Ojos sin alma

Esto es guerra

Narra Zack:

Maldito mocoso, justo cuando había decidido tragarme mi orgullo y finalmente hacer un movimiento, por supuesto algo tenía que interponerse ¿Quien diablos se cree ese idiota?

Caminamos no sé cuantas horas excactamente hasta que casi había salido el sol, Eddie insistía constantemente en tomar un descanso, pero Gray no nos dejaba parar un solo segundo, ahora que caminábamos con el zopenco AMIGO de Ray, Gray sabía que si él podía seguir el "rastro" los policías también podrían, además de que nos iban a estar buscando con más intensidad por "secuestrar" a dos personas.

Yo caminaba al lado de Ray, necesitaba cuidarla de el estúpido que intentaba arrebatármela, yo era su Dios y esa es una relación mucho más importante que cualquier otra que ella pudiera tener con este simple humano, Ray permanecía con sus ojos azules viendo siempre al frente, eso me reconfortaba, pues, por el contrario, ese chico extraño la miraba constantemente, y, aunque mi Ray no le devolvía las miradas, ese chico me ponía furioso con solo existir; cada vez que me daba cuenta de que la estaba mirando, me acercaba un poco más a ella, él bajaba la mirada y yo intentaba disimular mi sonrisa.

Narra Rachel*

Alex me estuvo mirando durante lo que restó de camino hacia la "nueva vida" como la llamaba el que parecía ser el lider de Zack, Eddie, la rubia de grandes atributos y el que parecía doctor, yo ignoraba las miradas, ya nada era como antes, sus ojos ya no me provocaban nada, ni mariposas en el estómago, ni sonrojo, ni... felicidad; por lo que permanecía caminando casi estática.

Cada vez que Zack se daba cuenta que Alex me estaba mirando , se acercaba a mi... pude llegar a sentir el calor de su piel a través de las vendas, y era, en cierta forma, reconfortante, con Zack me siento como en mi hogar, me siento protegida, me siento bien, ¿esto es felicidad?

Narra Alex*

Como a las 2 y media de la madrugada llegamos a un pueblo que parecía desierto, el hombre con pinta de sacerdote nos dijo que si había gente que lo habitaba, solo que todos dormían esa hora, nos dijo que, de hecho, les tenía nuevas identidades, vidas, e incluso apartamentos en un edificio cuyo dueño era amigo del sacerdote, les tenía la vida hecha a todos menos a mi, porque llegué de imprevisto, así que tendría que quedarme con alguien en su apartamento hasta que solucionara todo. Rezaba a Dios por que no me tocara con el asesino de las vendas, Isaac, por desgracia, creo Dios estaba ocupado, porque me tocó con Isaac

Narra Zack*

Gray nos puso en un edificio, no era igual al que solía ser nuestro hogar, pero serviría, y como no tenía nada previsto para "Alejandro" (creo que ese era su nombre. No sé, no me importa) así que lo puso a compartir apartamento conmigo Y ESTOY SEGURO DE QUE LO HIZO A PROPÓSITO, conociéndolo, seguro quería que "arregláramos nuestros conflictos" o alguna mierda por el estilo. Apenas llegamos al edificio, cada uno se fue a su respectivo piso a dormir, pues el camino había sido largo y aburrido, por lo que todos teníamos mucho sueño.

Yo, sin embargo, no pude dormir en lo absoluto, dí vueltas y vueltas en la cama, pensando en Ray, hasta que no me pude resistir, salí del apartamento de manera silenciosa, cuidándome de no despertar a Alejandro, subí en el ascensor y apreté el botón con el número del piso de Ray. Estaba en frente de la puerta de su habitación, dudando si tocar o si no, cuando Rachel abrió, al parecer ella tampoco había podido dormir esa noche, se veía tan hermosa, Alejandro no estaba para molestarnos y con todos dormidos, era una oportunidad única que sería estúpido (incluso para mí) desperdiciar. Entramos a su habitación

Narra Rachel*

Me desperté en medio de la noche, Zack no salía de mis pensamientos y era casi una necesidad vital para mí el verle de nuevo, abrí la puerta con disposición de bajar a su piso y me lo encontré. Él lo deseaba, yo lo deseaba, nos sentamos en mi cama y cómo lo veía tan indeciso, tomé su mano para guiarle.

Escuchamos golpes en la puerta y nos pusimos de pie inmediatamente.

Zack se escondió (tal vez entró en pánico) mientras que yo abría la puerta, era mi novio, Alex, "Hola Rachel-boo" me dijo, yo solo podía pensar en lo mal que estaba lo que pretendía hacer "tengo novio" me repetía a mi misma.

Narra Zack*

Tocaron la puerta y me escondí, algo en mí sabía que era el idiota de Alejandro, oí decir "Hola hermosa", mis suposiciones eran ciertas, esa chillona voz solo podía pertenecer a una persona, que idiota, solo porque Rachel lo había defendido no le daba el derecho de llamarla así, pensé... Luego me dí cuenta: Alejandro era el novio de Ray.

No, no, no, no, no, no, no, no, no.

¿Ella? ¿Con un tipo como él? Eso no podía ser, yo no podía permitirlo

ESTO ES GUERRA.