Capítulo VIII

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Se despertó al sentir la vibración de su teléfono bajo su almohada, metio su mano debajo de esta y miró la hora, las siete de la mañana, apago la alarma al mismo tiempo que se sentaba en su cama, tallo sus ojos y se puso de pie, dirigiéndose al baño de forma perezosa, un bosteso salió de sus labios al tiempo que se miraba al espejo, se lavo el rostro y cepillo su cabello, lo sujeto en una coleta e hizo sus necesidades, salió directo a su ropero y escogía la ropa que se pondría ese día, un censillo pantalón de mesclilla y una camiseta algo suelta de manga larga, se colocó sus botines sin tacon y se puso de pie, se acerco a su mesa de noche y tomó sus audífonos, se los colocó, tomó su sudadera, su mochila y su celular, un segundo después salió de su habitación y camino en silencio hacia la cocina.

No pudo ocultar su sorpresa al ver a Thomas de pie delante de la estufa, lo vio por un segundo dándose cuenta de lo tranquilo que lucia, llevaba un traje parecido al del dia de ayer, solo que sin el saco, busco en la cocina y lo pudo ver sobre una de las sillas de la encimera.

  - buenos días - se sobresalto un poco al escucharlo y giro a mirarlo, estaba poniendo dos platos en la encimera, pudo ver también un vaso y una taza, el vaso con lo que parecía jugo, al líquido de la taza no lo lograba distinguir pero por el vapor que despedía creyó que era café.

"buenos días"

  - siéntate, he preparado el desayuno, nos iremos una vez que desayunemos - ella se acerco dudosa, dejó su mochila en el suelo y colocó su sudadera sobre esta y se sentó, el hizo lo mismo, frente a ella.

"¿donde están Sara y Jack?"

  - Sara afuera limpiando el jardín, y Jack fue a comprar algo que necesitaba para la comida, por eso yo hice tu desayuno

"gracias... Por todo"

Él sabía que esa frase significaba demasiado, llevaban un par de días juntos y el ya había echo demasiado por ella, Thomas asintió y se sentó frente a ella, ambos comenzaron a comer en silenció, Katherine se sorprendió al ver que a ella no le había servido café y eso la sorprendió, golpeó un poco su mano en la superficie del desayunador en un intento de llamar su atención, y cuando él la miró ella movió sus manos.

"¿Por que a mí no me serviste café?"

  - Jack me dijo que no te gusta el café

"¿Jack?"

  - le pregunté que era lo que comías normalmente y lo que no - se movía un poco nervioso al decirle esto,y es solo que ni siquiera él sabía porque quería que ella se sintiera amada - y el me dijo que no tomabas café, y que el jugo de naranja era lo... Usual 

Ella le agradeció y nadie hablo de nuevo, ambos terminaron sus desayunos y mientras ella cepillaba sus dientes Thomas recogió y limpio todo lo que habían ocupado, cuando ella volvió a bajar Thomas ya se estaba poniendo su saco, Katherine se acercó a donde había dejado su sudadera y su mochila, colgándose esta última al hombro y con su sudadera en su mano camino hacia la puerta con Thomas detrás de ella, ambos salieron de la casa al mismo tiempo que Jack llegaba con varias bolsas en sus manos.

Katherine se acercó a él y le dio un beso en su mejilla cuando él le sonrió y Thomas solo miró de lejos, sintiendo una presión en el pecho cuando miró ese simple gesto, pero al mismo tiempo lleno de cariño.

  - ¿Ya vas a la escuela? - Katherine asintió - bien, ten mucho cuidado y aprende mucho - cuando ella asintió y le sonrió, Jack levantó su mirada y vio en dirrección a Thomas su voz más seria que antes - y espero que tú la cuides muy bien a ella

  - eso haré, la cuidare de cualquier cosa, no debes preocuparte

Satisfecho con la respuesta se despidió de ambos y camino hacia la casa, Thomas abrió la camioneta y ayudó a Katherine a subir, cerró su puerta y camino hacia su lugar, encendió el motor y comenzó su camino.

Ninguno hablo camino a la escuela, Katherine iba repasando algunas notas de ciertas materias y Thomas estaba ocupado viendo el camino.

Cuando llegaron a la puerta del estacionamiento de la escuela, Thomas estacionó la camioneta en uno de los espacios libres y miró a Katherine por él espejo retrovisor

  - te estaré esperando cuando salgas, si tienes algún problema envíame un mensaje, ¿De acuerdo?

"De acuerdo, gracias por traerme"

  - ten un buen día kat
 
Ella lo miró por un segundo, el apodo no pasando desapercibido por ella, sintió la tibieza creciendo en su pecho, un segundo después bajo de la camióneta con su mochila al hombro, él la miró alejarse y solo se permitió poner en marcha la camióneta cuando la vio entrar a la institución.

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Thomas

No tenía en la menor idea de qué estaba haciendo cuándo apagó el motor y camino hacia la puerta de la casa de su madre, su plan principal era verla dentro de dos semanas, tal vez más, y aún así allí estaba, sacando las llaves que siempre llevaba en su bolsillo.

Cerro la puerta detrás de si y camino hacia la cocina, una sonrisa se formó en sus labios cuando vio a su madre metiendo al horno lo que parecía ser un pastel, la música estaba a un nivel de volumen considerado, y el pequeño Jordan estaba observándola atento desde su silla alta a un lado del desayunador.

  - Hola mamá - su madre giro sorprendida al escucharlo, no había escuchado la puerta y la expresión de sorpresa le demostró que no lo esperaba

  - Mi bebé - y hay estaba su mote de toda la vida - Thomas, qué bueno verte y que sorpresa - su madre se quitó el delantal al mismo tiempo que se acercaba a él, cuando estaba frente a su hijo mayor lo abrazo y beso - ¿A que se debe tu visita hijo?

  - Estaba de paso - el grito de Jordan llamo su atención y se acercó a él con una sonrisa aún más grande - Hola, hermanito bebé - lo saco de silla y le hizo mimos, su respuesta fueron gorgoteos y sonidos felices, se giró hacia su madre - ¿Y las gemelas?

  - están en sus clases de piano y pintura - lo miro de la manera en la que sólo una madre puede ver a un hijo, cuando sabe que este oculta algo - ¿me dirás el verdadero motivo de tu visita bebé?

Suspiro al mismo tiempo que miraba a su madre, siempre había pensado que se veía más joven de lo que era, pero desde la muerte de su padre hacia cerca de dos años unas marcas en sus ojos se habían formado, además de la perdida de cierto brillo.

Extrañaba a su padre, al igual que su madre y sus dos hermanas pequeñas, pero lo que más le dolía era que Jordan nunca conocería al increíble hombre que fue su padre.

  - Conseguí un trabajo - su madre sonrió ella sabía lo que había sufrido desde hace dos años cuando tuvo que dejar el ejército por fuerzas mayores - como guardaespaldas de una... Joven

  - Eso es bueno amor, ¿Cuando iniciaste?

  - Hace un par de días - Jordan recostó su cabeza sobre su hombro y con el chupón en su boca comenzó a dormirse - sentí algo mamá

  - ¿Algo cómo qué? - ella conocía la mirada de así hijo, sabía que quien fuera la mujer que cuidaba, él ya sentía algo, por más mínimo que fuera, por ella

  - Es lo que intento averiguar - paso su mano por la espalda de su hermano, estaba ansioso y nerviosos

  - Algo me dice que lo averiguaras muy pronto

Amor En Señas.                                          Duoligia Amores. Libro 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora