues sabía que no te sacaría más información, pero sabía que aquel chico, ya lo conocías, aquel hombre que sabias que te llenaría, que cumpliría tus expectativas si existía y solo lo sabias porque sin haber llegado a algo más era suficiente, te había dado más placer que cualquier otro y entre la comida y la plática, recordaste las palabras de Sasuke, como una revelación, llegaron a tu mente, por qué no continuaron, pero no podías dejar la cena, en unos minutos seria el cumpleaños de Sarada y sin importar lo sexy que podría ser su padre, ella estaba primero así que te reservaste todo eso, has ya para después, en este momento era hora de celebrar y por fin podrías darle su regalo que guardabas por días, pues sabía que lo amaría.
Esta es la parte uno, después de un gran bloqueo, lo merecen, no se olviden de votar y seguirme, me apoyan mucho, sin olvidar sus comentarios los me motivan mucho.
Les amo.
