Die rooi voog

Capítulo nueve

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Le dedico este capítulo a EsterBrea quien es una nueva seguidora ¡gracias! 

—Oh si, separar a dos almas que están destinadas a estar juntas no es algo sencillo, e más...si no tomas a tiempo tan solo una poción, todo volverá a como era antes, y el daño que le causaste al vinculo los golpeará a ambos fuertemente, esto puede generar consecuencias como la caída en coma de una de las dos partes o dolores en el cuerpo como algo mínimo, nada letal, pero si perjudicial en esos momentos. Nadie quiere quedar en coma en un tiempo indefinido. Es por eso que aconseje que hables de esto con tu compañero, las consecuencias son para ambos en todo caso que dejes de tomar la poción. —La cara de Stiles era neutral, pero por dentro trataba de acomodar todas sus ideas, el miedo se estaba haciendo presente en su mente. Si bien el estaba enfadado con Derek, con justa razón, no quería que sus acciones le hicieran daño, no podía imaginar que el hombre lobo callera en coma o lastimado por sus acciones. Hace unos segundos estaba seguro de todo, ahora no sabía si iba a tomar la decisión correcta si llegaba a tomar lo que Emilia le daría.

—No sabía que iba a ser así...ni en las consecuencias de no cumplir con el horario para beberlas. —aclaró.

—Cada vez que tomes del frasco, la consecuencia se incrementa más y más, hasta el último, y son diez frascos que deberás tomar cada semana para que sea efectivo, en la hora y el minuto en que tomaste el anterior, así es como funciona esto...nada es fácil en esta vida, lamentablemente cada acción tiene su consecuencia. Incluso cuando es para aliviar tu sufrimiento. —Lucas seguía callado, no quería interrumpir la explicación de la mujer, pero todo eso le parecía una locura, cuando era pequeño había escuchado de su madre esos cuentos o más bien leyendas sobre la unión que generaba la diosa luna cada cierto tiempo y a ciertas personas, que era un regalo divino y que nunca había fallado en cuestión a la compatibilidad y la química que podrían tener estos dos individuos suertudos. Toda su vida había escuchado de eso, e incluso añorado ser uno de los elegidos, por lo que no podía pensar o escuchar que alguien necio estaba negando algo tan valioso como ello. Era una locura, incluso pensarlo le hacía hervir la sangre, y eso que su naturaleza era ser muy pacifico, pero en esos momentos sentía muchas ganas de patearle el trasero a alguien.

—Bien, no hay tiempo de dudar...prepárame esas pociones.

Dos días habían pasado desde que Stiles desapareció sin dejar rastro, sin embargo, el pueblo no se daba cuenta y el sheriff no había dado señales de preocupación, por lo que se esperaba que este supiera el paradero de su hijo y el por qué tenía tanta ausencia en las clases. Los directivos preocupados llamaron un par de veces a la residencia Stilinski para poder notificarle a Noah la falta de asistencia de su hijo...pero nadie atendía. Se sabía bien que el sheriff era una persona ocupada, sin embargo, no dejaría que su hijo anduviera en los malos caminos, por lo que la institución no tomo mucho más empeño que ese, y no volvieron a llamar, estaban seguros de que a más tardar el niño volvería a retomar sus clases, a nadie le pareció extraña la forma de educar que tenía el gran y querido aguacil de Beacon Hills. Pero todo era muy diferente a las afueras del centro del pueblo, dentro del bosque, muy cerca de la vieja y quemada mansión Hale, había una discusión muy acarolada y sentimientos de angustia se olían por todo el bosque. Derek Hale utilizaba su puño para golpear la cara de Scott, con fuerza y repetidamente, olvidándose de todo el autocontrol que había preservado y mantenido durante todos esos años, por tan solo unas palabras del otro Alpha de la manada. Una y otra vez, como una espada filosa empuñada por el mejor espadachín de la tierra, su puño cerrado iba y venia acompañado de su gemelo, se encontraba encima del latino, aprisionándolo contra el piso sin darle posibilidades de escapar, sus betas estaban esparcidos a sus alrededores, todos metidos en sus mundos, todos con opiniones muy distintas y contrariadas. Nadie parecía detenerlo, sabían que no podría, y confiaban que el mismo sabría detenerse antes de causar una muerte, además, la victima era un Alpha, seria capaz de soportar a otro.

"Sinceramente creo que es mejor así, que ya no este"

"a ver si así deja de arruinarnos la vida a todos nosotros"

"Lydia, tu seguro estas de acuerdo conmigo, tu mejor amiga esta muerta gracias a él"

"Seguro tomo la gran decisión de hacernos la vida más fácil y se fue"

"Vamos Derek, ni lo soportabas...lo que dije era verdad y sabes que tengo razón, estabas buscando una forma de deshacerte de él, te lo hice más fácil. Aún no puedo creer que estuve toda mi infancia conviviendo con un asesino."

Y vio rojo, rojo sangre...rojo carmín. Estaban insultando a su pareja delante de él, como si supiera que el no haría nada por defenderlo por que sus acciones pasadas demostraron que eso iba a hacer así. Y tuvo que escuchar la voz condescendiente de el moreno hablar mal de su alma gemela como si nada, su lobo enfureció...el enfureció, y terminó lanzándose a él como un león al asecho. Sabía que, si no fuera por Stiles, por lo que él pensaría si volviera y encontrara a su mejor amigo muerto por sus propias manos, no detendría ni mostraría un estibio de control y dejaría que su lobo herido le diera una lección a quien se atrevió a insultar a su soulmate, aquello era una verdadera lástima, por que Scott era un grano en el trasero, y tarde o temprano cometería otro error frente a Derek, solo hay que esperar a que este estuviera en sus cabales porque sería muy difícil tener que explicarle a Melissa que su hijo había tomado un viaje sin vuelta al infierno.