Amor En Señas. Duoligia Amores. Libro 1

Capítulo XIV

  - hablare con mi madre para que nos ayude, ella y las gemelas pueden guardar las cosas de Katherine, y tú y yo guardaremos las mías, ella sale del hospital el miércoles por la tarde - Thomas y Jordan estaban en la cafetería del hospital, planeando como arreglarían todo para que Katherine no volviera a poner un pie en esa casa - su padrastro y hermanastros no estarán en casa desde el martes, por lo que Jack me dijo se iran de viaje

  - eso nos dará mucha ventaja, tendremos todo el martes para guardar y mover todo a tu departamento - sus cafés fueron puestos en la mesa

  - exacto, ya hablé con Jack y Sara, por lo que me dijeron no habían renunciado para no abandonar a Katherine a su completa suerte, pero ahora que la sacaremos de ese lugar ellos renunciarán mañana, también se ofrecieron a ayudarnos a cargar todo y llevarlo al departamento - afuera estaba lloviendo, Katherine estaba un poco mejor, aún tenía ciertas cosas que le molestaban como la fiebre y el dolor de cabeza, pero estaba mejorando

  - conseguiré las cajas, mi madre y las niñas se ofrecieron a limpiar tu departamento, arreglarlo y tenerlo listo para cuando lleguen los dos - le dio una mirada pícara desde el borde de la taza, Thomas alzó las cejas al ver la mirada que le dirigió

  - ¿porqué me miras de esa manera? - aunque conocía a su amigo quería estar seguro de lo que pasaba por esa cabeza loca

  - ¿que te traes con ella Thomas? ¿Es solo trabajo, o es algo más? - se miraron a los ojos por un momento, Thomas pensó en ambas preguntas, aunque sentía aún ciertas dudas con las últimas semanas se había dado cuenta de algo, se había enamorado

  - solo... La quiero - decirlo en voz alta quitó un gran peso de él, pero aún tenía uno más, uno que no desaparecería hasta que no se lo dijera a Katherine y no sabía cuándo pasaría - ni siquiera se cuándo empezó esto, pero... La quiero y voy a ayudarla

La seguridad en la voz de Thomas lo sorprendió, aunque ya hubiera tenido novias, y se hubiera acostado con varias mujeres, nunca lo había escuchado tan decidido y seguro.

  - bueno... Si estás seguro de eso - se puso de pie y dejo dinero en la mesa - comencemos con esto, démosle algo mejor, a los dos

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  - jayden ya nos dio las llaves de tu departamento y voy para allá con las niñas, llevamos artículos de limpieza y tu hermano se quedó en casa con la niñera, así que no tienes que preocuparte de nada, y mañana por la mañana iremos y compraremos tú despensa

Thomas escuchaba atento a su madre atravesó del teléfono, le habían llamado hacia menos de dos horas y ella ya hiba en camino a limpiar su desastre, sabía que ella estaba emocionada por este cambio en su vida.

  - te lo agradezco mucho mamá - podía escuchar la música a través del teléfono, además de las voces de sus hermanas - es una gran ayuda

  - no agradezcas, ya me lo cobraré después - ambos rieron con suavidad ante la broma - ¿Necesitarás ayuda con otra cosa?

  - por ahora no, eso sería todo, gracias mamá

  - ¡¿CUANDO CONOCEREMOS A TU NOVIA?! - una sonrisa se deslizó por sus labios cuando reconoció el grito en conjunto de sus hermanas menores

  - ella no es mi novia - la sonrisa aún persistía en sus labios, al igual que el tono divertido en su voz

  - pero bien que te gustaría ¿Verdad? - su sonrisa se hizo aún más grande cuando pudo distinguir la voz de Thalía

  - te llamaré después mamá - escucho la despedida de su madre, y las protestas de su dos hermanas, y colgó un segundo después

Suspiro una vez más y pasó ambas manos por su cabello, estaban pasando demasiadas cosas en tan solo un par de días, guardo su celular en su bolsillo y camino de regreso hacia la habitación de Katherine, sabía que debía que explicarle que es lo que pasaría ahora, pero algo lo detenía.